Si me preguntáis a mí, lo cierto es que cómo tratamos a nuestros hijos, si establecemos diferencias en la crianza de niños y niñas, me parece una realidad compleja, que depende en función de cómo sean esos padres, sus creencias y carácter, de cómo sean sus hijos, cuántos tengan… y no únicamente de si ese hijo es portador o no del cromosoma Y. De hecho me inclino a creer que ni siquiera tratamos igual a todos nuestros hijos, aún siendo del mismo sexo y por mucho que lo pretendamos.
Por cierto. Una puntualización: cuando hablo de padres, van incluidas también las madres.
No obstante, tampoco me choca lo que sostiene un reciente estudio de la Emory University de Atlanta del que quería hablar desde hace una semana y que recogió este fin de semana mi vecino de blog Javier Yanes.
Os recomiendo que le leáis, porque lo explica divinamente, y os resumo un poco lo que planteaba: tras controlar las interacciones de los padres (solo hombres en este caso) con sus hijos pequeños durante 48 horas, los investigadores encontraron que efectivamente los padres hablaban y jugaban muy distinto dependiendo de si eran niños o niñas.
Los padres de las niñas pasaban un 60% más tiempo atendiéndolas activamente. También hablaban mas abiertamente sobre sus emociones.
Los padres de los chicos en cambio pasaban tres veces mas tiempo jugando de forma ruda con ellos y tienden a emplear más a menudo palabras vinculadas a logros, como «win,» «best» o «proud» y están menos atentos a las necesidades emocionales de sus hijos.
Más detalles: al escanear a los padres participantes en el estudio cuando se les mostraban imágenes de sus hijos e hijas con expresiones felices, tristes y neutras, las áreas del cerebro asociadas con la regulación de emociones se iluminaban más en el caso de los padres de niñas.
Y ahora tengo dos preguntas. La primera va dirigida a los que sois padres de niños y niñas. ¿Notáis que los tratáis diferente, aunque sea algo sutil?
Yo tengo hijo e hija, pero no puedo contestar basándome en mi experiencia. El hecho de que Jaime tenga autismo creo que altera bastante la ecuación. Un amigo que tiene hijo e hija me decía cuando le hablaba de este estudio solo medio en broma que cuando sí se iban a notar las diferencias era cuando llevasen a sus primeras parejas a casa… Un clásico de las chanzas.
La segunda es para todos. ¿Creéis que esas sutiles diferencias influyen en las personas en las que se convertirán luego?
Es posible que sí, es posible que no en todos los casos pero sí en muchos. También puede ser que suceda como cuando os hablaba de que en mi casa sí que vemos películas de princesas y no temo que, porque mi hija haya visto y disfrutado con Blancanieves, su objetivo en la vida no vaya a ser cocinar, fregar y encontrar un príncipe. Ella es hija de su tiempo
(GTRES)
Solo tengo niño, pero considero que sí, simplemente porque niño y niña no tienen el mismo formato en emociones y gustos, son distintos.
14 junio 2017 | 10:19
@Melisa
«su objetivo en la vida no vaya a ser cocinar, fregar y encontrar un príncipe. Ella es hija de su tiempo»
Tienes razón, las cosas se friegan y cocinan solas, o las friegan y cocinan los hombres, el problema es que como es hija de su tiempo a lo mejor busca y encuentra una princesa, a ver quien friega y cocina entonces. Tendrán que estar todo el día de restaurantes.
Ya nos contarás, Melisa.
14 junio 2017 | 11:00
¡¡Anda que no hay diferencias¡¡ Yo pensaba que sólo era en mi época (que tampoco fue hace tanto tiempo) pero lo de poner rosa/azul, lo de vestir a unas de princesitas y que lo más importante sea la apariencia y en cambio dejar a los chicos que se diviertan y se ensucien «porque para eso son niños», lo de empezar a enseñar a las niñas cositas de la casa o endosarles a los niños en una fiesta y en cambio dejar a los chicos a su aire para que se diviertan, lo de empezar a dirigirse a las niñas como mujeres en cuanto tienen la regla y dejar a los chicos unos años más para que vayan a su aire…y no hablemos de «La charla» según seas chico o chica…¿que han cambiado las cosas? Nahhhhh
14 junio 2017 | 12:35
cuando son pequeños se les da educación distinta, pero las diferencias no son muy evidentes. Donde empieza la jodienda es cd llegas a la adolescencia, ahí te das cuenta de que por ser mujer te tratan de un modo muy, muy diferente. Yo creo que ahí empezó mi ramalazo feministoide, al ver que por ser chica me vigilaban y controlaban más que a mis homólogos masculinos, pese a que ellos eran, en general, mucho más brutos, indisciplinados e irresponsables que nosotras. Mi padre casi ni me dejaba ir en pandilla (hablo en plan amigos), cuanto menos tener un noviete, lo tenía que hacer a escondidas. Yo tuve toque de queda en casa hasta los 19-20 años. Eso si, para asumir responsabilidades, era toda una mujercita. No tenían reparo en dejarme al cuidado de mi hermano, vamos, es q me lo imponían. (luego tenían el morro de decir q claro, si hubiera sido chico, no les hubiera ayudado tanto con el peque. NO, es que no me hubieran obligado a hacerlo.). Luego, cd mi hermano llegó a la adolescencia, por supuesto, no le controlaban ni de lejos como a mi. Tuvo mucha más libertad que yo, y por ser el pequeño, muchas menos obligaciones. Si hubiera sido chica, seguramente tb hubieran tenido más manga ancha (los primogénitos siempre nos llevamos los palos y abrimos camino para los que viene detrás, entonces los padres tienen más manga ancha con ellos)., pero ni de coña como la tuvo mi hermano. Cuando protestaba por estas injusticicas sabeís lo que me soltó mi padre «es lógico que las mujeres tengan menos libertad que los hombres». Un señor supuestamente «progre» y de izquierdas en su juventud.
