Archivo de junio, 2020

Parte 2: 10 curiosidades -más- que no sabías de ‘Verano azul’

Hace 40 años (año arriba, año abajo) que TVE estrenó lo que sería uno de sus grandes éxitos de todos los tiempos.

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Claro que solo había dos canales entonces, que eso también hay que verlo, pero no es menos cierto que éramos mucha menos gente viendo la tele, que os recuerdo eran pequeñicas, con antenas y en blanco y negro en la mayoría de hogares. O en tonos azulados/verdosos, en algunas casas 🙂 La mía era enorme, y la sintonizabas abriendo una bandejita y dándole a unas roscas 😂 Y ahora nos quejamos si tarda en cargar Netflix. No somos nadie.

La cosa es que la prueba de que esta serie fue un éxito total no reside en sus índices de audiencia, sino en que, precisamente, 40 años después aún sigue siendo un referente en nuestra memoria colectiva. Incluso para aquellos que nacimos algunos años después de su primera emisión. Primera de muchas. Una temporada, 19 episodios (sí, solo 19) y un legado para la eternidad.  Si hace poco os contaba 10 curiosidades que no sabíais sobre la serie, hoy, amiguis viejunis, os traigo la prometida segunda parte: 10 curiosidades más que -quizás- no conocíais de… Verano azul.

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Si no has descubierto a Ana Milán esta cuarentena, tienes trabajo pendiente

Por Diosa, que alguien le diga a esta mujer que me quiero casar con ella, PARFAVÁ.

Ana Milán 2019

Ana en octubre de 2019 (GTRES)

Mira, por si acaso nadie la conoce ya se lo digo yo: Ana, cásate conmigo, mujer, que tengo tierras. Y además vivo en Asturias, que aquí en verano también puedes dormir tapada.

Lo mejor de la cuarentena, del 2020 y, si me apuras, de este siglo XXI, ha sido descubrir a esta mujer en su ociosidad de twitter, porque cuando el diablo se aburre con el rabo espanta moscas y esta persona se ha pasado internet y la inmortalidad ella sola y ha hecho temblar a media España. O sea, os lo estoy diciendo en serio: la tía hasta se ha cargado a Jordi Hurtado.

 

A ver, vamos a ir un poco por partes para quienes os sintáis un poco perdidos: por edad yo creo que la mayoría de los que por aquí nos andamos recordaremos a Ana por:

a) ser la «pérfida» Olimpia en Física o química.

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O b) ser la «pérfida» Victoria en Camera café.

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¿Y por qué esto de «pérfida»? Sus personajes te dejaban ese poso, porque a ver: una MUJER que manda, segura de sí misma, a la que no se le puede tomar el pelo y que te manda a la mierda si intuye que pretendes pasar por encima de ella… Pues qué va a ser, ¿no? Pues una pérfida, está claro. Si fuera un tío pues sería presidente de un club de fútbol o algo, pero no es el caso.

Bueno, a ver, que igual un poquito pérfida sí que… Whatever. Lee el resto de la entrada »

10 curiosidades INCREÍBLES de ‘Los vigilantes de la playa’

Yo no sé cómo será la playa a la que vais vosotros, pero ya os digo yo que a la que suelo ir yo no tiene NADA que ver con la de Los vigilantes de la playa. Y menos mal, porque ya te digo yo, Pili, que si yo llego a la arena y veo que para rescatarme si me ahogo están Bertín Osborne y las azafatas del Telecupón, se va a meter al agua Rita la Cantaora.

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Pero bueno, que quién no se acuerda de esta serie de salvavidas reconvertidos a policías reconvertidos a investigadores reconvertidos a cuerpo de anti-narcotráfico, ¿verdad? Si es que no había problema que no pudieran ellos resolver. Si lo que hace Frank de la jungla ya lo hacía Mitch Buchannon, y sin crocs ni nada, descalzo y a lo loco.

Los vigilantes de la playa, con sus diferentes repartos y fases, estuvo en antena desde 1989 (¡los ’80!) hasta 2001, nada menos, con un total de 11 temporadas y algunas películas, la última de las cuales es la protagonizada por Dwayne Johnson Zach Efron, y que os recomiendo mucho porque es una risa.

