Ya han pasado cuatro días desde que Ferrari hizo oficial el fichaje de Carlos Sainz para la temporada 2021 y han sido muchos los compañeros y excompañeros de profesión que han felicitado al piloto español por ese importante salto adelante en su carrera deportiva.
Sin embargo, sigo echando en falta la felicitación pública del que será su nuevo compañero en el equipo italiano, Charles Leclerc. Es cierto que no tiene ninguna obligación de hacerlo, pero no habría estado de más un simple mensajito de bienvenida a la persona con la que trabajarás codo con codo a partir del año que viene.
Y ese descuido no ha sido precisamente porque Leclerc no haya estado activo en las redes sociales en los últimos días, pues cuando se anunció el fichaje de Sainz, el monegasco tardó muy poco en publicar en Twitter un par de mensajes agradeciendo a Sebastian Vettel todo lo que ha aprendido de él en Ferrari:
I’ve never learnt so much as I did with you as my teammate.
Thank you for everything Seb. pic.twitter.com/jRHEsvMYvg— Charles Leclerc (@Charles_Leclerc) May 12, 2020
It’s been a huge honor for me to be your team mate. We’ve had some tense moments on tracks. Some very good ones and some others that didn’t end as we both wanted, but there was always respect, even though it wasn’t perceive this way from the outside.
1/2 pic.twitter.com/cN0E9t3huw— Charles Leclerc (@Charles_Leclerc) May 12, 2020
«Nunca he aprendido tanto como he aprendido contigo como mi compañero de equipo. Gracias por todo Seb. Ha sido un gran honor para mí ser tu compañero de equipo. Hemos tenido algunos momentos tensos en las pistas. Algunos muy buenos y otros que no terminaron como ambos queríamos, pero siempre hubo respeto, a pesar de que no se percibía de esta manera desde el exterior»
Insisto, después de esos mensajes de despedida a Vettel, que me parecen muy adecuados, creo que habría sido un detalle hacer alguna mención a Carlos para darle la bienvenida al equipo.
PD. Igual ahora que Leclerc le tenía tomadas las medidas a Vettel, siente que Sainz le va a poner las cosas más difíciles…