En Juego de Tronos, esa novela en la que si pasan dos capítulos sin una muerte te extrañas, hay una escena en la que un personaje dice «todo lo que va delante de un ‘pero’ no sirve para nada».
Y no, no sirve. Y eso es lo que pasó anoche en el Límite 48 horas, que se usaron muchos peros, demasiados. Bueno, eso y que JJV volvió a decir que el público no sabe lo que ve, no sabe lo que piensa y está equivocado, no como él, que está más iluminado que un bolso en un escaparate.
Vamos por partes porque hay tanta tela que cortar que esto parece Maestros de la costura.
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Esta semana Ángel Garó ha superado muchos límites. Es un ser tranquilo y sosegado como un gremlin con la rabia. Vin Diesel estaba viendo a Ángel Garó cuando se le ocurrió lo de The Fast and the Furious.
El caso es que la cosa pintaba bien al empezar, cuando JJV decía: «Ángel Garó ha explotado y de nuevo ha amenazado con abandonar» y añadía «hay límites y vamos a recordarselo».
Y yo estaba así:
Pero no tardaría en mutar a:
Anoche vimos una serie de vídeos (que hemos ido viendo estos días, por otro lado) en los que Garó hacía como los ñus cuando migran: pasar todas las fronteras olímpicamente.
Ha discutido con Asraf y con Miriam y les ha dicho cosas como «Zorra y mamarracha» a Miriam, a la que mandó irse a Perú, o cosas como «hueles muy mal, bajuna, mamarracha» o «el dedito te lo metes en tu Perú».
A Asraf le ha gritado a unos centímetros de la cara, que hay tantas babas de Garó en la cara del muchacho que le puedes hacer un análisis de ADN a Garó con la cara de Asraf. Qué gritos, qué violencia. El malo de Scream tiene un poster de Garó en su habitación.
Analicemos algunas frases de Garó (y hago chistes porque es mi forma de criticar, son sólo hipérboles, no realidades).
«Te faltan dos tortazos bien dados que nunca te han dado«, le dijo a Asraf. Para Garó los colegios militares son para blandengues. Él llega a tener hijos y lo mismo los mete seis meses en un módulo de presos peligrosos para que se curtan.
«Te falta categoría, que vas detrás del que limpia los váteres en mi pueblo, que es más guapo y es árabe también», le informó Garó. ¿En el pueblo de Garó los váteres son comunes? Joder, ir a poner un pino después de un domingo de cocido garbancero debe ser un drama.
«Tú tienes las rodillas negras y yo las tengo blancas… no, las tienes negras de mierda», le dijo también a Asraf. Hay que tener las rodillas limpias, amiguitos. Podéis llevar los sobacos llenos de mierda como el rabo de una vaca, pero las rodillas que se pueda comer en ellas.
A Asraf se le ocurrió llamar racista a Garó. ¿Y cómo respondió Garó? «A tu raza y a tu especie la insultas con lo que tu dices». Y «racista no me lo digas más, vergüenza de tu raza y de tu estirpe«, ah y «vete a los kebap».
Bueno, es verdad que Garó por lo menos respeta a los grandes artistas de este país y quiso hacer un homenaje a un puñado de palabras de esas que marcan a un país y a su historia. ¿Unos versos de Machado? ¿Un discurso del Cid Campeador? No. La Pantoja tó chiná.
«No me VAS A DENIGRAR MÁS«, gritaba Garó, inspirándose en aquel «no me váis a grabar más».
Y empezó a oler a caca en el plató del Límite 48 horas, cuando algunos colaboradores defendían a Garó porque «va de frente».
– Entonces, ¿apuñaló usted con una zanahoria afilada a aquella anciana para robarle el cromo que le había salido en el Bollicao?
– Sí, señoría, pero lo hice de frente.
– ¡Este hombre es inocente, absuelto!
Y para Mila Ximénez no se puede «jugar con lo del racismo, que es muy feo«. ¿Vais viendo la perversión de la realidad que se estaba haciendo? La clave no es el hecho condenable, sino aquellos que lo ponen de manifiesto.
Y ya apareció JJV, que tiene una necesidad insana de decir lo que piensa y las cosas que le pasan a él. Le preguntas la hora y te cuenta su vida desde el reflujo de su primera papilla hasta un segundo antes del momento presente.
