La generosidad de Sofía Suescun: Dar (pena) y no pedir (perdón)

Sofía Suescun me fascina. En los concursos tiene una personalidad maravillosa. ¿Sabéis eso de que para querer a los demás primero hay que quererse a uno mismo? Pues si Sofía aplicara eso querría a sus semejantes más que la madre Teresa de Calcuta repartiendo abrazos y fajos de billetes.

Cuando Sofía ve un esquema del sistema solar ella aparece en lugar del sol. Porque ella es lo único y más importante. Nadie como ella.

Daenerys de la tormenta, de la casa Targaryen, Khaleesi de los Dothraki, Reina de los ándalos y los primeros hombres. Señora de los siete reinos y protectora del reino. Madre de dragones, la que no arde, rompedora de cadenas… pero se siente como una mierda porque no es Sofía ni ha ganado dos realities.

El otro día estaban Carolina y Albalá hablando y al lado, Sofía, que en GH es como un pedo mochilero, no se va ni aunque corras al viento, cuando Carolina le dijo a Albalá: «El niño tiene que ir a Mujeres y Hombres y Viceversa«.

«Vale ya, ¿no? Sabes que estoy ahí de asesora del amor«, se quejó Sofía. Porque ella puede pedir que en la casa le pongan canciones del señor con el que le puso los cuernos a Albalá, pero eh, no hables de su programa.

«Lo único que tienes en los realities es estar despechada o estar discutiendo«, le dijo Carolina y la dejó más cortada que un jamón cuando ya está en el hueso.

Sofía se quedó así:

Para Sofía que no discutas con ella es como si la dejas sin comer. Sofía sin agua y comida y esas mierdas superfluas puede estar un mes, pero sin discutir un par de horas y empieza a enfermar.

«No entiendo la molestura«, dijo Albalá, que es para darle con un diccionario de la RAE en toda la boca. Venga, vamos a inventarnos palabras, que el Español casi no tiene palabras. Y claro, hay que crear nuevas.

Y como con Carolina no podía discutir, pues se fue al confe a indignarse, pobre Súper. Yo soy el Súper y le doy 100 euros a Carolina para que discuta ella.

Y es que Sofía oye o cree oír que hablan de ella y te monta un interrogatorio. Pero no cuatro preguntas, es que se va al Súper a pedirle cuerdas, una silla, cables y una batería de coche para tostarte los testículos y que confieses.

– Uy, qué bien se va en carreta y los caballos genial… bueno ya he llegado, SOOOOO.

– ¡SOOO QUE, QUÉ, QUÉ IBAS A DECIR DE MI, QUÉ, HAS DICHO SO, IBAS A DECIR SOFÍA, DÍMELO!

«A mí no me cohíbes ni tú ni Dios«, dijo en otro momento Sofía, a la que se le aparece Dios en forma de zarza en llamas y no le impresiona. Pero es que se le aparece Dios bailando flamenco sobre el lomo de una orca saltando por un aro de fuego y ni se inmuta.

En un vídeo vimoa a Kiko dando consejos mientras comía de un bol arroz con tomate. El 90% de los vídeos de Kiko Rivera están protagonizados por un bol con pasta o arroz. Consume más carbohidratos que el horno de una panadería. Si Kiko fuera un faraón en lugar de con oro le enterrarían con un bol y un paquete de espaguetis.

«Este es el reality en el que peor lo he pasado», dijo Sofía. JA JA JA

Nos ha jodido. Como la han echado, respescado y no oye más que abucheos y sabe que no va a ganar, es el peor en el que lo ha pasado. Cualquier sitio en el que no echen pétalos de rosa a su paso es un lugar donde Sofía lo pasa mal.

En otra ocasión esta semana Sofía pensaba que Alejandro la había nominado a ella y había salvado a Carolina ejerciendo su poder de lñider. ¿Por qué? Porque es lo que ella habría hecho, claro.

Así que en directo les pusieron el vídeo en el que Alejandro decidía dejar las cosas como estaban, salvándole el culo a Sofía.

«Yo pensaba que me había nominado porque volvió de la suite con comentarios que a mí no me hicieron gracia», se excusó Sófía. A esta muchacha todo lo que no sea «molas, te amamos y has ganado», le molestan.

Y en directo, anoche en el debate, volvió a lo del jueves, para volver a sacar los celos de Alejandro y echarle un poquito más de cacota encima. «Y me puse mala y no tenía ganas de comer«, añadió, a ver si con un poco de suerte daba pena.

A Sofía le gusta dar pena. Creo que los fines de semana se baja a la calle a repartir pena. Se pone un cartón que pone PENA GRATIS y todo el que se acerca se va triste.

Y ojo, que es muy generosa, porque da sin esperar nada a cambio, ella nunca pide. Por ejemplo, no pide perdón por haber dudado de Albalá.

Lejos de eso, siguió intentando hundirle, que Sofía parecía un submarino alemán de la IIGM buscando un carguero inglés.

«Hemos vivido episodios similares en los que Alejandro ha tenido celos«, dijo… Sí, por ejemplo cuando intentabas liarte con Logan en Supervivientes.

Y ojo, que yo creo que los celos sirven para lo mismo que coleccionar pedos, pero no será Sofía alguien libre de sospecha.

Alejandro es un bocazas de cuidado. Esta semana tenía que boicotear la prueba, pero sin decir nada a nadie. Pero les ha dado tantas pistas que si aparece un tipo de Correos con una carta certificada para comunicárselo es menos descarado.

En directo les pusieron el vídeo en el que Albalá era nombrado como topo. Todos se las prometían muy felices, porque claro, él había saboteado bien la prueba.

Peeeeeeeero, se fue de la lengua. «Como todo buen topo no tenía que decir nada», dijo el Súper y él bajó la cabeza que se le puede usar para hacer prospecciones petrolíferas de lo mucho que la bajó.

En las escuelas de avestruces se ponen vídeos de Albalá para aprender a meter la cabeza bajo tierra.

ASÍ QUE PRUEBA NO SUPERADA

«A mí eso no me parece insinuar«, dijo Albalá, ja ja ja ja. Lo que Albalá les dijo no es que estuviera insinuado, es tiene validez legal como notificación notarial. Vas a juicio y tiene más valor que Albalá te haya insinuado a que te haya llegado un burofax.

Y para acabar, bonus:

Sofía dice que Alabalá «quiere sentir que te humilla, él lo hace mucho. Es su forma de ser, qué pena». Eh, pero no se lo dijo a la cara, como ella predica, se lo dijo a sus espaldas.

«Le has callado la boca, se lo merece«, le dijo luego a Juanmi cuando éste le reprochó a Albalá estar demasiado pesado con lo de ser Líder.

Sofía, la que va de cara.

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