Hola padre,
La verdad es que el blog está bien. Me gusta la sinceridad con la que escribe el público.
Te comento que el PDF de los periódicos cuesta leerlo.
Si no es el titular principal, no se ve casi nada de lo que has remarcado. Los piés de foto son completamente ilegibles. Mira a ver si lo puedes ampliar, o hacerlo ampliable.
Me gusta mucho y te sigo.
Erik
lo dijo Erik Martínez Westley • 24 Septiembre 2005 | 12:08 PM.
Gracias, hijo, por tus críticas.
Me gusta conocer tu opinión, siempre más sincera que la de una parte del público, que me llega tamizada por el anonimato. Me interesan más las opiniones de quienes dan la cara, al menos con su nombre de pila, que la de quienes se ocultan tras una máscara que los convierte en valientes anónimos.
Decía Bécquer:
“Al dorso de un billete de Banco cualquiera hace poesía”
Detrás de una máscara, sin asumir coste personal alguno (y ya sabemos que donde no hay coste, tampoco hay beneficio), las opiniones anónimas tienen el valor del comportamiento incontrolado, mordaz, vengativo, tierno o burlón que mostramos tras el antifaz del Carnaval.
Aprecio los comentarios anónimos en lo que creo que valen: como desahogo interior de un público jodido por una atmósfera de miedo y represión que, a veces, resulta asfixiante, o bien, de un público cachondo que quiere divertirse y pasar el rato.
También me gustan los que usan seudónimos fijos porque puedes rastrear su coherencia. Algunos tienen, incluso, dos seudónimos fijos (como el bueno y el malo o el yin y el yan).
Esto de Internet es genial. Parece que hablas en la plaza publica de tu pueblo,entre amiguetes, y, en cambio, te leen por todo el planeta. Acabo de recibir un mensaje de Chencho, desde Los Angeles, preguntándome cómo se abre este blog.
Agradezco, de verdad, todas las opiniones, especialmente las críticas. Recuerda lo que te decíamos cuando eras pequeño para explicarnos tus rabietas:
“Vale más mala atención que indiferencia”
¿Qué te voy a contar a ti –que eres un payaso- sobre el valor liberador que tiene el anonimato y, sobretodo, el placer que nos produce el desenfreno en las fiestas del Carnaval o el subidón que te da interpretar a otro personaje en el teatro?
Me gusta este experimento bloguero por lo que tiene de locura cibernética-carnavalesca. Internet es el auténtico carnaval de nuestro siglo (perdona, hijo, quiero decir, del tuyo).
Pero también estoy aprendiendo mogollón sobre mí mismo. Aparte de los comentarios que van directamente, y en abierto, al blog (o a mi yugular), estoy recibiendo mensajes emocionantes a mi correo personal de amigos, conocidos, colegas y desconocidos que son muy alentadores e instructivos.
No se si son más sinceros que los comentarios anónimos, pero tienen el valor de las monedas de curso legal. Sabes quien hay detrás del antifaz.
Espero más críticas tuyas en el blog o en persona (y así te vemos algún día). Tengo mi ego por las nubes y hay que bajarlo rápidamente a tierra. ¡Socorro! Si no quieres usar tu nombre oficial, puedes firmar aquí con el artístico (Pepino, Mr. Pickles o Jalalati) y así solo te descubrirán tus fans.
¿Vienes hoy por casa? Por si acaso, te diré que hoy cocino yo. El que avisa no es traidor. Un abrazo.
Tu padre.
de qué va este blog exactamente?
24 septiembre 2005 | 15:54
Ya te decía yo que esto tiene su miga. Dicen las estadísticas que pocos blogs superan los tres meses de vida. Ánimo y no te rajes, a ver si tú solo subes la media.
24 septiembre 2005 | 16:56
Ya podría tener yo estos recursos que tenéis los Martínez Westley para solventar los trapos de casa.
25 septiembre 2005 | 10:40
Hola JAMS.Bonita la idea de un blog. Sinceridad por sinceridad: yo «actuaré como si fuera libre». Es una de tus frases preferidas y lo traslado a «escribiré…como si fuera libre».Como editor de un periódico lider de la prensa gratuita de España; ¿cual es tu idea de la libertad de expresión?. ¿Hay formulada toda una ética al respecto o está condicionada a las circunstancias? ¿Cómo se práctica este principio periodistico en 20minutos?No se si me he pasado. Hay para hacer un master sobre el tema.Besos a los Martinez Wesley.
25 septiembre 2005 | 13:34
Teresa:Muchas gracias por tu comentario y por tus reflexiones y preguntas sobre la «libertad de expresión». La respuesta exige, desde luego, algo más que un master.(Creo que aún conservo copia de mi tesis doctoral sobre «El mercado de la prensa. La compra-venta de noticias.» Si la encuentro, te la prestaré.)Pero también íntentaré contestar a tus preguntas, que son las mismas que me hago cada día en esta jodida, pero hermosa, profesión. Como te he identificado por tu web (Avila Digital)aprovecho también para darte las gracias por los detalles que, a través de tu enlace, he conocido sobre la bomba que explosionó anoche en tu tierra, y que ha destrozado parte de nuestra imprenta.Estoy aprendiendo esta cosa mágica de los links (enlaces) y acabo de recomendar a nuestros lectores que pinchen en Avila Digital que (¡Oh! milagro!) me acaba de aparecer en color azul.También he aprendido hoy a enlazar mi blog con el de mi vecino, Arsenio Escolar, que también sale ahora (espero) en color azul. Me lo acaba de enseñar Rosalía, una amiga que sabe mucho de todo esto, desde Londres.Esto de Internet es la repera. Ricardo, subdirector de 20 minutos y responsable de http://www.20minutos.es, me recuerda siempre el cuarto mandamiento de nuestra web («Enlazarás padre y madre») pero soy un desastre (siempre lo he sido a la hora de cumplir con los mandamientos, incluido el sexto) y me olvido de hacer los enlaces.Soy nuevo en esto y mis hijos no tienen paciencia para enseñarme sus trucos cibernéticos. Los Martínez Westley estamos bien y con ganas de veros en Madrid, en Avila o en Almería. Os debo más de un copa.BesosJose A. Martinez Soler
25 septiembre 2005 | 14:36
Hola padre,Tan solo unas líneas en favor del anonimato. Comprendo que si tu das la cara, te gustaría que quien te escribe haga lo mismo. El nombre como moneda de cambio.En esto del vivir, todos llevamos máscaras. Así lo exigen las circunstacias (el trabajo, las obligaciones, los protocolos …). A veces, como sucede en el carnaval, no es hasta que, de hecho, te pones la máscara, que pudes ser tu mismo. Es decir, por extraño que suene, poner la máscara del carnaval, del desenfreno, quizás del anonimato, es en verdad quitártela.Es cierto, soy payaso, me pongo la nariz y me pinto la cara, es decir, llevo una máscara. A veces, sólo a veces, es entonces cuando puedo decir algunas de las cosas que me da la auténtica gana decir. Y se me concede, porque soy payaso, porque estoy loco, porque llevo la máscara y no soy nombre de persona.No subestimes los anónimos (y menos los pseudónimos). La sinceridad brutal que esconden, sin coste al nombre, puede ser reveladora.Vemos lo del photoshop este finde.Pickleswww.pepinopayaso.com
25 septiembre 2005 | 22:56
hola estoy tratando de promocionar mi web pero siempre terminan baneando el mensaje y la cuenta. espero ke aka no desde ya gracias http://www.freemaster.uni.cc/ o http://www.masterplace.uni.cc/
26 febrero 2006 | 06:38