En 11 años y más de 200 episodios, creedme, se pueden acumular muchas anécdotas y curiosidades, y hoy os traigo mis 10 favoritas que estoy casi segura que os van a dejar con el culo torcido muy impresionados xD

¡Arrancamos! Lee el resto de la entrada »

El final que no conoces de ‘La pequeña tienda de los horrores’

Hoy tenemos en el blog un artista invitado. Démosle una calurosa bienvenida a Jesús Damieta, de Hay un blog en mi sopa.

Yo os cuento: como big minds think alike, resulta que el otro día, al tiempo que os hablaba yo de la vuelta de Rick Moranis al cine y de que de repente tenía antojazo de ver otra vez La pequeña tienda de los horrores, que es esa maravilla musical que debería salvarse junto a las cucarachas al llegar el fin del mundo (porque las cucarachas también tienen derecho al buen cine)Jesús, en su blog Hay un blog en mi sopa, que os recomiendo mucho, hablaba de «El otro final de ‘La tienda de los horrores'». Que yo en principio pensé que era una metáfora, una alegoría, un decir si lo preferís. Pero no: resulta que Frank Oz había pensado para La pequeña tienda de los horrores otro final bien distinto del que yo no tenía ni idea y que, por cierto, yo prefiero una y mil veces.

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Me sentí un poco avergonzada, la verdad, porque La pequeña tienda de los horrores, que yo vi por primera vez siendo muy, muy pequeña, es desde siempre una de mis pelis preferidas y yo descubrí por primera vez su final alternativo y la historia que hay detrás en el blog de Jesús, en un post que prometía mucho empezando así:

El otro día vi por error un fragmento de ‘Rise of Skywalker‘, el episodio IX de Star Wars. Está bien, en realidad lo vi deliberadamente, pero cualquier cosa relacionada con esta película es automáticamente un error, incluida la voluntad de verla. Así que, insisto: lo vi por error.

Al poco rato me empecé a sentir fatal. Me dolían los ojos y notaba inflamada la vergüenza ajena, como si fuese un órgano físico. ¿Qué podía hacer? Llamé al 112 para que me pasasen con el crítico de cine de guardia, pero estaban ocupados con no se qué de una pandemia. Tras una larga espera me enviaron un licenciado en audiovisuales.

Encontré su entrada tan completa y bien contada, que no me pude resistir a preguntarle si me dejaba traerme su post a este blog. No me la traigo entera porque es muy extensa, así que os comparto un buen pedazo y os invito a leerla entera en su versión original en su blog. Lee el resto de la entrada »

Entre el cáncer, el arte excéntrico y Mark Twain: así es ahora Val Kilmer

Yo a Val Kilmer le tengo un especial cariño por muchas razones. Una de ellas es que fue uno de mis primeros post cuando me hice cargo de este blog, hace ya tres años. (¿Tres? Sí, Mari, tres. No somos nadie). Ya por entonces os contaba que, justo hacía un mes, Val había hecho público el motivo de su tremendo cambio físico de los últimos meses.

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Pero vayamos por partes y pongámonos un poco en contexto:

Val nació la nochevieja del ’59. Debutó como actor en 1981 y sólo 3 años más tarde lo petó con la desternillante Top secret! interpretando al maravilloso Nick Rivers, un afamadísimo músico al más puro estilo Elvis, parodiándolo deliciosamente.

25 añinos, tenía. Criaturilla.

Por si fuera poco, y después de pasar por Top Gun, en el el ’88 fue el atractivérrimo Madmartigan en Willow, una de las grandes pelis de culto de los ochenta (por cierto, ¿qué fue de Willow?).

Y ya rematamos en el ’95, cuando fue Batman en Batman Forever. Que, personalmente, como Batman era el que menos me gustaba, hasta que llegó Affleck y los hizo buenos a todos xD. Pero a ver, el traje de Batman es que aporta mucho a cualquiera. Me casaba con el traje. Además, hay que decirlo, es al que mejor se le reconoce con la máscara puesta, porque no hay mucha gente que pueda presumir de morros como él.

Esto, claro, sin olvidar papeles inolvidables como en The Doors (donde clavó a Jim Morrison), La isla del Dr. Moreau o El Santo. Pero, poco a poco, y a pesar de que nunca ha parado de trabajar, la presencia de Val en las pantallas se fue apagando. Lee el resto de la entrada »