«En este concurso, que ven tantos millones, me gustaría que esos que se escandalizan tanto a la hora de criticar usaran la templanza para criticar y no los insultos que estoy recibiendo yo todos los días. Porque para defender algo se hacen unos ataques con una virulencia brutal», dijo JJV.
Pues vaya esta crítica alegre y pizpireta. Pero crítica.
A los ofendiditos que insultan en Twitter a cualquiera: calmaos y mantened el respeto, sí, también por JJV.
Total, que volvemos a Garó, que dijo en directo que ha estado «mucho en silencio y no me ha servido de nada«. Garó debe haber intentado curarse las almorranas con silencio, que en lugar de usar homeopatía usa callaopatía. Pero pasa lo mismo: no sirve.
«Hala, a cagar, a Perú», «vete a cantar a Perú» le dijo a Miriam en otra bronca. El día que Ángel Garó descubra que se puede viajar a más sitios que a Perú suben las acciones de Ryanair.
«Se me pone la polla bizca«, dijo en otra ocasión. Joder, qué susto, ir a hacer pis y verte el pene como Leticia Savater en un orgasmo.
«Tienes la cabeza como una olla de caracoles y se me caen los pantalones de lo que me pesan los cojones», le dijo a Asraf en otra baza. Qué creatividad, qué ingenio, qué derroche de metáforas... Garó es el Fénix de los Ingenios de las broncas.
Pero bueno, por lo menos Ángel Garó es un hombre humilde y para justificar su conducta se comparó con el hijo de Dios: «Jesucristo cogió un látigo y se puso a echar a los fariseos de allí gritando y diciéndoles de tó».
Sí, sí, tal cual lo dice la Biblia, que les puso finos.
Y viendo a los mercaderes en el templo, cogió un látigo y les dijo: sus voy a ablandar el lomo, mal cáncer os coma la cara, malajes, que me habéis dejado el templo como la contabilidad del PP, malparidos, hijueputas.
Y como se lleva mal con Asraf, Garó pidió: «Que se ponga a 50 kilómetros de mi persona». Joder, con Garó, que poniendo órdenes de alejamiento se viene arriba. Si llega a ser juez hay personas viviendo en Marte sólo por no quebrantar los alejamientos.
Y NUEVO EXPLAYAMIENTO DE JJV:
«Parezco yo el defensor de Ángel Garó y no lo soy, que sus formas son malas, pero es que el otro le llama viejo y le dice que tiene papada, a lo mejor estoy viendo otro concurso«, dijo JJV.
Y eh ahí la trampa.
Si estás diciendo que Garó lo ha hecho mal y luego dices PERO y te pasas diez minutos hablando de lo malo que es el otro, que si Asraf y Miriam provocan, no estás siendo justo y estás minimizando al malo para darle palos al regular. Estás poniendo al mismo nivel al que «ha sobrepasado límites que no son tolerables» y a los que simplemente tocan un poco las pelotas.
O sea, ESTÁS EXCULPANDO, DISCULPANDO, EXCUSANDO Y ATENUANDO A GARÓ.
– Sí, le quemó el coche con toda su ropa, los recuerdos de su abuela, las escrituras de su hipoteca y el testamento de su padre dentro, pero es que le había llamado tonto antes.
La cosa se habría resuelto con más facilidad que disimular un pedo en una discoteca si simplemente le hubieran echado una bronca a Garó. Pero no, la bronca fue para todos, cuando JJV les dijo: «En los últimos días han pasado algunas cosas, os habéis dicho palabras muy feas. Estáis en el ecuador del concurso y está siendo muy intenso y algunos estáis muy nerviosos, demasiado, diría yo».
Y como en el plató la gente ya se estaba oliendo la tostada (y no era pan, era un zurullo de caballo lo que estaba en el tostador) JJV se enfrentó a ellos. SÍ, EN SERIO, AL PÚBLICO DEL PLATÓ y por extensión, a la audiencia. OTRA VEZ.
Se hablaba del momento en el que Makoke y Ángel Garó roban leche a Verdeliss.
«Probablemente ahora me ganaré una reprimenda, pero aquí agarrarse a este asunto cuando se ve claramente que no se han dado cuenta…», dijo JJV.
Y claro, eso sólo lo veía él, porque EL Koala le había dicho a Makoke un segundo antes que esa leche era de Verdeliss, así que el público del plató comenzó a protestar.
«Si queréis os digo lo que queréis escuchar y me aplaudís«, dijo mirando a la grada. Y por si quedaban dudas aclaró: «Me estoy refiriendo al público», dijo.
