No quisiera ser yo quien os chafe el final de Cómo conocí a vuestra madre, pero la madre en cuestión –atención spoiler– era Tracy McConell. Vamos, esta chica:
De este momento en que la chica del paraguas amarillo y Ted se conocían al fin, después de nueve temporadas, hace ya -y que a nadie le de un perreque- casi cuatro años. Y, aunque es verdad que, desde entonces, Cristin ha tenido varios papeles, especialmente en series, como De la A a la Z, Fargo y The Mindy Project, yo firmo por verla una y mil veces en Black Mirror, serie original de Netflix que acaba de estrenar hace nada su cuarta temporada y en la que Cristin tiene uno de los papeles principales en el primer capítulo: U.S.S. Callister.
Black Mirror es, sin duda alguna, una de las mejores series de este siglo. Yo divido los 19 capítulos que tiene repartidos en sus cuatro temporadas en tres categorías: buenos, muy buenos y espectaculares. Y luego hago dos subdivisiones más: los que cuando terminan te dejan con una sensación de esperanza (como el laureado San Junípero, 3×04) y los que te dejan con un sentimiento de terror atroz, (como el espléndido Blanca Navidad, 2×04). Pues U.S.S. Callister es de los espectaculares que te dejan con miedito. Es sencillamente magnífico. Con más de dieciocho mil valoraciones en IMDb, se lleva un 8,4 de media. Y poco me parece.
Como no quiero estropearos el capítulo, os cito la sinopsis oficial (escueta como siempre, para no revelar nada):
Una mujer se despierta en una nave al estilo Star Trek en el que la tripulación alaba a su entendido y audaz capitán.
«Una mujer» es Cristin Milioti, que interpreta a Nanette Cole.
Milioti borda el papel en todas sus facetas, aunque es cierto que cuando el guión es brillante es difícil no brillar con él.
Bueno, con el guión y con los aparatos, que también brillan lo suyo.
Y en Fargo no cuenta?
02 febrero 2018 | 1:32 pm