Los años ’90 dejaron muchas cosas inolvidables. Trágicamente inolvidables, de hecho. Una de ellas, los Teletubbies: ese show infantil, emitido a partir de 1997 y hasta 2001, que pretendía enseñar y entretener pero que, francamente, podemos al menos debatir si conseguía en realidad alguna de las dos cosas.
Los nombres de los Teletubbies, que todos sabemos que eran harto extraños, eran Dipsy, Tinky Winky, Laa-Laa y Noo-Noo. Pero había en ese despropósito festivo otros dos elementos: el narrador (Tim Whitnall) y el sol, que tenía la carita de un bebé angelical.
Pues ese bebé, por supuesto, era una personita real y su nombre era Jessica Smith.
Smith, nacida en Edenbridge (Inglaterra) tenía un año recién cumplido cuando su carita se convirtió en el sol que iluminaba el colorido mundo de los Teletubbies en la BBC. Unas pocas tomas de su rostro con diferentes expresiones fueron utilizadas y reutilizadas una y otra vez durante los cuatro años de emisión del programa regular, amén de dos ediciones especiales (Christmas in the Snow y Teletubbies Everywhere, en 2000 y 2002 respectivamente).
Pero Jessica no actuó más allá de esa incursión y creció como una niña más en su Kent natal.
De hecho, su identidad fue un completo misterio hasta hace muy poco tiempo, cuando confesó que ella había sido el sol original durante un juego con sus compañeros de la Universidad de Canterbury Christ Church (donde todavía estudia), ya cerca de sus 25 años.
Desde entonces, has contado con su participación en algunos programas de televisión, tanto como entrevistada como participante en diferentes eventos benéficos a favor de la infancia.