Ya sabéis, si me leéis, que estudie en un colegio del que no guardo muy buenos recuerdos. Fui una niña feliz, pese al colegio, que era solo de niñas y del que podría contar anécdotas que ejemplifican lo mal que nos enseñaban hasta aburrir.
(GTRES)
Era un centro en el que recuerdo a una profesora planteándonos como únicas dos opciones en la vida ser madres de familia o monjas, en el que las profesoras en las materias de ciencias eran especialmente incompetentes y se limitaban a cubrir el expediente, del que salíamos con un nivel patético en esas asignaturas, y en el que se nos invitaba directa o indirectamente a ir por letras.
Un ejemplo concreto: el día que contradije a la profesora de ‘naturales’ en cuarto o quinto de EGB. Decía que había animales vivíparos y ovíparos. Yo levanté la mano y aporté que también existían los ovovivíparos, animales cuyos huevos se incubaban en el interior de sus cuerpos y parían a las crías vivas. Lo sabía porque tenía un acuario en casa. Primero me ridiculizó delante de toda la clase diciendo que eso no existía y luego acudió por un libro para rematar la faena. Lo malo es que el libro me dio la razón ante todos. Ella reaccionó de la peor manera posible: castigándome.
Resulta curioso que mi santo estudió en un centro similar, solo de chicos, y pasó algo semejante pero a la inversa. Las ciencias eran de chicos y lo que se descuidaba, donde se metía a enseñar a curas casi jubilados con poco interés en transmitir pasión y conocimientos, era en las humanidades.
Es imposible saber qué hubiera pasado conmigo si hubiera estudiado en otro centro. Tal vez sería bióloga, como quería en un principio, en lugar de periodista. Tal vez mi santo habría estudiado Historia, que no hay nada que más le guste.
En fin, la cuestión es que me rebelo conscientemente respecto a esa vieja creencia, que aun perdura, de que las ciencias son sobre todo para los chicos y las letras para las niñas. Es una mentira obvia.
Por eso he decidido que mi blog sea hoy un altavoz para otros, para aquellos que impulsan una iniciativa estupenda enmarcada y bautizada en torno al 11 de febrero, un día que fue proclamado en 2015 Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia por la Asamblea General de las Naciones Unidas.
Os animo a hablar de este proyecto (que me ha hecho llegar la científica, divulgadora y madre Teresa Valdés-Solís, autora del blog Ciencia y presencia) en los colegios a los que acuden vuestros hijos, para que el próximo 11 de febrero alberguen charlas sobre científicas o de científicas.
Como consecuencia de dicha proclamación, en 2016 se constituyó la iniciativa 11defebrero.org en la que un grupo de investigadoras y comunicadoras científicas coordinan diversas actividades y sirven como punto de encuentro de diversas organizaciones y personas con un mismo fin, lograr el acceso, la plena participación y el empoderamiento de las mujeres y las niñas en la ciencia y visibilizar el trabajo de las científicas, así como fomentar la vocación investigadora en las niñas a través de la creación de referentes femeninos.
Parece increíble, pero hay estudios que muestran que ya a los 6 años las niñas comienzan a considerarse menos aptas para tareas de ciencias y a creer que los niños son más listos y ellas más trabajadoras. Estamos convencidas de que normalizar la presencia femenina en la ciencia, mostrándola en los colegios y al resto de la sociedad, contribuiría a evitar, o al menos reducir esta predisposición negativa que nos autoimponemos a veces.
(Leía el otro día un tuit de alguien diciendo que su hijo no entendía el término médico porque siempre había sido atendido por médicas, un poco esa misma idea buscamos, que la próxima vez que les pidan que dibujen a un científico no salga un señor mayor con el pelo alborotado y mucho humo…)
Esta iniciativa se consolidó el pasado mes de febrero, en el que numerosos colectivos e instituciones llevaron a cabo más de 350 actividades en todas las Comunidades Autónomas.
Las actividades que se realizaron fueron muy diversas porque también fueron muy diversos los organismos que se involucraron: museos, librerías, asociaciones de divulgación, universidades, centros de investigación, colegios e institutos, otras organizaciones públicas y privadas y muchos divulgadores, propusieron y llevaron a cabo actividades tales como talleres para niños y niñas, conferencias, visitas de científicas, concursos, desayunos con científicas, ediciones grupales de la Wikipedia, exposiciones y mesas redondas para peques y adultos.
