Antes de emitir juicio alguno, algo que a los españoles de a pie nos gusta mucho (y a los blogueros más aún), vayamos directamente a los hechos.
Bruce Springsteen es la última víctima de una acusación de plagio.Ni más ni menos. Tras los sonados casos y las acaloradas discusiones sobre los supuestos plagios de Coldplay vs. Alizée (y vs. Satriani también) y Enrique Bunbury, ahora le toca al genio de Nueva Jersey. Pero en este caso, además, el tema supuestamente plagiado es de sobra conocido por todos vosotros. Se trata de «I was made for loving you», de Kiss. Aquí hay chicha, amigos.
Escuchemos los dos temas en liza para saber de qué estamos hablando:
Bruce Springsteen: «Outlaw Pete»
Kiss «I was made for loving you»
Bien. La melodía de la voz es muy similar, de eso no cabe duda. Pero si he de ser sincero, no creo que exista plagio. Como tampoco lo creí la última vez que hablé de este recurrente tema, a propósito de los Hives.
Creo que en este mundillo de la música existe demasiada gente que opina de composición sin tener mucha idea. Personas a la que, al oír una melodía parecida a otra, se les llena la boca con la palabra plagio. Es el tema de moda. Da juego. Y yo, sin ánimo de defender a Springsteen gratuitamente, creo que se equivocan.
Existen miles, millones de canciones de rock. Que ciertas melodías de algunas recuerden a otras es, a veces, inevitable. Y no estamos hablando de una melodía de voz muy compleja precisamente, sino de una sencilla línea que asciende y termina bajando. Y exclusivamente en la estrofa. Cosas parecidas me pasan con grupos que me gustan, y a ninguno de ellos se le ocurre llevar a otro a juicio para intentar sacarle los cuartos. Es algo exclusivamente propio del mainstream, donde se mueve la panoja, y bastante absurdo. Tan absurdo como pensar que Bruce Springsteen es tan rematadamente capullo como para plagiar descaradamente un tema tan conocido y pretender que nadie se dé cuenta. Quizás el subconsciente le jugó una mala pasada, aunque es una posibilidad remota. En todo caso, y si así fuera, estaríamos hablando de otra cosa.
Que existe plagio en la música es evidente. Pero no nos volvamos locos. De un tiempo a esta parte parece que todo lo es. Y cansa.
Sé que esta es una opinión que no coincide con la mayoritaria. En otro medio, por ejemplo, ponen a caer de un burro a Springsteen, llaman a los que niegan el plagio «fans obcecados» y «talibanes del Boss» y dan por supuesto que el plagio es flagrante. Yo no soy un gran fan de Springsteen, así que será que únicamente no me creo cualquier cosa por el mero hecho de que todo el mundo la diga.
¿Tú qué opinas?