Goldman Sachs is not an after shave Goldman Sachs is not an after shave

Tampoco Breton Woods es una marca de Whisky. Porque el periodismo internacional no es solo cosa de hombres, ocho mujeres ofrecen un punto de vista diferente sobre lo que pasa en el mundo.

Cuando David venció a Goliat: el pueblo navajo contra los EEUU 

Núria Segura Insa

Dicen que en el periodismo solo hay noticias cuando hay tragedia. Sin embargo, hoy les voy hablar de una noticia de lucha con final feliz, de cómo la comunidad indígena de los navajos venció al gobierno más poderoso del mundo, el de Estados Unidos. Hoy vamos hablar de cómo David venció a Goliat.

¿Quiénes son los navajos?

Son la comunidad indígena más grande de Estados Unidos conformado por unas 300.000 personas, que viven en Arizona, Nuevo México y Utah, una extensión de unos 70.000 kilómetros cuadrados.

Un hombre navajo cruzando su territorio en caballo, su habitual modo de transporte / Lorenzo Ridi

Un hombre navajo cruzando su territorio en caballo, su habitual modo de transporte / Lorenzo Ridi

Este pueblo, que tiene su propia lengua y cultura, llegó de Canadá en el siglo XIII a las tierras donde habita ahora. Aunque cuando llegaron ahí eran una comunidad cazadora y recolectora, de las personas que habitaban en esas tierras aprendieron a cultivar y tejer. A partir del siglo XVI tuvieron un encuentro violento con los españoles, pero a la vez fructífero porque de ellos aprendieron a criar ovejas y a utilizar los caballos.

A medidos del siglo XIX tuvieron varios enfrentamientos con el gobierno de Estados Unidos y, finalmente, fueron invadidos y en 1868 firmaron un acuerdo de paz que permitió a los navajos volver a su tierra, que quedó bajo la jurisdicción de Estados Unidos. 

El drama más grande, por eso, llegó a principios de la década de los años veinte cuando descubrieron petróleo y otros minerales en sus territorios. Desde entonces, viven bajo la presión y la explotación de las grandes empresas extractoras.

La repercusión de la explotación

William López, un hombre navajo de Nuevo México que trabajó en las minas de uranio hasta 1966, explica que durante sus labores estuvieron expuestos a diario a este corrosivo mineral sin que nadie les dijera que es radioactivo y, por ende, perjudicial para la salud, por lo que podían contraer enfermedades como cáncer o fibrosis pulmonar así como enfermedades de riñones o linfoma. 

Es la casa tradicional en la que habita el pueblo navajo / Wolfgang Staudt

Es la casa tradicional en la que habita el pueblo navajo / Wolfgang Staudt

En los noventa, el precio del uranio se desplomó y las compañías dejaron a la intemperie las minas y molinos, que tenían productos radioactivos y tóxicos, que se esparcieron con el viento y en la época de lluvias con el agua, yendo a parar en los arroyos y contaminando buena parte de los recursos y suelos navajos.

Otro drama es el que se dio en Arizona, donde está la reserva de carbón más grande del oeste del país, con 20 mil millones de toneladas. Desde 1966, la compañía Peabody hace minería a cielo abierto y estableció dos minas en la región Black Mesa y Kayenta, actualmente cerrada. «Además de los millones de toneladas de dióxido de carbono que lanzó a la atmósfera, la mina usó más del 70 por ciento de las aguas vírgenes del Acuífero Navajo, del que los indígenas extraían agua para beber y para usos sagrados», según destaca la publicación Desinformémonos en su web.

Además, el Senado de Estados Unidos aprobó en 1974 «la ley de la reubicación», que desplazó a 10.000 familias navajos y otras centenares de hopis, otro grupo indígena que habita en la región, para favorecer a la explotación minera.

La indemnización

Una planta de carbón en suelo navajo / Bass_nroll

Una planta de carbón en suelo navajo / Bass_nroll

Estos son solo alguno de los dramas y conflictos que la explotación minera y petrolera han dejado a la comunidad navajo. Por ello, desde hace medio siglo, 1946, esta comunidad inició una campaña legal contra el gobierno de Estados Unidos por la mala gestión de los recursos que estaba haciendo en sus tierras. 

En este país, los indígenas tienen su régimen especial y en sus comunidades rige su propia ley y las tierras son de su propiedad y el gobierno les alquila. En el caso de los navajo, sus tierras son alquiladas para la producción de gas, petróleo, la extracción de otros minerales, además de para usos agrícolas y forestales.  A cambio el gobierno debe reinvertir en la zona y los navajos consideran que el Estado no ha invertido lo suficiente. De hecho, el 70% de las carreteras de esta comunidad están sin pavimentar y el 30% de los navajos no tienen acceso a servicios básicos como el agua.

Además, argumentan que muchos de los contratos de explotación fueron firmados hace cincuenta años cuando los derechos del pueblo navajo no estaban reconocidos, por lo que son injustos y permiten una explotación desmesurada de sus tierras.

Ahora, por eso, después de cincuenta años de lucha han conseguido una victoria y han firmado un acuerdo con el gobierno de Estados Unidos, que le pagará 554 millones de dólares (437 millones de euros) por el uso indebido del suelo. Esta no es la primera vez que el gobierno de estadounidense debe de pagar una indemnización a un pueblo indígena, pero si que es la más elevada de todas.

