Seguro que a más de uno no se os escapa que estos días han estado reponiendo Big en la tele: esa que trata de un niño de 13 años que pide el deseo de «ser mayor» y se despierta convertido en Tom Hanks, que imagina el susto.
El caso es que Josh (Tom Hanks) tenía un muy mejor amigo, que no era otro que Billy, interpretado por Jared Rushton, que fue casi una joven promesa del cine de los ’80.
Pero solo «casi».
¿Os acordáis de cuando Tom Hanks era un actor en ciernes que empezaba a abrirse camino en el espectáculo a través del cine de comedia y familiar? Los años y, sobre todo, ambiciosos proyectos interpretativos, como Náufrago o La terminal, han demostrado que es uno de los grandes de la pantalla, pero Hanks se hizo sitio en nuestras mentes, tiernecitas por entonces, con pelis como Esta casa es una ruina, 1,2,3 Splash y, por supuesto -y la que nos ocupa hoy- Big, de 1988: una cinta que nos contaba la historia de Josh, un joven de 13 años obsesionado con hacerse mayor, y cuyo deseo concede una máquina zíngara en una feria.
Pues el joven Josh, antes de convertirse en el treintañero Hanks, tenía nombre: se trataba de David Moscow.
