El engaño de los presentadores de GH: ¿Milá, Jorge Javier o Jordi González?

Esto es un dislate. En cuanto se pongan a hablar van a flipar, porque unos piensan que lo presenta Milá, otros que JJV y otros que Jordi González.

Vamos que entra otra. Clara, de Madrid, con unas tetas que podrían vivir ahí una colonia de pitufos. Es ovo-lácteo-vegetariana. O sea, una vegetariana de palo. Es alta. Cuando tienen que pintar la parte de arriba de la Torre Eiffel la pinta ella poniéndose de puntillas.

«Una mujer sin tacones es como un jardín sin flores», dice, en un alarde de feminismo. Y Emily Wilding Davison tirándose a los pies de los caballos para pedir el voto femenino. Mira que no ponerse tacones y ya.

Turno de Candelas. Asturiana. Otra con unos pechos como si los usara para acumular agua para cruzar el desierto. Dice que tiene novio pero que «no están en el mejor momento». Esa relación va a durar lo mismo que un hielo entre las nalgas de JJV.

La hemos visto corriendo. Con un top tipo sujetador. Madre del amor hermoso. Qué rebotar de tetas. Era como si estuvieran botando dos pelotas de pilates. Con esas domingas y ese caer de pechámenes puedes clavar postes para hacer un vallado.

Ya van once dentro de la casa. Faltan seis.

NOTA. Esta gala la estoy haciendo desde Vitoria, donde estoy en el FesTVal de Vitoria. Estoy junto a Willy, mi cámara de toda la vida, mi amigo, mi compañero, mi hermano… Bueno, el pringao al que no le queda más remedio que trabajar conmigo.

Otro pa dentro. Un tal Pablo. Tiene pinta de seminarista y estudia en Londres. Trabaja en una gofrería porque es «su sitio favorito». «Yo soy gofrero y estoy orgulloso de ello» y el tío añade que «le gusta vivir al límite». Se la juega cada día en el trabajo, al parecer.

Lleva el cuello de la camisa tan apretado que lo raro es que no tenga la cara de color violeta. Con esa forma de abotonar la camisa podrías reparar un escape en la tubería de un submarino.

Por cierto, el confe es feo de cojones.

JJV le ha dicho que aún no es concursante de GH y el chaval se ha venido abajo. Va a tener que entrar el psicólogo con los válium en la mano. «Sí, pero ahora qué hago, dejé todo para venir aquí y ahora es como…». Madre mía, que llorera.

Si consigue que todos sus compañeros se coman un gofre en una hora, es concursante. Está más agobiado que una almeja en una feria de marisco.

Hay un caballo por ahí. El bestialismo ha llegado a Gran Hermano.

Total, que al muchacho le han hecho entrar con un carrito de gofres. Entra y la gente se interesa por él mucho. Bueno, eso si interesarse por él dos segundos fuera mucho.

«Si me hacéis el favor de probar mis gofres todos…», dice, pero con vocecilla de la recluta negra y bajita de Loca Ademia de Policía. A mí me pasa eso y les meto los gofres por el gaznate como si fueran ocas y las estuviera cebando.

Nueva concursante. Es granjera, Montse. Otra que tiene unos pechos que cuando tiene terneras las da de mamar ella. Es una granjera de palo, porque dice que va al gimnasio. Un granjero/a que se precie ya dobla el lomo mucho al día como para irse luego al gimnasio.

vende como una locura ponerse a bailar en medio de Barcelona. Cuidado que está muy loca.

«Antes de centrarme quiero reventar el globo ya de una vez», dice. Joder. Eso mismo lo dice en una cueva de Afganistán y con un turbante y la empieza a perseguir la CIA.

El caballo es para ella. Es su compañero de concurso. El caballo se llama Chambao y tiene pinta de ser un estratega. No me gusta, ese caballo no es trigo limpio, es un falso que va metiendo mierda. En este caso literalmente, porque se va a empezar a cagar en la casa de un momento a otro.

Llega otro concursante. Se ha puesto la camisa de su hermano pequeño. Se llama Alain y es francés. Tiene los brazos como si hubiera sufrido un ataque de alergia y se hubiera hinchado. Joder, no tiene bíceps, tiene dos ancas de buey. Este hombre no se puede masturbar porque se arranca el pene en el segundo meneo.

Dice que hace cada mañana el saludo al sol. Nos ha jodido, eso será porque se levanta tarde. Yo cuando me levanto sólo puedo saludar a los panaderos y al que pone las calles.

Mientras está esperando llega otro zagal. Otro que va de guaperas, llamado Rodrigo. Es de Madrid y trabaja en el departamento financiero de una marca de moda. Es de colegio pijo. Bueno, es pijo, a secas. «No me gustan las chicas chonis». Bueno, puede ligar con Naranjita la Lía, porque ella está en medio.

La madre habla de él y se descojona y él la mira con cara de estar viendo pasar un tren. Como el pijo también habla francés, ambos deben hacerse pasar por franceses. Es más, que son de GH Francia y que están de intercambio y que van a elegir a dos de ellos para que se vayan de intercambio a Francia.

Rodrigo lleva una pulsera hecha con un tenedor. ¿Pero ésto que mierdas es? ¿La Feria del Complento que te haces en Tu Puta Casa Fashion Week?

Ahora están haciendo la pantomima de a ver quién se va a Francia. El gofrero se ofrece voluntario, yo creo que para asegurarse una plaza en el Gran Hermano que sea. El amigo de Alain dice que su amigo no va a ligar dentro de GH 17 porque no le gustan las chonis: traducción: todas son unas chonis.

Han elegido para irse a Francia al gofrero. Pero es mentira, así que se va a llevar la segunda decepción de la noche. Este chaval se va a coger una depresión que va a dejar los gofres y va a empezar a darle al crack.

Y otra que entra. Esto es como la puta boca del metro. Es la spice girl deportista. Se llama Adara y es azafata y dice que ha conocido «culturas lejanas», como si hubiera explorado el Amazonas en lugar de haber ido en un avión sirviendo comida chunga.

Y entra en la casa y se encuentra con otra nueva que es como la hija de Marlene Morreau. Se llama Bárbara pero en «su mundo» la llaman Barbie Cat. ¿Pero qué cojones…? Es una blogger de moda, pero se flipa mazo, porque se cree la Rubius de los maquillajes.

Joder, si iban a meter a un bloguero me podían haber metido a mi. «Muchas veces necesito salir de mi mundo virtual», dice. Mira, lo mismo que le pasa a Mario Bros. Tiene tres hijos de tres padres diferentes y dice que busca al amor de su vida. Conmigo que no cuente que me hace un hijo a la que me descuide.

EXCLUSIVA: Un informante de dentro de Gran Hermano me dice que va a estar entrando gente hasta las seis de la mañana. Al parecer el objetivo es que no puedan respirar ahí dentro y vayan muriendo uno a uno hasta que sólo queden 17.

Ahora JJV les dice a todos que sus pruebas eran mentira como cuando dices que sólo la puntita. Y han tenido que coger una cajita cada uno. Una de ellas contiene un enorme premio. Se trata de una vida extra: si le expulsan irán con la caja a plató y si la abren y tiene premio regresan a la casa.

Meritxel, Laura, Fernando y Cris están en peligro y ahora se acaban de enterar: uno de cada pareja será expulsado el jueves.

Uf… les veo a todos juntos y hay demasiado guapo y guapa… Demasiado maniquí. ¿Por qué no hay un gordo? Es más, ¿por qué no estoy yo?

Y se acabó lo que se daba.

Mañana, como siempre, resumencito de la Gala.

¡¡EMPIEZA GH 17!!

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