Ayer Paula me propuso un nuevo Experimental Taxi Club con ella de gancho. La idea consistía en hacer entrevistas fictícias a los usuarios de mi taxi (valiéndose de un micro con el logo de RNE que tomó «prestado» del curro), en plan reportera copiloto, mientras yo conducía. Quería con ello que me fijara en los cambios que experimenta cualquier persona cuando cree que su testimonio será escuchado por millones de oyentes.
Hace tiempo reparé en este curioso fenómeno, pero a la inversa. Cuando grabé aquella sección de cámara oculta para El Intermedio (la Sexta), los usuarios no sabían que estaban siendo grabados hasta el final de la broma. Nada más enterarse, la gran mayoría reaccionaba con cierto nerviosismo, ilusionados por salir en la tele. Incluso llamaban por teléfono para decirle en seguida a quien fuera lo que acababa de ocurrirle y que, Dios mío, ¡saldría en la tele!
En esta ocasión, como digo, Paula tomó asiento a mi lado y, micrófono en mano, comenzó a abordar a cada usuario. No había grabadora. De hecho, enganchó el otro extremo del cable a un paquete de kleenex dentro de su bolso.
Imaginad la secuencia: Se monta el usuario en el asiento trasero, me indica la calle y entonces se asoma Paula y dice:
– ¡Hola! Soy Teresa Gronch, del programa Las Mañanas de RNE. ¿Lo conoce?
– ¿El de Juan Ramón Lucas?
– Sí, ese. ¿Conoce la sección «Protagonista del día»?
– No. ¿De qué va?
– Cada día tomamos un ciudadano al azar y le convertimos en protagonista. Hoy le ha tocado a usted, ¿qué le parece?
– No sé… ¿y qué tengo que hacer?
– Contarnos lo que a usted le parezca.
– ¿Y esto lo escuchará mucha gente?
– Millón y medio de oyentes, tirando por lo bajo.
– Venga, vale. Espere que me quite la chaqueta.
A lo largo del día de ayer fueron siete los usuarios «protagonistas», de ocho en total. Sólo uno declinó la propuesta de Paula (alegó que no tenía a nada importante que decir, ni nadie en especial a quien dirigirse; pero nos contó su vida igual, a «micro cerrado»). Los siete restantes, nada más iniciar la supuesta grabación, modulaban la voz de un modo distinto y sus gestos, en efecto, cambiaban. Se hacían más rígidos. Más solemnes. Una usuaria llegó a decirnos:
– Espera, espera. No grabes todavía – y se atusó el pelo.
– Es un micro, no una cámara, señora – soltó Paula tratando de contener la risa.
Al finalizar todos nos preguntaron cuándo emitirían la grabación.
– Mañana a las 10:30 en Radio1 usted será el protagonista del día – les dijo Paula a todos y cada uno de ellos.
Todos ellos, en fin, hoy a las 10:30 estarán pegados a la radio. Ellos mismos y muchos familiares y amigos también (habrán corrido la voz, seguro). Ahora me encantaría saber cómo reaccionarán cuando no se escuchen o se den cuenta de que esa sección ni siquiera existe.
¿Putada dices? No lo creo. Al menos, durante un rato, se sintieron protagonistas.
Nota para Juan Ramón Lucas: Hoy, en torno a las 10:30, la audiencia de tu programa aumentara en torno a 30-40 oyentes más. De nada.
Esteeeee… no me convence a mí el experimento con cobayitas humanas. Tiene algo de humillante y no demuestra nada que no supiéramos ya. Bueno sí, que Paula -que creo quiere decir pequeña, aunque Marisa dice que otra cosa- le echa morrito.
Yo, como Mi Lobito, me hubiera rehusado del alcahofo impertinente.
12 enero 2011 | 15:49
Núria, muy buna esa noticia que has puesto de las cmpanas extractoras del Japón. Nunca había entrado en ese periódico digital.
Le Colère, tienes razón, Paula significa pequeña , pero también hermosa; que lo busqué hace muchos años, cuando los ordenadores estaban en pañales y las bibliotecas eran las fuentes de investigación más frecuentadas.
Caray con el Paranoia, nos ha hecho un comentario muy interesante sobre el efecto ese mariposa acoplado al caso del amorío de Simpulso.
12 enero 2011 | 16:06
Marisa no me seas tan «kotilla» k el link iba para la Frateli, eh! 🙂 ( esto es bromaaaaaaaaaa )…
P.D.: En algunas ciudades asiátikas lo k + prohiben tiene k ver con los chicles: en Singapur es ilegal mastikar chicle y en Tailandia tirarlo al suelo está penalizado con cárcel 😉
12 enero 2011 | 16:53
Yo NO pude entrar con mi gorro de Bobby inglés ( de plástiko ) en la catedral de Canterbury ( me lo tuve k kitar ) y casi no entro en la Basílica de San Marcos en Venecia por llevar un vestido ( bastante ) minifaldero…( ese k viste en la foto Lobo ) 😉
12 enero 2011 | 16:55
Di que sí, Núria, tu dale más ideas a la Srta Pajín y al gobierno en general para que nos sigan asfixiando con prohibiciones y sus consabidas penalizaciones:)
Que con esa nueva Ley que nos van a poner de la Igualdad de trato, hasta el cerdo, y el jamón en concreto , por atentar contra creencias de algunos su consumo nos va a estar vetado «por si ofende y veja» a alguien. Es broma
12 enero 2011 | 17:02
Haaaaaay!!!! ( suspiro )
Pero que bonito es el amor………………
12 enero 2011 | 17:27
Comparto la opinión de los que piensan que es un experimento con poca gracia.