«Quizá debería quedarme callado, pero hay cosas que no…», apostilló. Pues mira… sí. Deberías. Para estas cosas, sí. Calladito no es que estés más guapo, es que eres el puñetero Brad Pitt maquillado y con un filtro de Instagram.
Y encima acorraló en directo a Verdeliss: «¿Verdeliss tu ves mala fe en el acto de Makoke y Ángel?».
«Te digo por qué no hay confusión…», intentaba decir ella y JJV repetía: «¿Pero ves mala fe?».
Pero cuando pudo por fin hablar Verdeliss, que es la puñetera ama dio el ZASCA del siglo:
«Mi leche es diferente a la que se pidió en la cesta, una es verde y otra azul, una desnatada y la otra semi. Se coloca en un estante que es sólo de Verdeliss y lleva una etiqueta que pone Verdeliss, así que podrán decir mil cosas, pero…», OLE VERDELISS
«Silencio, por favor, tengo que continuar», zanjó el tema JJV. No hay más preguntas, señoría.
Y Makoke diciendo: «Que me corten una mano si he hecho eso dándome cuenta». Makoke, un segundo después:
¿EN SERIO ES TAN DIFÍCIL HACERLO BIEN?
Cuando se habló de acoso en Gran Hermano ya hubo una movida del 15. ¿Tanto cuesta echarle una bronca a Garó por algo que está haciendo mal y quitarse de encima un marrón? ¿Por qué este alejarse de la audiencia?
Volvamos al directo, que este post está siendo más largo que un día escuchando cantar a Miriam.
Asraf, antes de que les echaran la bronca, espontáneamente dijo «Yo quería pedir disculpas a Ángel si me he pasado».
¿Y qué dijo Ángel?
«Os he cogido a todos mucho afecto, te he perdonado en otras ocasiones… yo también te pido disculpas, pero yo creo que con mis 53 años el primer ofendido soy yo«, vamos, que disculpas por los cojones.
Y volvió a sacar que les había hecho de comer. Joder, Garó te da de comer un día y es como si le hubieras vendido el alma. Garó te da un bocado de su bocata y le tienes que entregar a tu hijo primogénito y sacrificarle una virgen en un volcán todos los meses.
«Ángel es una persona a la que no se le puede cuestionar nada, siempre cree tener razón, lleva la razón en la frente. Yo no soy productora ni directora, no le voy a juzgar como profesional, sino como persona«, dijo Miriam. OLE.
«Pensad sobre la forma en que estáis concursando, independientemente de quién tenga razón», dijo JJV. Eso, ¿qué más da quién tiene razón? ¿Para qué liarnos con cosillas sin importancia?
«No sé por qué la gente abuchea«, se preguntó Garó, porque la gente en el público estaba ya harta. Pues porque somos tontos, Ángel. Porque no sabemos ver Gran Hermano, por eso.
Garó vio sus vídeos y dijo «esa no es la realidad». No, es Heidi en versión hard edition.
«Desde luego él está fatal en esas imágenes, pero por favor, cuando alguien está fatal si nos pudiésemos abstener de echar gasolina sería mejor«, dijo JJV. Lo único coherente de la noche.
«Ángel tienes que hacer un acto de humildad», le recomendó. Pero Garó no se baja del burro ni aunque el burro esté muerto y huela ya mal. «Esa situación era debido a insultos muy graves», alegó.
Suso a veces puede ser muy esclarecedor: «Ángel, te han echado un capote increíble», le dijo al ver que Garó no se daba cuenta de que le estaban ayudando. HASTA SUSO LO VE Y NO ESTÁ FUERA DE LA CASA.
Y claro Garó reculó:
«Los que han visto el programa de verdad habrán visto que en mi hay un buen fondo y que no me ha nominado ninguno de mis compañeros»
Sí, el buen fondo lo han visto los que han visto el programa. El programa de la lavadora, porque Gran Hermano no…
«Prometo que no volverá a ocurrir«, dijo Garó. «Y pido disculpas también a mis compañeros, pero no quiero relación».
Termino el post con ésto:
No me canso de poner este vídeo. AHÍ VA OTRA VEZ MÁS. GRANDE MERCEDES MILÁ ❤#SomosLaAudiencia30 pic.twitter.com/n8Emc64huv
— Miriam 💖 Reina Inca 👑 (@MiriamReinaInca) 30 de octubre de 2018