Todo ello con el mismo objetivo, visibilizar la labor pasada y presente de las mujeres científicas y reducir los sesgos de género que se observan cada vez a edades más tempranas a la hora de considerarse apto para materias técnicas.
¿Qué estamos haciendo ahora para la edición 2018?
Pues hemos empezado intentando movilizar a los coles e institutos con la campaña #enclase11f y el vídeo.Hay dos tipos de actividades propuestas:
Que pidan charlas (bien científicas que vayan a contar su experiencia, bien charlas sobre científicas – impartidas por chicos o chicas), nosotros actuaremos como escaparate y utilizaremos nuestras redes de contactos cuando sea necesario para intentar la mayor cobertura posible. Las charlas se solicitan aquí.
Que organicen cualquier actividad relacionada y que nos manden la información. Nosotros tenemos propuestas en la web, adaptadas a distintos niveles educativos, y por ejemplo vídeos cortitos de científicas creados para el proyecto.
También si producen un material y nos lo mandan lo compartiremos en la web o en nuestro canal de youtube. Esta información está disponible aquí.
Hemos empezado por #enclase11f porque queremos que salgan muchas actividades en los coles/institutos y somos conscientes de que necesitan tiempo de organización. Pero la iniciativa se ampliará a otros agentes sociales como el año pasado. Intentaremos penetrar en la sociedad lo máximo posible.
Dónde contactar con nosotros en la web www.11defebrero.org, en el correo contacto@11defebrero.org y en redes sociales: Facebook, Twitter e Instagram.
Buenas,
la verdad no estaría mal, a parte de para enseñar para inspirar y mostrar como el esfuerzo y la superación no tiene límites en una sociedad muchas veces, que tiende a encasillar.
Anabel
24 octubre 2017 | 08:17
Van por ser científicos y potenciar esa rama? O van por ser mujeres cientificos a potenciar que las chicas se interesen por la ciencia también. Si es lo primero perfecto si es lo segundo me parece sexista y discriminatorio. Estarías dando el mensaje de que por ser chico no te quieren en esa rama. De paso por que no echais a los alumnos masculinos de la clase también?.
24 octubre 2017 | 08:48
Hola, como ingeniera: ni en la Universidad ni en el trabajo somos mayoría las mujeres sino tooodo lo contrario. Y no es que nos costase más la carrera que a ellos o que trabajemos peor que ellos… . Lo que sí que os puedo decir porque llevo años relacionándome «solo» con chicos es que todas tenemos un perfil muy similar. Somos chicas que desde niñas nos relacionábamos más con chavales. De niñas éramos más «brutas». No nos gustaba el rosa. Ahora de adultas no somos tan femeninas como otras chicas (tampoco somos chicas-chico, para nada quiero decir eso).
Mi familia ha sido tradicionalmente de chicas y además todas con enfermerías, medicina, comadronas… carreras de ciencias pero no ingenierías (yo soy la única de hecho) y nuestros perfiles son muy distintos. Ellas son «chicas, chicas». Se preocupan mucho por cremas, ropas, maquillajes, peinados y peluquerías… mucho más que yo. Que no significa que yo no sepa qué color se lleva esta temporada. No, es muy distinto.
Muchas de ellas hicieron carreras de ciencias porque «tienen más salidas» pero realmente eran chicas de letras. Si las hubiesen dejado escoger libremente, sin la presión de «dónde vas a trabajar si haces eso?» probablemente todas ellas habrían hecho alguna carrera de letras.
Yo creo que sí que hay cierta predisposición/facilidad para los chicos y las ciencias y para las chicas y las letras. Aunque por supuesto no es el 100% de los casos, a mí me habrían matado si las carreras de letras hubiesen sido las que tenían «más salida» porque no me habría sacado ninguna carrera que requiriese empollar.
