Ay, amigos, no es que mostrara sus encantos, es que a Yago, casi se los arrancan a bocados.
Al ex Yolo no se le ocurrió otra cosa que hacer un striptease anoche, por lo de la fiesta de los 100 días en Gran Hermano, pero claro, no contaba con que en esa casa hay dos muchachas muy faltas de cariño, y quien dice cariño dice sexo, o sea, Marta y Terry.
Y cuando el pobre Yolo, con su gorra puesta (sólo le faltaban los calcetines para estar menos erótico) se quedó en pelotas, tapado sólo por una camiseta, Terry y Marta se lanzaron cual maruja en las rebajas a empelotarlo del todo.
Yago tuvo que salir corriendo, mientras se tapaba las partes pudendas con un globo, pero como suele suceder en estos casos, el globo reventó, y el modelo tuvo que salir huyendo hacia el dormitorio.
A mi me dio miedo, amigos y amigas, yo pensé que, dado que están a pan y agua, y en muchos sentidos, Marta y Terry se comían vivo al Yolo.
En otro orden de cosas:
Terry está haciendo labor de zapa con Laura, con la que no para de hablar de lo malo que es Marcelo, que es mala persona, que se reía cuando la insultaban… Y Laura intenta defender a su hombre (bueno, a su niñato) como puede. Pero no pasa nada, porque luego llega Marcelo con su goma Milán tipo zanahoria y borra todas las dudas de Laura. No sé si me explico.
Por su parte, Marcelo odia a muerte a Terry. Se pasan el día a la gresca y es cierto que es Marcelo el que más se pasa con la canaria. El otro día, ahondando en la maldad, le dijo que es «fea como un topo». A mi los topos me parecen seres encantadores, con sus pequeños ojitos y sus gafas de culo de vaso.
Son las broncas, más o menos, que tiene con Laura, pero claro, como con Terry no se reconcilia luego riñoneando…
Atención a cómo piensa Terry que va a terminar el concurso: Gana Lydia, Terry segunda, Laura tercera y Marta cuarta. Ja ja ja ja ja Que modesta, se ha puesto segunda…
¡¡¡COMO EL MUEBLE RUBIO GANE, ME EXILIO!!!
Yago, por su parte, sigue con su estrategia: lamiendo el culo a todo el mundo para que no le nominen. Por eso le ha cogido una tirria enorme a Rubén, que le nominó, y del que no para de hablar para ponerle a parir.
Dámaso, que está como si estuviera en otro concurso (lo mismo en OT) se dedica a matar el tiempo como los presos en las cárceles: tallando figuritas. El otro día hizo una con forma de ojo de gran hermano para Lydia y una cruz de madera para Catha. Qué apañado.