¿Qué significa que un niño con autismo tiene intereses restringidos?

Hace un tiempo, antes de la Navidad y casi coincidiendo con el décimo aniversario del blog, decidí que me apetecía un cambio estético. Era el momento de, entre otras cosas, buscar una nueva cabecera y foto de perfil.

A los blogs, como a las casas, conviene darles una buena mano de pintura de vez en cuando.

Desde ayer tarde estáis viendo el nuevo diseño. Sinceramente creo que el más bonito de los que he tenido, y hubo otros tres que tal vez algunos recordéis: un oso de peluche, el caballito rojo del tiovivo de los años veinte que hay en el parque de atracciones de Madrid y dos dibujos que representaban a Julia y Jaime y que hizo mi hija siendo poco más que un bebé.

El que tengo ahora es obra de la estupenda @Kamapon, cuyo encargo me ha hecho reflexionar sobre el bonito regalo que puede ser algo así, susceptible de ser convertido en llavero, taza, vinilo o camiseta.

En fin… a lo que iba. Kamapon me pidió varias fotos para poder dibujarnos y también información sobre nosotros, sobre lo que os gustaba a mis hijos, así que me puse a elaborar una lista de los intereses de Julia y de Jaime.

Elaborando esa lista pensé que podía servir para ejemplificar qué es exactamente eso de los intereses restringidos que tienen las personas con autismo.

Precisamente esos intereses restringidos y obsesivos se mencionan siempre como una de las principales características de las personas dentro del espectro autista, que ya os he contado que es muy diverso en sus manifestaciones, pero me da la impresión de que no siempre se acaba de comprender bien en qué consisten, por mucho que se trate de un elemento fundamental para establecer el diagnóstico.

Vayamos con el caso de mis hijos.

¿Qué le gusta, que le interesa a Julia? Pues Harry Potter, el voleibol, los pokémon, distintos tipos de libros entre los que destacan en este momento la serie de Yotsuba y de Chi, jugar a juegos de mesa y de rol, montar en bici, los caballos, ir al cine e inflarse a palomitas, jugar con otros niños a disfrazarse e inventarse sus teatrillos, dibujar, la serie de Haikiyuu!, películas como Dentro del laberinto, jugar con la Nintendo 3DS o la Switch, los crepés, irse de viaje con nosotros, la piscina, la comida japonesa…

Aún podría seguir un rato, pero no es nada extraordinario. En absoluto. Cualquier padre de un niño neurotípico (es decir, sin problemas o normal, esa palabra de la que huímos) y que conozca a su hijo también podría elaborar una larga lista de intereses a poco que se pusiera a pensar en ello. Serían otros diferentes: fútbol, Lego, judo, yo-kay watch, la patrulla canina, los robots… Los universos infantiles pueden ser tan amplios y ricos como los de los adultos.

Pero a los padres de los niños neurotípicos no suelen pedirnos que elaboremos estos listados, que los pongamos todos por escrito. En cambio, con los niños que tienen TEA (trastorno del espectro autista), es muy frecuente que nos lo soliciten en colegios, centros de atención temprana, terapeutas de todo tipo, servicios de ocio y respiro familiar, controles hospitalarios… «¿Qué intereses tiene tu hijo? ¿Qué le gusta?». Lo quieren saber porque esos intereses son las puertas de entrada para motivarle, para lograr distintos tipos de aprendizajes, para incentivar su autonomía y crecimiento personal.

Así de poderosos son los intereses de los niños y por eso deberíamos considerarlos siempre y en todos los casos como oportunidades.

¿Qué le gusta, que le interesa a Jaime? Pues a mi hijo, que tiene un alto grado de afectación, le gusta ver música en la televisión, sentarse en el sofá a mirar álbumes de fotos, columpiarse, nadar en la piscina, sacudir objetos tipo cuerdas o correas (por eso simple suele tener serpientes de juguete a su disposición y por eso su hermana dice que es de Slytherin), ponerse los cascos que mitigan los ruidos, golpear su tambor y los juegos motores (cosquillas y achuchones, porque ya es muy grande para lanzarlo por los aires). Poco más. Habría que pasar a centrarse en alimentos que le gustan especialmente, como el jamón, el pan o la gelatina.

Poco comparado con cualquier niño de su edad (once años) sin autismo. Poco comparado con su hermana de ocho años. Por eso trabajamos con él en casa y en su colegio para ampliar esos intereses.

Pero ese es mi hijo y ya os he contado con frecuencia que cada persona con autismo es diferente de todas las demás. ¿También en estos casos? Por supuesto. El número y tipo de intereses variarán en cada niño, pero tendrán en común que serán pocos, muy pocos. Y también el componente obsesivo de esos intereses, sobre todo en aquellos que estén menos afectados.

Sobre todo cuando hablamos de autismo de alto funcionamiento o asperger es muy típico que aquello que les interesa les obsesione. Puede ser cualquier tema: trenes, espacio, dinosaurios, una saga de libros, una serie de televisión… Desde algo muy común hasta lo más peregrino que se os pueda ocurrir. Se centran en ello con un entusiasmo y una intensidad desbordante, y cuando sale su tema de interés es muy típico que hablen por los codos tan felices sin percatarse de si su audiencia está interesada en lo que escucha o deseando darse a la fuga.

Y también en estas situaciones hay que aprovechar tanto entusiasmo por algo, verlo como una oportunidad de aprender, de socializar, de abrir puertas a la felicidad y la autonomía personal, al tiempo que se procura ampliar sus intereses.

En todos los casos, da igual que haya o no autismo, hay que compartir y aprovechar los intereses de los niños, no podarlos

3 comentarios

  1. Dice ser LaCestitadelBebe

    Hola,

    hay que aprovechar esos interés para su propio beneficio y estímulos. El dibujo ha quedado perfecto, me gusta de logo parece más actual y lleno de vida.

    Besos!

    Anabel

    23 enero 2018 | 08:35

  2. Dice ser soy más de repetir

    ¿Qué son intereses restringidos?

    23 enero 2018 | 20:12

  3. Dice ser Nômino

    Hola,

    Desde hace poco que me diagnosticaron TEA-1 (Asperger). Buscando información sobre el tema me horroriza la de barbaridades que se pueden llegar a decir sobre las personas con Autismo.

    Que las personas neuro-típicas se dediquen a escribir sobre el comportamiento que no llegan a comprender de las personas neuro-a-tipicas me parece algo insultante.

    ¿Qué un autista tiene intereses restringidos?

    Os voy a dar una lista de intereses escrita por un Autista de verdad:

    vídeo-Juegos, series, películas, anime, manga, cómics, figuras, novelas, revistas/ensayos científicos, arte, dibujo, pintura, manualidades, gimnasio, ingeniería, tecnología, física, química, matemáticas, biología, fotografía, música, programación, jardinería, criptografía, infografía, salud, alimentación, cocinar, psicología, astronomía…

    Y básicamente cualquier cosa que no sea lengua (idiomas), historia, política, economía o deportes.

    Curiosamente, estos últimos 5 temas es en lo que se basan las personas neurotípicas (principalmente).

    Así que… ¿intereses restringidos?

    Pues desde mi punto de vista es más bien al revés.

    Y repetitivo es que cada vez que conoces a alguien te pregunten:

    «¿Cuál es tu equipo de fútbol favorito?»
    «¿Qué tipo de música escuchas?»

    En fin… si las personas neurotípicas quieren llegar a sociabilizar con las neuroatípicas os doy un par de consejos:

    – Aprended a usar la cabeza.
    – Dejad de ser tan vulgares.

    20 abril 2021 | 14:54

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