24 octubre 2017 | 09:53
No lo has entendido Lico. Se trata de hacer ver a los niñ@s que pueden ser lo que quieran ser independientemente de su género. Y que nada ni nadie les tiene que condicionar y mucho menos por ser niña/mujer. Con 13 años en mi colegio de monjas (exclusivo de niñas como no) me dijeron que yo no valía para estudiar a pesar de sacar buenas notas. Hace muchos años que soy licenciada en CC. Matemáticas gracias a que mi madre desoyó ese «sabio» consejo.
Me parece una iniciativa muy buena de la que voy a informar en el colegio de mi hija (por desgracia no tengo hijos varones lo aclaro antes de que alguien me tache de machista por no informar en el cole de mi hijo)
24 octubre 2017 | 09:53
Más ortografía y menos ciencia!
24 octubre 2017 | 10:19
Yo no.Estoy en contra de ideologias y posturas victimistas.Me parece sexista y discriminatorio hacia el hombre.Mejor qe vayan cientificos de ambos sexos
24 octubre 2017 | 10:23
También estudié en colegio solo niñas, uniforme y monjas y para nada tuve tu experiencia.
Por otro lado convencida estoy que si niña o niño quieren ser científicos ni por todas las monjas o malas clases van a dejar de serlo y viceversa con las letras, qué absurdo de veras.
Y por último, es más que obvio que la mayoría de los chicos tienden más a ciencias y las chicas a letras (es un tema cerebral, vamos, nos guste o no, no somos iguales)
Particularmente que vayan científicos en general a un colegio me parece bien, tanto si son mujeres, hombres, curas o monjas.
24 octubre 2017 | 10:40
¿Quieres que vaya un hombre científico al cole de tus hijos para hacer una charla?
Si te suena mal, el titular inverso es igual de repugnante. Habrá igualdad el día en que estas tonterías no tengan cabida en ningún medio.
Soy científica. No sólo jamás percibí nada como lo que describes en este post. Sino que en mi campo científico hay tantas mujeres como hombres y en mis casi 20 años de vida laboral no he visto nada que, siquiera de lejos, se parezca a machismo o discriminación. Y por la naturaleza de mi profesión te aseguro que trato con gente de todos los países desarrollados (en otros países es otro cantar). También doy clase en la facultad, en distintos Grados de Ciencias y/o Ciencias de la Salud, y del mismo modo, discriminación por ninguna parte. Casi hay más mujeres que hombres. Pero es que da igual, se les trata sin distingos de ningún tipo, como tiene que ser.
Deja de transmitir a tu hija este tipo de persecuciones, no le hacen falta ni le harán bien. Le estás inculcando que es débil, que necesita de la queja y de la reivindicación para ser igual que los hombres, justo al revés de lo que quieres. Otra cosa es que esto os interese porque la discriminación positiva es eso, discriminación. Pero a las que valemos, eso no nos hace falta.
A mí nunca me transmitieron nada parecido mis padres, ni a colegas de mi generación, y eso que soy un poco mayor que tú. Y aquí estamos, sin mayor problema que el que haya podido tener un hombre.
Os viene muy bien el rollito este pero estáis desfasadas, afortunadamente.
24 octubre 2017 | 11:16
Lico, la campaña tiene varios objetivos.
Uno mostrar que la ciencia no solo la hacen hombres que es el estereotipo que tenemos aún muchos en la cabeza. La actividad científica se puede hacer seas hombre o mujer, eso es lo que queremos mostrar y recordar algunas de las contribuciones de las científicas del pasado al avance científico. He ido a muchos coles e institutos a hablar de ciencia y de científicos, y cuando pido nombres de científicos (sin especificar) salen Einstein, Newton, Cajal (en el mejor de los casos)… y como mucho Marie Curie… científicos varones conocen más, pero mujeres practicamente ninguna otra, como hay muchos más, hombres y mujeres nosotros queremos darles visibilidad, esa que aún no hemos conseguido en la actualidad, porque a pesar de que las científicas son aproximadamente el 40% del total, cuando en la tele, los medios de comunicación etc, salen expertos casi siempre son eso, expertos, no expertas, a pesar de que somos un número significativamente alto. Lo que queremos transmitir es que no hay ningún hándicap genético que haga que las niñas no puedan sentirse atraídas por la ciencia, solo existen sesgos culturales. Sesgos que tenemos todos, hombres y mujeres, niñas y niños y por eso todas las actividades que estamos organizando y promoviendo se dirigen tanto a niños como a niñas. Espero haberte aclarado lo que buscamos en 11defebrero, un saludo
24 octubre 2017 | 11:16
Israel. La iniciativa contempla que vayan chicos y chicas. Pero a hablar sobre ciencia hecha por mujeres. Es el día Internacional de la Mujer y la Niña en Ciencia y eso es lo que queremos visibilizar. Las científicas que vayan pueden hablar de ciencia hecha por otras mujeres o de ciencia en primera persona.
