Camboya constituye una de las economías más dinámicas de Asia, pero a su vez esta sumida en la pobreza y tiene un grave problema en la protección de los derechos de los niños que viven desde hace años una situación grave y trágica. Duros años de guerras, conflictos y violencia generalizados entre 1970 y 1989 destruyeron las infraestructuras y el progreso de una nación que fue conocida como la Francia del Sudeste Asiático.
Aproximadamente un tercio de la población camboyana vive por debajo del umbral de la pobreza. Existe un gran contraste entre las áreas urbanas y rurales y la mayoría de los niños de las regiones pobres están expuestos a la malnutrición y a condiciones de vida mediocres.