No digas que a ti no te toca nada la discapacidad intelectual #convergenciasolidaria

Tal vez a ti no te ha tocado tan de cerca como ahora a mí, pero no digas que no te ha tocado. Las personas con discapacidad intelectual están ahí, claro que las has visto, claro que es un tema que te pilla de cerca.

Aunque tal vez las hayas visto pero no las hayas mirado. Es incómodo a veces, sobre todo al principio, si no estás acostumbrado, si no quieres molestar, si te incomoda en algún modo.

No es un reproche. Yo estuve también ahí. No me tocaba de cerca o eso creía yo porque no lo tenía en mi entorno cercano.

Os confieso que solo durante un breve periodo de mi vida vida me incomodó, no reaccioné con naturalidad. Fue cuando estaba embarazada de Jaime, de mi hijo. Llegué a decir en alto, en mi inconsciencia, que si tuviera que elegir algún tipo de discapacidad para mi hijo, preferiría una sensorial o física antes que intelectual.

Bobadas irreflexivas.

E, ironías de la vida, Jaime acabaría teniendo autismo y una discapacidad intelectual.

Pero ya antes de que me tocara (en suerte) Jaime (mi niño de oro), la discapacidad intelectual ya me tocaba, solo que no me daba cuenta.

Como tantas otras cosas. Tal vez, en parte, la madurez implique ser consciente de esto.

Para normalizar, para incluir, para reclamar derechos, es vital visibilizar. Es necesario ser consciente de que a todos nos toca.

Por eso me gusta y me quiero sumar a la iniciativa Convergencia Solidaria impulsada por BlogDads, cuyo vídeo podéis ver sobre estas letras. Una iniciativa que invita a todos aquellos con blogs o redes sociales a participar.

Y así explican en qué consiste:

Tenemos a alguna persona con discapacidad intelectual o del desarrollo en nuestro entorno. Puede que no forme parte de nuestro núcleo familiar, pero tenemos algún vecino, el hijo o hija de un amigo, algún primo lejano o el hermano de algún conocido que tiene discapacidad.

Afortunadamente, también coincidimos con personas con discapacidad intelectual en muchos ámbitos de nuestra vida: tu vecino del tercero, el chico que coge todos los días el mismo tren que tú, el chico que repone los cereales del supermercado, tu compañera de trabajo, uno de los jardineros del parque del barrio, tu compañera de pilates, la hermana de tu jefa, tus compañeros de la escuela de adultos y un largo etcétera.

Y, sin embargo, no somos conscientes de que, de alguna manera, forman parte de nuestra vida.

Para despertar esa conciencia y colaborar con el colectivo lanzamos esta campaña con un mensaje muy claro: las personas con discapacidad intelectual están ahí y tú puedes hacer mucho más por ellas.

Por eso Blogdads propone #ConvergenciaSolidaria, una campaña de sensibilización sobre la discapacidad intelectual, así como de donación de recursos económicos para la Fundación Gil Gayarre, una entidad sin ánimo de lucro que lleva 60 años trabajando para mejorar la vida de este colectivo.

Porque construir una sociedad mejor es hacer de ella una sociedad abierta e inclusiva, que se libere de prejuicios y etiquetas y que valore en igualdad a todas las personas que la integran por el simple hecho de serlo.

4 comentarios

  1. Dice ser infoshow

    discapacidad intelectual tenemos todos los q escribimos aquí. ó

    02 enero 2018 | 10:57

  2. Dice ser LaCestitadelBebe

    Buenas,

    bonito post, todos somos uno!

    Besos!

    Anabel

    05 enero 2018 | 08:29

  3. Dice ser Aiss

    Mi hermana mayor, tiene 3 años más que yo, tiene una discapacidad intelectual y si la sacas de sus rutinas y sus cosillas se pone hipernerviosa alterándose mucho ella y su carácter.

    No se puede decir, como hermana que soy, que no sea duro, lo fue en nuestra infancia, primero porque mis padres siempre la ponían por delante de mí o mis opiniones cuando mi hermana y yo discutíamos porque yo no entendía porque ese «privilegio» suyo. También fueron duros los años de colegio porque los profesores no se enteraban de nada y la dejaban apartada sin ayudarla a que aprendiera y ya te digo que mi hermana es un as con los números y recordar fechas y situaciones!! Ninguno hizo el menor intento de ayudarla, sólo de decirle a mi madre si alguna vez insultaba a algún niño!! Y te digo que si se hubieran preocupada por enseñarle, ella hubiera aprendido poquito a poquito pero hoy sería una adulta más independiente.

    Yo empecé a entender muchas cosas a partir de los 9-10 años en los que dejé de tener amigos porque me iba a buscar a mi hermana a la hora del patio porque se quedaba solita en el patio y yo no podía dejarla sola, así que me iba con ella a almorzar y hablar y descubrí cuanto se burlaban de ella y la insultaban sin que ningún profesor dijera ni hiciera nada, con consecuencia que al ser su hermana esas burlas constantes también me tocaron a mí y así acabamos la EGB.

    Y tengo un peque de 9 años y su tía para él es la mejor tía del mundo mundial porque lo ama con locura, es su niño y se preocupa enormemente por él y él por ella y si, ella tiene una discapacidad intelectual pero no hay otra hermana como ella!

    Peor es el caso de una niña que ha empezado este año el curso con mi peque, él me ha preguntado cosas que le extrañan en la conducta de la niña, que tiene una discapacidad intelectual y habla muy poco y no muy bien y yo le he intentado explicar pero el problema viene en que la familia de la niña no quiere ver lo que a la niña le ocurre y mientras no quieran asumirlo no la van a ayudar, sólo la apartan de que juegue con otros niños y eso tampoco esta bien

    18 enero 2018 | 16:40

  4. Dice ser cositas chulas

    Efectivamente todos estamos inmersos en ello, debemos tenerlo en cuanto que la discapacidad intelectual es algo que existe y n otan lejos de lo que a uno le pueda parecer en un primer momento, gracias por el post, saludos

    26 enero 2018 | 11:55

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