He pasado varios días junto al mar, sin periódicos y conectado con el resto del mundo únicamente a través de www.20minutos.es.
En casa, me habían guardado los diarios viejos y ayer tuve la oportunidad de echarles un vistazo rápido. Comencé con El País del viernes para leer tranquilamente todo lo interesante que me había perdido durante un largo y maravilloso fin de semana al sol. Buscando la columna de Sol Gallego, fíjense con lo que me topé: ¡la gallina!. Cada vez que veo esa bandera fascista con la gallina se me ponen los pelos de punta. Me da miedo. Y eso que tiene los mismos colores de mi bandera…
Estoy reflexionando sobre el comportamiento de nuestros líderes políticos. ¿Acaso se están volviendo locos? Me refiero a Zapatero y a Rajoy, pues, es esto de la crispación y de la bronca entre dos, tanto monta monta tanto. Conste que no soy ni trato de ser equidistante. Tengo mi corazoncito en el lado izquierdo y mi bolsillo en el lado derecho, como todo hijo de vecino. Pero, aunque se me vea el plumero -que nunca trato de ocultar- soy bastante libre y aquí escribo, como dije el primer día, como si fuera libre.
Ahora me voy corriendo a cosas del trabajo atrasado pero volveré con esta reflexión esta noche o mañana. ¿Hay por ahí alguien sensato?
Si es así, que diga algo, por favor.