Encontrar versiones libres -muy libres, demasiado libres- de la paella tiene su punto adictivo. Da igual la combinación loca que encuentres porque seguramente ahí fuera hay una bastante peor. Una afición como otra cualquiera que, es verdad, puede ser considerada deporte de riesgo si uno vive en Valencia y alrededores. Sobre todo si al mejunje en cuestión alguien se atreve a denominarlo “paella valenciana”.
No es el caso, aunque el delito sigue siendo digno de una intervención de la Audiencia Nacional en versión gastronómica. Y es que, cuando parecía que los hijos de la Gran Bretaña eran punteros en esto de vilipendiar la santa paella -su sándwich de paella sigue siendo un auténtico hito-, parece que les ha salido un duro competidor en California.
La empresa Bol, especializada en crear comida envasada muy vegetal, natural y sana -perdón, healthy, que estamos en California-, ha decidido rendir su particular homenaje a la spanish paella. Y el resultado seguramente es sanísimo y puede que hasta rico, pero no apto para pasearse con uno de estos boles por Denia.