‘Angry Birds, la película’, enfadarse no es necesariamente malo

Enfadarse no es malo, a veces es incluso necesario. Imprescindible si unos cerdos malignos roban tus huevos. Lo que no puedes es perder el control y enfadarte con quien no toca o cuando no toca

Enfadarse no es malo, a veces es incluso necesario. Imprescindible si unos cerdos malignos roban tus huevos. Lo que no puedes es perder el control y enfadarte con quien no toca o cuando no toca.

Hay que ver lo lejos que han llegado los pájaros enfadados de origen finlandés, de jugar a hacer parábolas en (adictivos) juegos para el móvil, a tiendas especializadas, parques temáticos y ahora una película.

Una película en 3D que divirtió a los tres niños de entre cinco y siete años que me apcmpañaban hasta las carcajadas en algunas secuencias.

Angry Birds, la película, es una cinta entretenida, con un buen ritmo que desemboca en una última parte frenética, en la que los personajes y modos de los videojuegos encajan perfectamente, salpicados de algún guiño para adultos.

Todos los pájaros antropomorfos, incapaces de volar y aparentemente irrompibles, viven en una especie de paraíso aviar de felicidad y buena convivencia en forma de isla llena de estatuas del Águila Poderosa, el único capaz de volar que se supone que les protege desde lo alto de una montaña, aunque para la mayoría ese personaje no es ya más que un mito.

En ella Red, el protagonista, no encaja. Sin padres, víctima de burlas y risas desde niño por sus pobladas cejas, sin amigos… tiene serios problemas para controlar su ira. Cuando le provocan, reacciona de manera desproporcionada, lo que acaba llevándole a una terapia de grupo muy peculiar en la que conocerá a Bomb, Chuck y Terence.

Pero lo que acabaremos descubriendo es que enfadarse no tiene que ser algo malo, enfadarse puede ser muy necesario para reaccionar convenientemente si, por ejemplo, unos cerdos malvados desembarcan en tu isla para robarte todos tus huevos.

En el doblaje original de los protagonistas han participado Jason Sudeikis (Jason Sudeikis, Somos los Miller, Cómo acabar con tu jefe), Josh Gad (Frozen), Bill Hader (Y de repente tú e Inside Out)y Maya Rudolph (La boda de mi mejor amiga). Peter Dinklage, de Juego de Tronos, es el Águila Poderosa venida a menos (y luego a más). Y Sean Penn aparece por ahí creando los gruñidos del enorme Terence. Entre los dobladores españoles destacan Álex de la Iglesia, José Mota, Santiago Segura y Cristina Castaño.

El guión es obra de John Vitti, conocido por haber trabajado para Los Simpsons, Alvin y las ardillas, Saturday Night Live, The Office… Los directores son Clay Kaytis, que debuta con esta película, y Fergall Reilly, que ha trabajado (que no dirigido) en Hotel Transilvania, Spider-Man 2, El gigante de hierro y Lluvia de albóndigas entre otras.

Tal vez Angry Birds no sea una película que entusiasme por igual a niños y adultos, tampoco una que vaya a llevarse un Óscar de animación, pero desde luego es una película eficaz y bien resuelta de la que sales con ganas de volver a instalarte la aplicación de los pajarillos de Rovio.

1 comentario

  1. Dice ser Mis Detalles

    jajaja muy bueno lo de enfadarse no es malo a veces…

    09 mayo 2016 | 23:41

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