Bueno, vamos a ver, empecemos por el principio: ¿te acuerdas de la peli Mi amigo Mac?
Corría 1988 y aún nos duraba el efecto E.T. (estrenada seis años atrás, igual que nos ha pasado ahora con las pelis de superhéroes). El guionista y director Stewart Raffill quiso hacer su propia película de un extraterrestre amistoso. Voy a hacer un paréntesis para anotar que Raffill empezó en la industria del cine como supervisor de animales (tigres, leones, simios… Mike Henry, Tarzán en Tarzán y el Valle de oro, le demandó porque un chimpancé lo atacó. Como te lo cuento, Pili).
Total, que Raffill hizo su propia peli de extraterrestres para la cual se gastó 13 millones de dólares de los cuales recuperó la mitad. Aún así, Mi amigo Mac (Mac and me) se convirtió en un clásico de culto. Aunque los extraterrestres, las cosas como son, daban un rato de repelús.
En el diseño del alien se nota el humor británico del director. Si me apuras, hasta le saco parecido a Mr. Bean.
Mi amigo Mac nos contaba la historia de una Criatura Alienígena Misteriosa (Mysterious Alien Creature, M.A.C.) que se escapaba de «los malvados» de la NASA y era rescatado y escondido por un niño en silla de ruedas, Eric Cruise (interpretado por Jade Calegory).