Bien es cierto que visto así, da mal rollo, pero aún recuerdo cuando al día siguiente de nacer mi hijo, el jefe de pediatría del hospital delante de mi mujer y yo mismo, le hizo a nuestro «recien nacido» algo similar a lo de esta señora, naturalmente nos asustamos, a lo que el medico nos tranquilizo diciendonos, «no se preocupen que no se rompe»
Bien es cierto que visto así, da mal rollo, pero aún recuerdo cuando al día siguiente de nacer mi hijo, el jefe de pediatría del hospital delante de mi mujer y yo mismo, le hizo a nuestro «recien nacido» algo similar a lo de esta señora, naturalmente nos asustamos, a lo que el medico nos tranquilizo diciendonos, «no se preocupen que no se rompe»
24 enero 2011 | 19:06