Hace cosa de un mes dediqué un par de post a los protas de Grease, uno de ellos centrado en cómo son los componentes de los T-Birds ahora, más de 40 años después.
Se me hizo entonces un poco raro (aunque de ninguna manera lo podía dejar fuera) tener que poner a Jeff Conaway, quien interpretaba a Kenickie, el tipo malote y líder de los T-Birds.
Y se me hizo raro porque, como seguro que muchos ya sabéis, falleció hace años. Así que entonces pensé que, aunque lo llevase de pasada a aquel post, podría hacerle un post para él solo en el aniversario de su fallecimiento que, os informo, fue ayer, 27 de mayo.
Y aquí estamos, para repasar la trayectoria de Jeff Conaway, el eterno Kenickie de Grease.
Conaway era neoyorquino de arraigo nacido en 1950. Una resta rápida nos dice que tenía 28 años cuando:
a) Interpretó a Kenickie, su más famoso personaje. Y
b) Comenzó su participación como Bobby Wheeler en Taxi, la serie en la que se mantuvo hasta 1982 junto a Danny DeVito y Carol Kane (entre otros) y que es su otro trabajo más conocido.
Por este último, por cierto, Conaway fue nominado en dos (y únicas) ocasiones a mejor actor de reparto, en los Globos de Oro, nada menos.
Pero cuando llegó a esos dos papeles llevaba ya varios años saltando de tele en tele. De hecho, hacía ya 15 años de su primer papel, cuando era adolescente, en la serie The Doctors.
A lo largo de los ’70 tuvo varios episódicos en diferentes series, algunas de tirón como Días felices o Kojak, aunque también participó en algún largometraje y (esto os va a encantar) solo un año antes de Grease lo veíamos en… PEDRO Y EL DRAGÓN ELLIOT.

El de la izquierda. Se llamaba Willy.
Os prometo que es él, aunque no lo parezca, que lo he buscado en todas partes y sí, es él. Os lo dejo en vídeo que sé que estas cosas os gustan 🙂
Después de Grease y de terminar Taxi en 1982 apareció con papeles protagonistas en un par de series más que, aunque no muy conocidas, sí tuvieron bastante calidad e incluso se llevaron algún premio. En Wizards and Warriors (1983) Conaway interpretaba al buen príncipe Erik Greystone, protagonista masculino, prometido con la princesa Ariel de Camarand y que está en lucha con el malvado príncipe Dirk Blackpool.
Después de Wizards and Warriors y de Grandes almacenes (1985) volvió a ir hacia abajo, quedando relegado a episódicos en un buen puñado de series (la más importante Belleza y poder, un superculebrón americano del que participó en unos 80 episodios) y algún papel anecdótico en películas de serie B, como la cuarta entrega de Doce del patíbulo.
No fue hasta 1994, casi una década después, que consiguió su siguiente papel realmente relevante, cuando se hizo con el personaje de Zack Allan en la laureada Babylon 5, un hito de las series (y el cine) de la Ciencia Ficción de los ’90.
Cuando Babylon 5 terminó, ya rozando el nuevo milenio, fue el principio del fin para Conaway. Sus problemas de adicción a las drogas y el alcohol empezaron a ser de dominio público y, de hecho, su última aparición famosa en televisión fue en la primera y segunda temporada (2008) de Celebrity Rehab with Dr. Drew, un reality en el que diversos famosos acuden a un centro de desintoxicación.
Realmente, la terapia no funcionó con él. Solo un par de años después Hollywood TV emitía unas preocupantes imágenes de Jeff a las puertas de un restaurante, donde se le veía tremendamente desmejorado.
Unos meses después de aquello (nos metemos en mayo de 2011), trascendía la noticia a la prensa de que Conaway estaba «peleando por su vida tras una sobredosis». A finales de aquel mismo mes falleció, siendo la causa oficial de la muerte «sepsis y neumonía». Tenía 61 años.
Jeff Conaway (5 de octubre de 1950-27 de mayo de 2011) Eterno kenickie en GREASE pic.twitter.com/cf7MDMpTyJ
— CINEMA ADICCION (@sestivill) May 27, 2016