Ah, y antes de que empecéis a justificar estas cosas con el rollo de que es por nuestro bien y todas esas mierdas, si queréis nuestro bien controlad mejor a vuestros hijos varones, ya veréis lo seguras que estamos. Aunque ya se sabe, «por nuestro bien» nos elegían marido, (y en muchos sitios lo siguen haciendo actualmente). Por «nuestro bien» nos prohibían el voto, o manejar nuestro propio dinero hace no tanto tiempo. «Por nuestro bien» les siguen haciendo la ablación a miles de niñas, para que sean «mujeres decentes» y puedan acceder a un buen marido…..todo «por nuestro propio bien».
14 junio 2017 | 13:18
Por supuesto que SI.
14 junio 2017 | 14:10
@Dice ser susi
Resumiendo: que eres una vaga y una llorona, si llegas a haber nacido hombre serías un vago y un llorón. La holgazanería no es una cuestión de género.
14 junio 2017 | 17:04
Estoy totalmente de acuerdo con @Marian y @susi cada fase tiene su cuestión pero el panorama cambia niñas a mujer.
14 junio 2017 | 19:20
Habrá que regalar faldas a los niños. Por la igualdad.
Y si no se prohiben las faldas y todos con pantalón.
Si la igualdad fuera eso… qué derrota de igualdad.
15 junio 2017 | 00:36
Que cachonda la @susi…
Lloriquea porque a ella la controlaban, pero luego pide que controlemos a nuestros hijos varones.
He ahí la típica coherencia hembrista!!
15 junio 2017 | 02:45
Pues yo creo tb que hay diferencia y siendo en etapa de niños (q es en la q tengo experiencia) pero tb influye si es primero o segundo. Yo tengo 2 (en camino el tercero) el mayor es chico y la menor es chica y el mayor es el que «hacemos » (estadísticamente los padres) que cuide al segundo en eso creo q influye más quien sea primero que el sexo. tb los primeros son más responsables etc etc. Yo me opuse a que pusieran pendientes a mi hija pero mi mujer y mi suegra se los pusieron hasta que un día se le infectaron y me puse cabezon y dije que si quería pendientes ya se los pondría cuando ella me lo dijera. Siempre estoy luchando contra sus vestidos de princesa etc etc. Lo que quiero decir es que la sociedad es machista y muchas veces( no la mayoría pero si muchas veces) son las mujeres las más machistas. Yo lucho contra eso pero me doy cuenta que hay un laaaargo recorrido (yo tb tengo ese camino). Mi hija es más dura que una piedra y cuando se cae le digo que valiente eres y deja de llorar al instante y le sale una sonrisa, espero estar a la altura cuando se haga mayor. Pero a pesar que no considero machista a mi mujer tal como se considera hoy en día, yo creo que lo soy menos que ella y considero que hay un largo recorrido… aún así creo que somos diferentes (chicas menos fuertes físicamente pero más desarrollado el cerebro para «comunicación «, las mujeres pueden desarrollar un ser y los hombres no, diferencia de hormonas etc etc)
15 junio 2017 | 03:03
Primero, me encanta tu blog. Y respecto a la pregunta, por supuesto que sí, pero yo lo extendería no solo a si son niños o niñas. No se trata igual al primer hijo que al segundo y mucho menos si hay tercero, cuarto… Cada niño debería de ser tratado de forma diferente atendiendo a sus necesidades. Yo no creo en recetas mágicas para criar niños. Lo que para uno funciona, para otro no. Así que tratar a los hijos de forma diferente, no debería de basarse sólo en si es niño o niña, debería de ser un traje a medida del niño.
15 junio 2017 | 10:28
Mi respuesta, clara y contundente, es sí.
L@s tratamos de forma de distinta, en función no solo del sexo….lo hacemos también en función del lugar que ocupan (el primero, o el quinto)…de su hay o no discapacidad, de la afinidad que tengamos con ell@s, de la edad que tengamos (no es lo mismo ser padre o madre con 21, que volver a serlo con 42)…..etc…
A mí, me fastidia…pero tengo que reconocer que der equitativo, es muy muy difícil.
15 junio 2017 | 19:06