“Viejo es el viento…y sopla"

Un gorro pegado a la cabeza con super-glue

Carbonell y Fuentes, antes y después de pasar por la peluquería

El amigo juez pudo haberse enfrentado a una múltiple demanda por daños cardíacos. No se le ocurrió otra cosa que poner dos puntuaciones diferentes en el papel y el marcador. Y allí fue la juez principal para abroncarle. Después, todo solucionado y medalla de bronce para un puñado de chicas al borde de un ataque de nervios.

Y la liberación mental. Ha sido un año inaguantable y extenuante con entrenamientos sincronizados de ocho y nueve horas diarias. Después llegó la pasarela de peluquería: cuando lograron quitarse el casquete, integrado en el conjunto y sellado a la frente con super-glue, cada nadadora presumió de look. Se lo habían cortado 12 horas antes por exigencias del guión.

El gorro de las españolas

Bueno, unas presumieron más que otras. Andrea Fuentes debió ser la última en pasar por las tijeras. «¿Cómo dejaste que te hicieran eso?», le preguntaron. Parece ser que su corte de pelo era un homenaje al punk, y con eso queda dicho todo. Por cierto, Andrea Fuentes colecciona ya cuatro medallas olímpicas. ¿Será la próxima abanderada? Veremos si el COE vuelve a cambiar las normas, pero ya que las chicas ganan por goleada en el medallero español, justo sería que nuestra sirena portara la bandera. Ella se muere de ganas.

La familia Tarrés también andaba por allí. La hija de Anna tuvo sus momentos de gloria. Es una réplica de la madre. Tiene 10 años y lleva desde los 6 en el agua, pero lo suyo parece que será el piano. ¿Y mamá cómo es en casa? «Bueno, no manda tanto como en la piscina«, dijo. Su madre no se separaba mucho de ella. Tarrés puede parecer que no está, pero lo controla todo.

 

1 comentario

  1. Dice ser ANTONIO LARROSA

    Pero que majas son estas chicas ganando medallas.

    Clica sobre mi nombre

    10 agosto 2012 | 21:38

Los comentarios están cerrados.