-Me emborrache el viernes con güisqui. No sé como llegué hasta casa…
-¿Y por qué te emborrachaste?
-Estaba con una amiga, oyendo lo maravillosa que es su relación, con su maridito.
-Vaya, entiendo que te emborracharas: una conversación así no se puede soportar si no se está borracha o drogada.
-Claro, es que estaba molesta con el mundo…joder Rafa: todo el mundo tiene novios, novias, relaciones perfectas ¿Por qué yo no? ¿Acaso vengo de un planeta extraño?
-Tú no tienes novio porque sabes que todos los hombres somos unos cerdos. Y no eres tan tonta como las demás tías que se lían con un cerdo cualquiera.
-¡Correcto! Pero igual pesa. A veces, pesa mucho…a veces me gustaría ser tonta, como ellas… líarme con cualquiera, no pensar… Rafa ¿Por qué te estás pintando bigote y barba con un rotulador?
-¡Me aburro Cristina! ¿Te vas a meter los dedos por el chocho y a masturbarte de una vez?
-Rafa ¿Cuándo te vas a quitar la mascara? ¿Cuándo vas a dejar de actuar conmigo como el personaje de tu blog? … Venga, somos amigos ¿No?
-Jamás me crees cuando te digo que soy como el del blog… Te juro que, cuando hablo, miento muchísimo, pero cuando escribo, nunca… venga, mastúrbate…así lo hago yo también…me voy hacer una paja, mirándote que, del orgasmo que voy a tener, me voy a quedar sin sentido.
-No quieras engatusarme como a tus demás lectoras: insultas mi inteligencia.
-Nunca he tratado de engatusarte: sabes qué quiero exactamente de ti: follarte contra una pared, mil veces.
-Ay, Rafael ¿Qué más quieres que me quite?
-Quítatelo todo. Y empieza a masturbarte de una vez.
-Vale…me cuesta… aun no me acostumbro a quitarme la ropa frente a una cámara.
-Joder…me acabo de comer una hormiga… la hormiga paseaba sobre mi mano y, como yo estaba pensando en sexo, y la hormiga me hacía cosquillas, me la comí, de un lengüetazo: lo hice rápido, sin pensar.
-Vale come hormigas ¿Qué hago ahora?
-Mastúrbate, como yo… sí, así… baja un poco la cámara: quiero ver tu cara de gusto.
-¿Contento?
-Genial. Sigue así, dejemos de escribir… te miro… eres preciosa… estoy disfrutando mucho…
-Mentiroso.
-Mírame.
-Joder, sí que estás disfrutando, qué cerdo.
