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El bombazo lo soltó un periodista de Sky Sports Italia y muy pronto lo recogieron otros medios italianos: En 2015, Fernando Alonso pilotará en Red Bull y Sebastian Vettel lo hará Ferrari. La noticia no tardó en saltar a las redes sociales que ayer por la noche echaban humo comentando esa posibilidad.
Algunos medios especializados de Italia iban más allá, asegurando que la noticia podría confirmarse de forma oficial en el próximo GP de Japón (3-5 de octubre).
La razón más repetida para justificar ese trueque es que las relaciones de Vettel y Alonso con sus actuales equipos estarían tocando mínimos. Así, por ejemplo, comentan la notica en la web deportiva SportCafe24:
«Alonso tendría la oportunidad de relanzar su carrera con un equipo muy ambicioso que lo ha ganado todo en los últimos años y Vettel podría seguir los pasos de su ídolo Michael Schumacher. Su relación con Red Bull ha llegado al mínimo por la falta de competitividad esta temporada»
En F1Sport.it incidieron en la marcha ‘forzada’ de Alonso a Red Bull:
«A pesar de que Ferrari es su segundo hogar, Alonso se ve obligado a emigrar debido a la crisis técnica, seguramente sin precedentes en Maranello, y a la grave falta de rendimiento»
Y el bombazo informativo, cómo no, ha llegado hasta sus protagonistas. El propio Vettel se ha encargado de negar esa posibilidad:
«No hay nada nuevo. Tengo un contrato con Red Bull y estoy muy feliz donde estoy»
Y también desde Red Bull se ha pronunciado su omnipresente asesor Helmut Marko:
«Definitivamente, Alonso no pilotará para Red Bull»
¿Y qué hay de cierto en todo esto? Pues vaya por delante que, aunque en Fórmula 1 nunca se puede descartar nada, me parece una posibilidad remota. Es cierto que tanto Vettel como Alonso están un poco decepcionados con sus actuales equipos, pero también es cierto que el trueque es una opción muy arriesgada para ambos.
Personalmente creo este no es el mejor momento para marcharse a Red Bull por dos razones fundamentales:
- Adrian Newey: El alma máter del equipo energético, ha insinuado que 2015 será su última temporada en la Fórmula 1. Y el rendimiento de Red Bull podría caer en picado sin el mejor ingeniero del paddock.
- Fuga de talentos: Además de Newey, otros ingenieros de peso han dejado o van a dejar Red Bull para marcharse a otros equipos, principalmente a McLaren y Mercedes. El caso más llamativo es el de Peter Prodromou, mano derecha de Newey y responsable aerodinámico de Red Bull, que ya ha empezado a trabajar en Woking.
PD. Es evidente que el multimillonario propietario de Red Bull Dieter Mateschitz es uno de los grandes admiradores de Alonso, pero creo que el asturiano debe seguir confiando en Ferrari. Salvo que Hamilton deje una vacante en Mercedes, claro.