Alonso, con el equipo Andretti Autosport, en 2017 (foto: efe).

Mucho revuelo se levantó la semana pasada por la presunta noticia de que Honda ha vetado la participación de Fernando Alonso en las 500 Millas de Indianápolis con el equipo Andretti, pero la realidad es que todas las informaciones publicadas en medios escritos y audiovisuales de medio mundo emanan del mismo lugar: de un artículo de la revista americana Racer.

Es cierto que en ese artículo se menciona que la más alta dirección de Honda, en Tokyo, no ha autorizado el acuerdo entre Andretti y Fernando, pero se trata de un texto en el que no se menciona ninguna fuente concreta, ni siquiera anónima, y que huele más a suposición del periodista que a hechos concretos.

El propio periodista admite en el texto que no ha hablado con nadie de Honda ni tampoco de Andretti:

«Múltiples llamadas a Andretti Autosport y Honda para hablar sobre este asunto nunca han sido devueltas»

Es más, en el texto deja la puerta abierta a que este supuesto veto de Honda no lo acabe siendo (una buena forma de cubrirse las espaldas):

«Se dice que se están llevando a cabo esfuerzos para salvar el acuerdo…»

Y llegados a este punto quiero añadir que ni siquiera existe la posibilidad de que Honda vete la participación de Alonso porque la marca japonesa solo es un suministrador de motores en la IndyCar, igual que Chevrolet, que ni pincha ni corta en las decisiones deportivas que pueda tomar el equipo Andretti Autosport. La decisión dependerá en cualquier caso de los patrocinadores.

PD. Si hay acuerdo entre Andretti y Alonso, veremos al asturiano en uno de sus monoplazas, diga lo que diga Honda.