Es más, resulta bastante infantil.
Todos somos protagonistas de nuestra película diaria.
Yo con eso tengo bastante.
12 enero 2011 | 17:44
Marisaaaaa jamía mira a que horas llego ¡que vida la del perro si no le faltase el pan!
Pos a mí me encantaría meterme en un relitichow de esos de la tele pa jartarme a comer,pillarme unas buenas piolas y a vivir después del cuento oyesss! Y lo que se revuelcan jamíaaaa, que el pitufo de Málaga y la fina filipina de Parla del GH12 llevan más asaltos que el Tyson. Estan to el día zumba que te zumba la zambombaaaa! Le va a dejar KO la muy abusona al pobre zagalín si casi lo hace padre! ¿Que no les llega este año a los de teletrinco para comparles unas gabardinas do pitooo a los zagales? ahora fisna me he ponío yos!
A mi se me ponen el alcachofo y ¡me lo comooooo!
12 enero 2011 | 17:55
Paula: Buenos días (Tardes, noches) caballero sin lacayo ni corcel. Soy Teresa Gronch, del programa las Mañanas de RNE. ¿Conoce usted la sección Protagonista del día?
Caballero: Obviamente si… La conozco.
Paula: ¿Si? ¿En serio? Mmmm…. Vaya… Si, este… Ejeeem… Bien… Entonces sabrá en qué consiste… ¿Se anima a ser nuestro protagonista? ¿A contar su historia? ¿A…a….Hacernos participes de su vida?
Caballero: ¿Y usted? ¿Usted se anima a que mis ojos lean los suyos? ¿A qué diseccionen sus palabras mis oídos?
Paula: Bueno… Verá… ¿Su nombre?
Caballero: Puede seguir llamándome caballero.
Paula: Je… Bien, caballero… Pues… No podemos invertir los papeles….Yo solo hago mi trabajo. ¿Entiende?
Caballero: Si, jaja, ¿Cómo no iba a entenderlo? Yo hago lo mismo. Por favor, ¿Podrían arrancar ya? Tengo prisa.
Paula: Si, si… Nos ponemos en marcha, tampoco queremos que llegue tarde a donde quiera que vaya. Dígame… ¿Entonces usted también es periodista?
Caballero: No. Yo también soy un farsante, timador. Además de inventor. Son cosas que a veces se dan la mano ¿Sabe?
Paula: Espere, espere… Un farsan… ¡Yo no soy ninguna farsante! Inventor… Si que tiene inventiva, si…
Caballero: Si, tanta como para crearla a usted.
Paula: ¿Pero qué dice?
Caballero: Digo que usted existe porque yo la creo y la imagino. Nada más. Sin mi… No hay un Paula.
Taxista: Cállese. No sabe lo que dice… Déjela en paz. ¿Qué coño se ha creído?
Caballero: ¿Y tú? ¿Tú en qué crees, en qué has creído?
Taxista: Ella es mía. Reside en mí. Solo yo sé, compongo y disfruto sus formas.
Paula: Dani… Dile que soy real, dile que… Soy de verd….. . . . . .
De repente un extraño vacío (Extraño porque estaba lleno de matices) inundó el taxi. Paula se hizo aire. Se hizo humo de tabaco aromatizado. Olía a deseo y a agua salada, que no es lo mismo que a mar. Se hizo recuerdo y ansias y espacio. Se hizo hueco, vértigo, ausencia de pulso. Y llenó todo, siendo… La misma nada.
Taxista: ¡Hijo de puta! ¿Pero cómo has hecho eso? Devuélvemela. Era mi creación y el lugar donde me recreo.
Caballero: Creí creer, que queríais que fuera protagonista… Protagonista de mi historia, de una historia, de vuestra historia ¿Qué importa eso?
Taxista: Importa.
Caballero: Haberlo pensando antes.
–Y mientras decía estas últimas palabras, extendió una tarjeta, su tarjeta personal. Aquella que le representaba y por fin le ponía nombre, ofreciéndosela así al taxista–
Decía lo siguiente:
Sr. Caballero
Ladrón de ideas y otros artilugios.
Lo de otros artilugios, debía referirse, claramente al micro. Porque también se lo llevó con él, cuando una nube de humo y aire viciado, se adueñó por segunda vez del coche.
12 enero 2011 | 18:24
Jajajaja.
Muy, pero que muy bueno Abracabraba.
