Las NB de Worthy (NEW BALANCE).
Hoy en día, la marca New Balance es una de las más populares en cuanto a calzado deportivo. Su línea de zapatillas urbanas es popularísima. Además, hace no mucho han dado el salto al fútbol profesional y tienen una buena presencia, vistiendo a equipos como el Liverpool, el Athletic Club, el Sevilla, el Celtic o el Oporto. Pero antes de esta época dorada, New Balance tuvo otra, en los 80, gracias entre otras cosas al baloncesto. Hoy vamos a recordar unas zapatillas míticas de aquella época, las que calzó el legendario James Worthy.
Estamos hablando del año 1985. James Worthy, elegido con el número 1 del draft de 1985, estaba en los Lakers, que junto a los Celtics es el equipo más mítico de la NBA. Se avecinaba una época dorada, con Magic Johnson y Kareem Abdul-Jabbar, entre otros.
New Balance era una firma muy antigua, nacida a principios de siglo XX en Boston. En sus inicios se centró en el atletismo, pero luego fue abriéndose a otros deportes. En 1985, NB lanzó su primera zapatilla con nombre de jugador. Era la New Balance Worthy 740. Las zapatillas, que incluían un modelo con los colores de los Lakers (como las Converse Weapon), llevaban el nombre del ala-pívot en la lengüeta.
La alianza entre Worthy y NB duró hasta 1990, cuando la relación terminó abruptamente. Hasta ese momento, ambas partes lanzaron nuevos modelos, como las P-900. Pero como os decía, ambos partieron peras en 1990 y Worthy se pasó a Adidas. Del mismo modo, NB se fue alejando del baloncesto, hasta su resurgir de hace unos años.
En este resurgir se enmarca la reedición de las Worthy 740 en 2014. En concreto, cabe destacar un modelo llamado ‘Tribute to 82’, en referencia al título de la NCAA logrado por los North Carolina Tar Heels, con Worthy como MVP y con Michael Jordan dando ya mucha guerra. Estas zapatillas homenajean a aquel equipo llevando los colores de los Tar Heels, es decir, el celeste.
Espero que os haya gustado el artículo. Es el penúltimo de la miniserie de zapatillas legendarias. Hasta mañana.
míticas kelme villacampa
07 enero 2018 | 13:32
La leche, no recordaba que las zapatillas deportivas de la época fuesen tan altas. Supongo que así el pie estaría bien protegido, que en un deporte como el baloncesto viene muy bien para prevenir lesiones de tobillo.
30 enero 2018 | 22:41