Estat tarde hemos asistido a las sesiones clasificatorias del GP de Estados Unidos, un tanto atípicas por la espectación creada en torno a la «guerra» que algunos han incentivado y que se ha creado en torno a McLaren y a sus pilotos, y que os he comentado alguna vez.

Hoy no voy a entrar en esta guerra, que me parece un tanto absurda, y que estoy seguro se va a resolver muy pronto. Tan pronto como mañana. No estoy diciendo que si mañana gana fernando ya estará todo dicho y hecho (que va…), pero mañana más que nunca apuesto por Fernando Alonso. Los que leeis habitualmente este blog sabeis que mi apuesta casi siempre es para Fernando, pero hoy estoy convencido de que va a ganar para acabar con toda esta polémica, pero sobre todo para acercarse al liderato o conseguirlo, que os aseguro que es lo que quiere, por encima de luchas, bulos y cosas raras…

Fernando ha hecho una clasificación muy seria, muy rápida: tened en cuenta que ha sido el único que ha podido bajar de 1:12 (1:11.926). Alonso ha estado haciendo los dos primeros sectores bastante más rápido que Hamilton, tal vez porque Lewis ha ido todo el rato más descargado y en el tercer sector ha podido alcanzar mayor velocidad punta.

Lewis Hamilton saldrá mañana más descargado que Fernando Alonso. Este dato será fundamental para el desarrollo de la carrera de mañana, ya que Fernando va a tener unas vueltas más que Hamilton en pista antes de su primera parada (que parará más tarde, vamos…); este va a ser su momento para pasar a dominar la carrera y ganarla, siempre que no pase nada raro en la salida, que también será un buen momento para adelantarlo, ya que la salida en Indianapolis es amplia y propicia para las pasadas, pero como ya se vio en el GP de Canada, no hay que fiarse mucho de la salida, porque hay muchos detalles importantes y no todos se pueden controlar.

Tengo que destacar el gran papel que ha hecho S. Vettel sustituyendo a Robert Kubika, ya que ha conseguido una espectacular 7ª posición en la parrilla de salida en su primer Gran Premio, por delante de pilotos consagrados como Trulli, Webber o Fisichella.