La vida está llena de cosas aburridas: la sala de espera del médico de cabecera, los anuncios de Youtube, los apuntes de filosofía de Segundo de Bachillerato y el estilo de Angelina Jolie.
(Angelina flipando mientras lee mi post)
No me malinterpretéis, adoro y admiro a la actriz como profesional y como persona, pero una cosa no quita a la otra, y yo estoy aquí para hablar de su armario.
El estilo de Angelina Jolie es como una ensalada de lechuga y tomate. Sí, es comida, pero no te aporta nada. Jolie está tan atascada en los estilismos en blanco y negro que abrir su armario debe ser como ver una película de cuando a la televisión todavía no había llegado el color.
Elegante es un rato, se lo concedo, de este tipo de elegancia que viene de nacimiento, ese que hace que a tu madre siempre le guste como va vestida aunque se ponga una alfombra a modo de poncho.
Los escotes los usa con cuentagotas y es raro verla con prendas muy cortas. Como futura estilista yo le echo en falta colores, volúmenes, asimetrías… No os digo que se convierta en cliente de Agatha Ruiz de la Prada de la noche a la mañana, pero sí descubrirle que no todo es blanco y negro en esta vida, y menos en el armario.
Ya lo dicen por ahí: «La vida es demasiado corta como para llevar ropa aburrida«.
GTRES
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