Las fotos y los niños

Julia y Jaime en plan Assasins Creed en el Retiro.

Julia y Jaime en plan ‘Assasins Creed’ en el Retiro.

Me gusta hacer fotos, siempre me ha gustado. Y a nada ni a nadie le he hecho tantas fotos como a mis hijos. Pero da igual si no te gusta la fotografía, en cuanto eres padre no paras de dispararles con y sin flash. Más ahora que los teléfonos móviles tienen unas cámaras incorporadas más que decentes.

Miles de fotos digitales de todo tipo Y en cualquier circunstancia a niños acostumbrados a que se las hagamos. Fotos en las que posan, en las que no son conscientes de estar siendo inmortalizados y en las que ponen carotas y poses absurdas.

Miles de fotos que luego cada uno trata a su manera. Yo suelo guardarlas en Flickr desde hace años, antes de ser madre, para tenerlas accesibles en privado desde cualquier sitio y asegurarme de no perderlas. Más de un padre conozco que se quedó sin las fotos de sus hijos almacenadas en el ordenador. Un drama. Recordad que los álbumes de fotos son una de las cosas que antes salvaría la gente en un incendio o que pediría en el reparto de una herencia.

Además de almacenarlas ahí, cada año desde que nació Jaime hago un álbum impreso con las mejores aunque tenga que sacar el tiempo del sueño, mis favoritos son los de Hofmann. Las fotos digitales con frecuencia se olvidan, dejan de existir. A Jaime le encanta sentarse a ver esos álbumes.

También hay gente celosa de las fotos de sus hijos en redes sociales y gente que no para de mostrarles ahí, aunque eso da para otro post.

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No es nuevo ese intento por capturar la infancia de nuestros hijos, aunque ahora se haya desmadrado. El Museo de viejas fotos es una buena muestra. De mis padres hay fotos cuando eran niños, no así en su adolescencia. Lo mismo me pasa a mí y a otros de mi quinta que conozco. Nuestros padres nos fotografiaban en la niñez, pero más allá de la pubertad no parecían tan interesados. Tal vez no estuvieran tan deseosos de recordar esa etapa, tal vez nosotros nos prestásemos menos a ello.

Ya veremos lo que pasa con nuestros hijos, que ya no sólo se limitan a ser objeto de las fotos, sino que también las hacen desde muy pequeños. Y eso también da para otro post.

Para terminar aquí os dejo algunos consejos muy básicos extraídos de un artículo más extenso de eroski/consumer para mejorar un poco las fotos que les hacemos:

  • Ponerse a su altura. Tirarse al suelo, agacharse, tumbarse, etc. todo lo que haga falta para situarse al mismo nivel que el rostro del niño y que la cámara enfoque a sus ojos. Esta no es una regla inamovible. También se pueden obtener preciosas fotografías desde perspectivas insospechadas.
  • Atención a los fondos. Aunque el protagonista de la imagen sea el pequeño, un fondo inadecuado puede desmerecer una buena captura. No consiste en colocarle en el fondo más apropiado, sino de fijarse antes de disparar si este es favorable. Un ángulo diferente y el zoom para obtener planos más cercanos son otras buenas ayudas para centrar la atención en la cara del niño.
  • Cuantas más fotos, mejor. La tecnología digital permite disparar la cámara sin parar, sin miedo de agotar el carrete. Cuando se retrata a los pequeños, es aconsejable no olvidarse de la gran capacidad de las cámaras digitales y sacar tantas instantáneas como sea posible: se ampliarán así las posibilidades de obtener la imagen perfecta. Después, siempre habrá tiempo de borrar las que no sirvan.
  • Buscar un ayudante. El clásico «mira al pajarito» funciona. Para conseguir buenos retratos frontales, una buena idea es que otra persona se coloque detrás del fotógrafo para captar la atención de los niños con algo que les entusiasme. Así mirarán al frente y se les arrancará más de una bonita sonrisa.

2 comentarios

  1. Dice ser Gema

    A mi también me encantan las fotos, desde que nació la peque no he soltado la camara, bueno, la camara, el movil, o cualquier cosa que me permita inmortalizar cualquier momento. Después hago álbumes, hago montajes de foto y video, imprimo fotos sueltas para marcos…. Y además de nuestros álbumes familiares, tengo uno que empecé para regalarselo a ella cuando sea mayor, porque aunque ahora con las fotos digitales es super facil grabarle las doscientasmil fotos que vamos a tener de ella, me gustará que tenga un album que le hayamos hecho sus padres, con nuestros comentarios y anotaciones.
    Para que no se pierda, lo mejor, tenerlo en varios sitios, y con una pequeña inversión tienes tus fotos protegidas, porque yo también soy de las que las fotos sería lo primero que salvaria en caso de incendio. Así que las tengo por triplicado. En el ordenador de casa, y en dos discos duros externos. Uno solo para fotos, no vaya a corromperse con algún virus, y otro que usamos más a menudo. Bueno, y mi madre tiene practicamente todas las fotos de su nieta en otro disco duro externo, así que casi por cuadriplicado.

    03 julio 2014 | 10:35

  2. Dice ser Ana

    Por si a alguien le interesa.
    Un libro para compartir la fotografía con los más pequeños de la casa.
    vkm.is/clic

    04 julio 2014 | 01:18

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