[En otros posts he hablado de que, en más de una ocasión, opto por salir sin sujetador. Lo veo algo cómodo para ocasiones e incomodísimo para todas las restantes, por lo que asumo que se me pueden notar en algún momento.]
Los sujetadores deportivos, que simplemente sirven para sujetar el pecho sin ningún tipo de relleno, suelen marcarlos a la perfección. Es por eso que en algunas fotos haciendo ejercicio estoy acostumbrada a leer el comentario del listillo de turno (que el listillo de turno suele ser un amigo para molestar) preguntándome que si tenía frío. No, no tenía frío, soy un ser humano con glándulas mamarias (al igual que él, por cierto).
La naturalidad con la que pienso en el asunto viene a ser una particular reivindicación feminista en la que me niego a cubrirlos. Son algo natural y si ellos pueden marcarlos con camisetas (sí, queridos, vosotros también vais a veces con los pezones como para rayar diamantes) quiero el mismo derecho sin escuchar los consabidos comentarios.
En una de estas, uno de estos ‘iluminados’ del Señor, me hizo notar en una foto que se me notaba el pezón. Vaya, ¿no me digas? Quizás es porque TENGO pezones.
La cosa es que le contesté que si tenía algún problema, a lo que respondió «Enseñalo!!». Sí, sin acento, estaba demasiado emocionado asumiendo que mi pezón estaba únicamente para uso y disfrute que se le olvidó añadirlo. Muy amablemente (es decir, sin mandarle a la mierda, idea que estuve acariciando) le comenté que con mi cuerpo hacía lo que me salía del gatete: «Lo enseño a quien yo quiero 😉 y no estás en la lista». Elegancia pura. La reina Elizabeth II aplaudía mi flema desde Buckingham.
Lo que mi interlocutor contestó fue lo siguiente: «Mejor, porque son muy pequeñas jajaja«. Pues bien que querías vérmelas gorrioncillo. No solo me cosifica sino que ataca a mi autoestima utilizando una red social.
En ese momento, sin pensar, puse una denuncia en Instagram a este usuario (denuncia que por cierto, les ha entrado por una pestaña y les ha salido por la otra. ¿Quién narices regula las quejas? ¿Monos?).
Sé que ese tipo de comentario a otra mujer, o incluso a mí misma en otro momento de mi vida, más joven en plena adolescencia, me habría hecho daño. Son estos ataques los que hacen que luego la gente desarrolle inseguridades y sea incapaz de aceptarse tal cual es, por lo que deben ser denunciados sin excepción.
El acoso no tiene límites y con las redes sociales es mucho más sencillo ya que no hay que dar la cara. Utilizando el teclado podemos dañar a personas que se encuentran a kilómetros de distancia. Pero lo realmente grave es que sin conocer a alguien (o aún conociéndolo) algunos se sientan con el derecho de criticar o juzgar por el físico cuando NADIE ES PERFECTO y somos mucho más que eso.
En tu perfil «SOBRE MI» dices: «Aunque lleve un blog de moda…».
Pues si esto es un blog de moda, limitate a hablar de moda y no te metas en terrenos que te quedan grandes y donde puedes salir escaldada, como asi ha ocurrido. Habla de trapitos, tus pezones no nos imprtan a nadie, y menos lo que te digan de ellos. Consejo de buen rollo.
«Bullying» de pezones, es la última gilipollez que me quedaba por oir. Y además era de uno solo, manda cojones.
Al #47, acerswap: has dado totalmente en el clavo, excelente análisis.
30 enero 2017 | 21:55
Gracias a todos por los comentarios, entiendo que no todo lo que escriba tiene por qué agradar a todo el mundo. Espero que próximamente encontréis temas que sí que resulten de vuestro interés. De todas formas, gracias por dedicarme vuestro tiempo.
Un saludo,
30 enero 2017 | 22:17
Por lo menos es de agradecer éste segundo comentario tuyo, y sería de agradecer que te limitases a escribir de moda, si entramos en tu blog es porque nos interesa la moda, no leer bobadas sobre si este me dijo no se que de un pezon y por eso es un machista y no se que. Sinceramente, parecía más serio pero tal y como lo estás llevando parece una rabieta de patio de recreo.
30 enero 2017 | 22:54
He leido tu post con sumo interés (el tema es de vital trascendencia para el desarrollo de la humanidad) y me pregunto si te hubieras cogido tal pataleta si ese comentarista se hubiera referido a tu pelo, a tu cara o al color de tus ojos. Si (según tú) los pezones son una parte del cuerpo como otra cualquiera, son como otra cualquiera, como pueden ser el pelo, los ojos o la oreja izquierda. Y me apuesto un pincho de tortilla y una caña a que si te hubiera dicho «bonito peinado» o «me encantan tus ojos» lo hubieras pasado por alto o hasta incluso habrías contestado «gracias». Pues entonces, si lo ves con tanta «naturalidad con la que pienso en el asunto», practícala.
Todo sin ninguna acritud y de buen rollito, que de vez en cuando me gusta leerte.
Un saludo,
31 enero 2017 | 12:16
Y decían que era de locos, que era imposible,que era muy mala cosa para mantener las mentes «dignas» y «sanas».
Y llegó. Los senos liberados de la coraza antinatura, antifeminidad de mentalidades equivocadas. Y en lugar de fines del mundo amaneció belleza mayor. La mujer ha de ser respetada, tanto vestida como desnuda, como el hombre. El cuerpo no puede ser enemigo del alma ni objeto de negatividad. Eso es un concepto antievolutivo.
http://www.taxidrivermovie.com/pictures/ashley-james-013117.jpg
31 enero 2017 | 12:27
Elevar muros pone alas al alma para superarlos.
http://hollywoodoops.com/Galleries/Rihanna-Topless-Album-Promo/riri.jpg
31 enero 2017 | 12:31