Estoy intentando meter a los peques en materia de cine de los ’80. A ver, que ya lo veníamos haciendo, pero podemos decir que estos días le estamos poniendo un poco de ahínco al tema, porque no puede ser que un hijo mío me diga que no le gusta Los Goonies. De ninguna manera.

Entonces, para que aprecien «el cine del bueno», que es el que se hacía cuando yo era joven (como siempre han dicho padres y abuelos de todas las épocas), les estamos metiendo gránulo inyectado en technicolor (bueno, realmente ya no es technicolor, pero quedaba bien el chascarrillo).

En fin, que os podéis hacer una idea de por dónde van los tiros, ¿verdad? Les hemos puesto a los niños… La princesa prometida.

Qué monos. Parecen un ajedrez.

No les ha gustado. CAMIÓN, MÁTAME PRONTO. Aunque sí les ha gustado pillar la referencia de Érase una vez: Deadpool. Me voy a quedar con eso.

Al final, con esto de que la película no les gustó pero les iban llamando la atención ciertas cosas, como el tamaño de las manos de André el gigante o «esas piedras que tienen un aspecto raro«, más que disfrutar de la película disfrutamos de un rato de batallitas, de contar anécdotas y dar pinceladas de información aquí y allá. Que también es una forma de disfrutar de una peli 🙂

Y, como no podía ser de otra forma, me traigo la idea al blog y os cuento 10 de mis curiosidades favoritas sobre La princesa prometida. Lee el resto de la entrada »