Marian, no somos iguales es cierto, pero no es verdad que sea un tema cerebral. Hay un ejemplo clarísimo en el área de la informática. En los primeros años de estudios universitarios de informática había muchas chicas en las aulas. El número se desplomó cuando pasó de ser una licenciatura a ser una ingeniería. Solo por el cambio de nombre.
Es muy difícil saber cuándo es una predisposición genética y cuándo es algo cultural. Es que todo muestra que los sesgos empiezan a edades muy tempranas. Fijaos en este estudio de Science http://science.sciencemag.org/content/355/6323/389 está hecho a niños y niñas entre 5 y 7 años. A los 5 años no se ven diferencias entre niños y niñas pero a los 6 las niñas empiezan a creer que sus compañeros son más brillantes (aunque no que saquen mejores notas) y también hay estudios que muestran que si a dos grupos de niñas les pones el mismo ejercicio y a unas les dices que es de matemáticas y al otro le dices que es un ejercicio de dibujo las niñas que piensan que es un ejercicio de dibujo sacan mejores resultados que las que piensan que es de matemáticas… así que nuestro cerebro a veces nos juega malas pasadas.
Jaione, no creo que sea una cuestión de chicas-chicas o chicas-chicos, sino de los propios estereotipos que tenemos sobre hombres y mujeres
24 octubre 2017 | 11:40
Digo mas.. yo me entero que a uno de mis hijos (tengo hijo e hija) lo estan discriminando de esta forma en su colegio por ser hombre y los cambio al día siguiente a los dos, al margen de denunciarlo a la generalitat
24 octubre 2017 | 12:02
Si la iniciativa se tata de dar a conocer el papel y la relevancia de las mujeres en la ciencia en el pasado, donde realmente que su trabajo se ha visto en general minimizado, me parece perfecto. Si se trata de incentivar que las mujeres se decidan por la ciencia porque son tan válidas como los hombres (cosa que es indudablemente cierta), no creo que sea necesario. Como miembro de un grupo de investigación, puedo decir que actualmente la ciencia es «una cosa de mujeres». Basta con echar un ojo a diferentes grupos de investigación. En mi caso, soy miembro de un grupo muy grande. El jefe de grupo es hombre, y a día de hoy está conformado por 4 investigadores principales, de los cuales 3 son mujeres, 8 postdoctorales, de las cuales 5 son mujeres, y y 6 predoctorales, de los cuales 5 son mujeres. Y esto es una tónica general, por lo que no creo que haga falta animar a las mujeres a que sean científicas. Realmente, creo que por sí solas han sido capaces de decidir que les gusta la ciencia y dedicarse profesionalmente a ello. Y a todo esto, hay que sumarle la ligera ventaja que les proporcionan algunas ayudas por el simple hecho de ser mujeres, y que es algo que no comparto, ya que existen ayudas que en caso de igualdad de puntuación, las mujeres prevalecen sobre los hombres.
Entiendo que puedan decir que vale, hay muchas mujeres, pero los puestos relevantes son ocupados por hombres. Y a día de hoy, es así en la mayoría de los casos, pero esto es debido a que, como decía al principio, en el pasado su papel se ha visto minimizado, y a corto plazo esto cambiará ya que la mayoría de IPs son mujeres, que acabarán siendo jefas de su propio grupo.
24 octubre 2017 | 12:36
Teresa, te aseguro que conceptual y espacialmente los hombres y las mujeres pensamos y resolvemos de distinta forma, de ahí que la orientación o la expresión lingüística difiere entre ambos sexos sin más.
