No debe de ser f’ccil tener que buscar continuamente novedades en una carta de cafés. Así que en Costa Coffe, por lo visto, han decidido no complicarse mucho la vida y tirar de clásicos. Eso sí, cambiándoles el nombre o adornándolos un poco para que parezcan la última moda cafetera del momento.
Tras descubrir hace nada lo que era un cortado y asegurar que era lo más de lo más, ahora es el turno de -atención- el café solo. Efectivamente, hay que ser muy genio del marketing para ser una de las cadenas de cafeterías más grandes del mundo y, en 2018, reinventar el espresso. Pero parece que es el plan de estos muchachos.
Por supuesto, llamarlo café, así a secas, quedaría poco trendy, así que la jugada maestra ha sido crear variaciones a partir del famoso flat white, el primo moderno del café con leche. Y es aquí donde aparece esta genialidad bautizada como flat black.
¿Y qué lleva este invento que quiere apuntarse a la moda del flat white? Pues café y punto. Vaya, lo que viene a ser un café solo, un café negro de toda la vida. Eso sí, más caro que el espresso normal de la casa o incluso que el americano.