Rubén, un celoso patológico que debería irse al siglo XV, Arturo, un chulo piscinas que debería irse a lucir tanga de leopardo a la playa y Chari una choni bruja con más caras que un dado.

Así lo veo yo.

Os cuento lo que pasó: Desde hace unos días en la casa hay dos grupos muy diferenciados, que cada vez están más cabreados los unos con los otros. Después de ser su amiguita de toda la vida, Chari dijo que Jhota y sus compañeros son unos falsos.

Jhota, que es un chaval muy de usar palabras y expresiones finas la mandó a «tomar por culo» y claro, Rubén (su novio cornudo) y Arturo, que son muy machos, se lo tomaron como si fueran los vengadores del honor de la muchacha, como si ella fuera tonta y no supiera defenderse sola.

El caso es que comenzaron a decir que quieren pegar al retroreguetonero. Sí, amigos, son de esa gente intelectual que acabados los argumentos, bueno, mejor dicho, con los argumentos sin usar, deciden que la mejor manera de resolver las cosas es por la fuerza, que es lo único que tienen.

Arturito, maldigo la hora en que entró a la casa, ha dicho que no se va de ahí sin ponerle dos ojos morados y un labio roto al retroreguetonero. ¡¡UUUUUH QUE MACHO, QUE MIEDO!! Papanatas…

¿Y qué hizo Chari? ¿Decir, «chicos, no perdáis la cabeza, no pasa nada, ha sido un calentón»…?

¡¡NO, LE DIJO A ARTURO QUE SI PEGABA A JHOTA SE PODÍA IR SIN PAGAR LOS 12.000 EUROS DE MULTA!!

¿Pero como se puede ser tan asquerosa? ¡¡Le estaba incitando a pegar a Jhota!!

No se como expresar el asco que me da esta choni, fea como ella sola, con manos de maromo, pechos horribles y vestidos tres tallas por debajo de la suya. ¡¡Y encima mala y manipuladora!!

Que cabreo tengo amigos…