12 enero 2011 | 18:28
Abracadabra y Paranoiastreet :
Un fuerte aplauso os mereceis, por haber sido los protagonistas del día a los mejores comentarios, para mi gusto, naturalmente.
Simpulso, deberías felicitarles por su aportación a tu blog
12 enero 2011 | 18:57
Los protagonismos no me van; soy más de actores (mal llamados) secundarios.
12 enero 2011 | 19:40
En serio, no te preocupa en absoluto pensar que 7 personas más sus amigos y familiares tengan ilusión y que mañana sientan tristeza y decepción? has pensado ( si esto es verdad, claro) que posiblemente estarán haciendo virguerías para poder escuchar la radio a esa hora y sufriendo si se les escapa el momento de gloria? Al fin y al cabo vanidad humana que todos sin excepción tenemos cuando sabemos que nuestra opinión va a ser considerada y escuchada.
Si los actos que os proponeis tú y Paula para entreteneros son estos, son reflejo de un interior que no puedo entender
12 enero 2011 | 20:37
Pero si así son felices… dejadles, a veces apetece anteponer la felicidad a un ideal o patrón de comportamiento. Se alegran creyendo en ser protagonistas, como quien encuentra a Dios la excusa perfecta para ser feliz. Sí, viven en la ignorancia, pero lo prefieren.
12 enero 2011 | 20:38
Uoooh… Qué suerte haber leído el último comentario de Marisa G.S. y por curiosidad los de Abracadabra y ParanoiaStreet… Gracias a los tres.
12 enero 2011 | 20:45
Plas, plas, plas abracadabra!!!
12 enero 2011 | 20:49
A mi Tampoco me gustan las personas que se divierten a costa de los demás, que no con los demás, mira q. Podíais inventaros algo en lo que todos seais protagonistas y sinceros por igual.
12 enero 2011 | 21:23
me encanta esta Paula. Si antes ya tenía ganas de ir en ese taxi, no te (os) quiero contar ahora! Si en algún momento necesitáis hacer un experimento en el que vas con la luz de libre pero dentro está Paula con la cámara y yo detrás de pasajera (tipo okupa como en los antiguos alquileres), a ver quien se sube y que historia os cuenta, me llamáis.
12 enero 2011 | 21:28
Ejejee weno Marisa con el tema chicle no creo k seamos tan incívicos akí …bueno a excepción de los Valencianos k tienen prohibido comer chicle dentro del esceanográfico…¡k gorrinos! 😉
12 enero 2011 | 22:09
Creo que somos mayorcitos para ir haciendo estas cosas. Una cosa es que vosotros os divirtais haciendo vuestras cosas intimas y os recreeis en vuestras fantasias sexuales, y otra, muy distinta, es que os creais dueños para reirse de la gente.
Es verdad, que en situaciones asi la gente cambia y suele no querer hacer el ridiculo, por ello inventan, crean o hablan de cosas inciertas, de falacias. Pero eso no os da derecho a hacer lo que habeis hecho.
En fin, Paula tal y como vino puede irse, asi de rapido. Cuidado. Una mujer es siempre una mujer.
12 enero 2011 | 22:20
Me gusta cuando comentas tus primeras citas, pero ya está bien, de aqui a un mes nos cuentas como sigue el tema y mas q suficiente..
A pasar buena noche, q cada cual la pase como mas le guste.
12 enero 2011 | 23:18
No quiero dar ideas pero deduzco tu sueldo. Cuidadín!
13 enero 2011 | 00:23
En fin, recientemente he conocido tu blog y tan solo he leido varios post salpicados .
No soy experta en tu blog y no sé dónde empieza la realidad y dónde acaba lo ficticio, pero si algo hay de realidad en el personaje «Paula» es que que está como drian en mi pueblo «sorbiendo el seso».
Ten cuidado acabarás mal, chaval.
13 enero 2011 | 00:24
Núria, dices lo del chicle, pero a mí una amiga de Zamora me ha dicho, y conste que lo sabe de muyyyy buena tinta, que van a intentar prohibir las pipas en las procesiones de allí,. Por lo visto es una costumbre muy arraigada en la capital eso de comer pipas durante las procesiones de Semana Santa, sobretodo en una, aunque no recuerdo cual es.
Y van a poner un bando para este mismo año, poniendo multa de 100 euros a quien pillen comiendo pipas, o la condena de un mes de barrendero. Con lo que piensan ahorrar en sueldos y así disminuir el déficit del Ayuntamiento
13 enero 2011 | 00:28
Simpulso, me parece muy bien tu super ‘experimento’. Soy periodista y sé cómo actúa la gente cuando le pones una cámara, un micrófono o una grabadora pero…a parte de que creo que es un experimento sin gracia, sin sustancia y sin sentido te diría que además TE INFORMARAS ANTES de dar saludos a Juan Ramón Lucas y de tomarte la licencia de poner una hora para la emisión ya que…EL PROGRAMA DE LAS MAÑANAS termina a las 10 DE LA MAÑANA y no a las 10.30!!!!
……..
13 enero 2011 | 13:44
Lo que se aprende en un taxi…
25 enero 2011 | 19:23