¿Recuerdas cuando dije que los autónomos somos inmunes a las enfermedades, que cuando trabajas por cuenta propia nunca enfermas o que si enfermas te jodes y vas igualmente a trabajar y que vosotros, asalariados, sois unos quejicas y a la mínima ya estáis pidiendo bajas por cualquier tontería (y los funcionarios, ni te cuento), y que si vuestro sueldo dependiera del día a día y no de una nómina ya veríais cómo se os quitaba el cuento de un plumazo?

¿Lo recuerdas? ¿eh?

Bueno pues, olvídalo.

Estoy malito, me duele todo. Hasta el teclado me baila. Me siento como un koala en un iceberg que se aleja de la costa. Temblando de frío y sin nadie que me arrope. Será un virus raro de esos que sólo atacan a los taxistas machotes, supongo.

¿Qué hago? ¿Me apago y me enciendo?