24 octubre 2017 | 13:36
Lo de los estereotipos está muy manido ya, de veras crees que las chicas se desapuntaron cuando cambiaron el nombre de la licenciatura? por favor…, a ver si más que estereotipos va a ser un tema de placebos.
24 octubre 2017 | 13:40
Personalmente, me gustaría que fueran hombres y mujeres, con diferentes experiencias y perspectivas para beneficio de todos los alumnos. Creo que eso sería lo mejor.
Por otro lado, me gustaría que fueran gente de varias ramas, no sólo de ciencias. No se pueden abarcar todos los trabajos del mundo, pero parece que sólo interesa potenciar la ciencia, como si faltaran científicos y sobraran en otros ámbitos, y no es el caso.
24 octubre 2017 | 15:11
Personalmente soy ingeniera informática y tengo que decir que nunca he sentido ningún tipo de discriminación ni en la universidad ni en el trabajo, eso si es un campo donde estamos muy pocas mujeres. Comparto como han dicho por ahi que las chicas que llegamos a ramas cientificas en general no nos gustaba el rosa, las muñecas etc, pero yo creo que también es porque así nos educaron (no todas claro), yo con mi padre hacía puzzles, experimentos cientificos, era su «ayudante» mientras hacia maquetas, mi regalo estrella de la comunión fue la coleccion entera del barco del vapor para niñ@s de 10 años….. Tenía muñecas? Sí , casi todas regalo de mi abuela que se quedaban en el armario, y creo que era así porque siempre tuve bastante más opciones que las muñecas y el rosa.
Cuando decidí hacerme ingeniera informática es cierto que mientras mis padres me dijeron que perfecto lo que yo quisiera hubo quien me pregunto que cómo se me ocurría meterme en algo tan complicado y con tanto chico, ( casualmente todo personas fuera del área científica).
En la universidad la proporción de mujeres era muy pequeña ( 40 de 210 de mi promoción), sólo acabamos 80 personas la carrera 30 mujeres, y creo que es porque nosotras la criba la pasamos antes, sólo aquellas muy seguras de lo que queríamos hacer y buenas en matemáticas nos inscribimos en la carrera, los chicos había muchos que estaban porque sus padres querían que fueran ingenieros, porque tenían que buscar una carrera con salida etc etc, esa es la diferencia que sigue existiendo a mi forma de verlo las más validas y seguras de lo que quieren no tienen problemas pero las de la media-alta no son tan animadas a intentar este tipo de opciones y eso es una pena.
24 octubre 2017 | 15:58
Una educación abierta al voluntariado
https://dametresminutos.wordpress.com/2015/11/01/una-educacion-abierta-al-voluntariado/
24 octubre 2017 | 16:25
«…Pero la iniciativa se ampliará a otros agentes sociales como el año pasado. Intentaremos penetrar en la sociedad lo máximo posible…»
Lease.
Queremos meterle todo tipo de mierdas ideologicas a tus hijos desde la escuela a tuttipleni.
Anda ,dejad a los niños en paz
24 octubre 2017 | 18:49
Vaya por delante que me parece genial la iniciativa y que siento mucho la etapa escolar que sufriste.
Pero creo que el problema no es el sistema educativo que nos tocó vivir, sino el colegio que eligieron tus padres.
Yo también he estudiado en un colegio de monjas, sólo con niñas y te puedo asegurar que las monjas y profesoras que nos daban las asignaturas de ciencias eran muy competentes, al igual que las de letras, de hecho, era más numerosa la clase de ciencias que la de letras, en 3º BUP, cuando había que elegir.
De mi promoción hay muchas químicas, ingenieras, arquitectas…
25 octubre 2017 | 19:13
Mi profesora de primaria que mas admire fue una que era doctora en mates…y monja!
Y por cierto, desde el siglo XIX muchas monjas se preocuparon por la educacion de la niñas, muchas ordenes surgieron asi, y por una educacion mas alla de los bordados.
Y fueron las monjas las que dieron oportunidades a muchas niñas, sobre todo las mas humildes.
Yo creo que algunos serian felices en Arcadias como Cataluña…
27 octubre 2017 | 13:26