Mogadiscio, la antes conocida como «La perla blanca del Índico» es hoy la capital de un país devastado: Somalia, sumida en una profunda crisis humana que afecta a casi 4 millones de personas.
Esta región del Cuerno de África acoge una guerra civil que hace ya mas de 20 años que dura, antes de que se convirtiera en ruinas se decía que Mogadiscio era una escala obligatoria de la ruta de la canela y el incienso. Hoy el ayuntamiento, la catedral, y otros antiguos nobles edificios son fotografías en blanco y negro guardadas en un cajón.
Fundada en el siglo VIII, era un símbolo de tolerancia arabo-africana. El islam sufí convivía en harmonía con el cristianismo que llevaron los colonos italianos. Paradojalmente, décadas atrás, Somalia lo tenia todo para vivir en paz, era un estado étnicamente homogéneo, con una sola lengua y una sola religión, el islam. Pero el somalí tenia una organización social compleja, un sistema de clanes i subclases donde las alianzas se modificaban constantemente.