Aún así cabe destacar, que esta indemnización no cubre los gastos por contaminación de su territorio. En este sentido, el pueblo navajo tiene litigios contra empresas extractoras, especialmente las de uranio.

Así es como finalmente, con paciencia y esfuerzo, David venció a Goliat.  

8 comentarios

  1. Dice ser aaalguien

    Felicidades al pueblo navajo por su victoria. Ojalá tengan muchas más, y se restauren lo que puedan de la influencia que otros pueblos (incluído el español), no deberían de haber infligido nunca, ni para bien ni mucho menos para mal.

    Hoy en día hay toneladas de pseudopatriotas nazimalotes que se consideran «identitarios», y que se quejan de que la inmigración está destruyendo su país, cultura y tradiciones, pero bien que cuando se trata del «hombre blanco vs cultura nativa que están en SU país nativo», se posicionan siempre a favor de los primeros. Hipocresía de mierda en estado puro.

    03 octubre 2014 | 10:59

  2. Dice ser joe

    y tu que aaalguien, ojala se restauren lo que puedan de la influencia de otros pueblos, pero te parece bien que otros pueblos se metan en el nuestro, vamos igual de hipocrita que esos a los que criticas, una cosa es que abusaran de ellos, pero que chorrada es esa de la influencia de otros pueblos? sin esa influencia el mundo no evolucionaria y seguiriamos en tribus comiendo insectos, pero supongo que para un descerebrado como tu eso es lo correcto, seras de esos que disfrutan viendo un mundo dividido y lleno de guerras en vez de un mundo unido trabajando por un bien comun

    03 octubre 2014 | 11:19

  3. Dice ser VERGUENZA¡¡¡¡¡¡

    …..maltratados, ninguneados, contaminados de por vida…y siguen así…..no entiendo yo donde está aquí la victoria….personalmente he visitado la zona de Tuba y Monument Valley y es desolador lo que la cultura yanqui ha hecho con este gran pueblo, han perdido totalmente su esencia…una verdadera vergüenza….un genocidio social en toda regla…

    03 octubre 2014 | 12:05

  4. Dice ser Vasili Blokhin

    Supongo que aaalguien no come arroz ni bebe zumo de naranja porque los árabes trajeron esos alimentos a Europa durante sus campañas militares, no come tomates, patatas ni pimientos porque son productos americanos y deberían haberse quedado en América, no utiliza esas invenciones de los bárbaros imperialistas franceses llamadas cine, fotografía o sistema métrico… ¿Qué tal se vive odiando a todos los pueblos del mundo? ¿Bien?

    03 octubre 2014 | 12:10

  5. Dice ser aaalguien

    joe, eso de que «me parece bien que se metan en el vuestro» jamás lo he dicho, ni lo comparto. Así que no te inventes cosas para postearlas como argumentos, que es muy triste, majo.

    Y tanto a tí como al iluminado de Vasili, por favor, aprended a diferenciar el enseñar a X pueblo nativo cómo comerciar o cierta técnica para fabricar barcos, de imponer tu cultura, idioma y religión a mandoblazos. Y tampoco es que un determinado pueblo haya dependido siempre de otro para evolucionar: los aztecas ya edificaban cosas monumentales antes de que el «hombre blanco» hubiera ido para allá, ¿lo recordáis, no?

    03 octubre 2014 | 13:08

  6. Dice ser Liliana

    Tal vez sea una mas de las batallas de la honorable Nación Navajo, pero no cabe duda de que cada logro es un paso más en su interminable misión reivindicativa. Los pueblos originarios sojuzgados de todo el mundo son la muestra de nuestras bajezas. El afán colonialista no prescribe. Y cada avanzada, cada guerra arrincona a sus víctimas al borde de la extinción. Sólo esta empecinada voluntad de permanencia los hace fuertes. Bienvenidas estas noticias, en especial cuando se trata de atinar la saeta al culo del gigante-

    03 octubre 2014 | 14:02

  7. Dice ser Vasili Blokhin

    aaalguien, ¿y cómo crees que los árabes expandieron la irrigación y el álgebra a medio mundo? ¿A base de besos con lengua? ¿O qué hicieron los aztecas con los pueblos nativos de México y Nuevo México, tras lo que aprovecharon las técnicas arquitectónicas zapotecas, olmecas o teotihuacanas? Tus comentarios apestan a eurocentrismo. Los europeos no somos ni superiores ni inferiores a las demás civilizaciones del mundo: hemos impuesto nuestras costumbres en tierras extrañas igual que han hecho los xhosa, los han o los mogoles; hemos provocado masacres como ellos, hemos avanzado a costa de otros igual que ellos. El discurso que muestra a los europeos como unos extraterrestres sedientos de oro que vinieron a robar sus riquezas a los Nobles Salvajes de Jacques Cartier, al igual que el que muestra a los europeos como «una raza con misión cristianizadora y civilizadora»… cualquier discurso que obvie los paralelismos entre la civilización occidental y las demás y destaque a los occidentales como una civilización especial ya sea de forma positiva o negativa, es profundamente ignorante y ofensivo.

    03 octubre 2014 | 14:34

  8. Dice ser Carlos

    También deberían exigir todos los estadounidenses que las empresas ó empresarios limpien todo lo que han envenenado, algo que seguro es mucho más costoso.

    03 octubre 2014 | 18:12

Los comentarios están cerrados.