Puede uno pensar al verlo que Andrew es un músico venido arriba en el cine, pero eso es solo por lo mucho, mucho, que en los ’90 se nos parecía a nuestro Loquillo.
En realidad, Andrew ‘Dice’ Clay es actor. Siento estropearos la fantasía. Es actor a secas, y cómico, que no es poco.
En 1990 se estrenó en cines Las aventuras de Ford Farlaine, que muchos recuerdan simplemente como Ford Farlaine, el detective rockanrolero. Juro que una vez, hablando con un amigo, le dije: «Esto como en la peli de Las aventuras de Ford Farlaine» y me respondió: «¡Ostras! ¿Esa que es, la segunda parte?». Ahí hemos llegado.
Pero no: es única e inimitable, por suerte o desgracia. Un prota machista que ríete tú de José Luis Torrente, investigando la desaparición de una groupie y el asesinato de un cantante heavy. El detective, claro, se lleva consigo a su sexy secretaria y aprovecha para ponerse hasta arriba de batico de sambuca, que si no lo sabéis, os informo de que es un licor tipo anís y que el batido ese tenía que llevar azúcar como para dar asco a las moscas.
¿Lo mejor de la peli? Pues el doblaje. Bueno, a ver, el doblaje era ‘malo pa perro’, que decimos en mi pueblo, pero era Pablo Carbonell, cantante de los Toreros Muertos, que en plena huelga de actores de doblaje le toco doblar a Dice Clay y que, con todo su morro y gracia, hizo lo que le dio la santa gana y hasta metió el estribillo de Manolito. Increíbleble.
¿Y qué fue de Andrew, después de esto? ¿Aún tiene «su pel-lo»?
A ver, lo primero que hay que entender sobre esta peli es que aquí lo petó, pero por el doblaje de Carbonell, que era de un absurdo que no se podía con él. La película en el mundo (en los USA especialmente), pudiendo haber sido un taquillazo, fue un fracaso estrepitoso. De hecho, recaudó finalmente poco más de lo que costó, lo que no está mal, pero podría haber sido mucho más. ¿Y por qué? Pues porque su protagonista, de profesión cómico, Dice Clay, salió en la MTV con un monólogo lleno de chistes obscenos, homófobos, racistas y misóginos que fue demasiado incluso para la MTV, que lo echó de por vida. Los EE.UU. se le echaron encima, boicotearon la peli y le declararon non grato en programas y cadenas de televisión de todo el país.
Por eso Dice Clay no se convirtió en la superestrella que quizá, desde aquí, esperábamos que fuera. En su página web se lee:
Su carrera hacia la fama fue meteórica, vendiendo álbumes de platino, y protagonizando papeles en películas y especiales de televisión. Su descenso fue igual de épico en la industria al convertirse en el hombre a odiar por cada grupo de corrección política del país.
Todo esto lo contó después en su libro The Filthy Truth.
A lo largo de los ’90, Dice estuvo metido en varios proyectos, dos de ellos papeles protagonistas en dos series para la TV: Bless This House y Hitz.
Después de eso, cerró la década (y abrió el milenio) con varios títulos en el cine, como Misión suicida, Foolish, o Point Doom, para justo después, bastante derrotado, tomarse un largo descanso de diez años (2001-2011) de pantalla, años durante los cuales sobrevivió con su faceta de cómico en clubs de comedia, hasta que reapareció en el show de Howard Stern on Demand.
Su gran reaparición, sin embargo, fue en 2013, cuando interpretó a Augie en Blue Jasmine, junto a Cate Blanchett. La película fue un éxito, y la interpretación de Clay muy alabada.
Desde entonces, parece que poco a poco va recuperando un lugar en la industria. Ha hecho algunos papeles episódicos, de los cuales me quedo con su aparición en The Blacklist, aunque tal vez eso sea por lo mucho que me gusta James Spader, protagonista de la serie. No lo puedo evitar. Si tenéis curiosidad, lo tenéis en el episodio 8 de la primera temporada, en Netflix.
El año pasado, se incorporó como Sonny Knox a la tercera temporada de Hap & Leonard, una serie de suspense en Prime Video ambientada en el final de los ’80, al más puro estilo del cine negro.
Y lo último -esto seguro que si no lo sabéis os va a encantar- tuvo uno de los papeles protagonistas en la galardonada Ha nacido una estrella, con Lady Gaga y Bradley Cooper, en la que Andrew aparecía como Lorenzo, el padre de Ally (Gaga).
Después de formar parte de este set, Clay hizo pública su intención de abandonar la industria del cine.
Tengo un buen recuerdo ahora entre Woody Allen , Scorsese, Warner Bros. y esta película más grande que la vida.
Me parecería comentable su aparición en Entourage como Andrew Dice y que en 2016 es protagonista de una serie de dos temporadas que tiene su propio nombre.
14 julio 2019 | 12:29 pm