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"Sin música, la vida sería un error". (Friedrich Nietzsche).

Sentido común

Ayer fuimos testigos de la penúltima batalla de la guerra abierta entre los defensores del derecho a compartir música para uso privado y los organismos que dicen defender los derechos de autor. Promusicae, la asociación de productores y editores de música de España, interpuso en 2005 una denuncia contra Telefónica por negarse a publicar los datos de varios usuarios que habían empleado redes P2P para bajarse música. Ayer, el Tribunal de Justicia de la UE se pronunció al respecto dando la razón a Telefónica (y a los internautas) con una sentencia que concluye que «el derecho comunitario no obliga a los Estados miembros a divulgar datos personales con objeto de garantizar la protección efectiva de los derechos de autor, en el marco de un procedimiento civil».

La sentencia reabre el debate sobre la delgada frontera en que confluyen dos derechos, el de la propiedad y el de la intimidad. Desde las partes implicadas se podía interpretar el fallo de muy distinta manera, y así ha sido. Los internautas se han mostrado satisfechos, al estimar que la resolución “remarca” que bajarse música no es delito. Desde Promusicae también se felicitan a través de una nota de prensa, pues afirman que la sentencia deja abierta la posibilidad de que sea la legislación de los propios países de la Unión la que persiga a los usuarios de las redes P2P por vía civil o incluso penal. Todos contentos.

Los melómanos de a pie como yo entendemos esta sentencia como un triunfo del sentido común y un portazo en la cara de quienes quieren socavar la libertad individual. Malgastar tiempo y dinero en perseguir al que se baja música para disfrutarla en su casa, coche o mp3 es un absurdo, y vuelve a demostrar la falta de ideas y capacidad de evoluciónde la que adolecen organismos como la SGAE o la propia Promusicae, sin olvidar a las grandes discográficas. Sigo siendo un ferviente defensor de la compra de música original, pero ello no es incompatible con el derecho a acceder, a través de Internet, a discos que de otra forma difícilmente llegaría a conocer. ¿Tan difícil es de entender?

3 comentarios

  1. Dice ser niño caos

    Claro que sí!!Alguien tenía que decirlo. Lo has dejado todo dicho, dani, no hay nada que añadir salvo… ¡chapeau!

    30 enero 2008 | 18:08

  2. Dice ser Alfalfo Desgracias

    Todo en la vida evoluciona. Y, como siempre, esos organismo arcaicos que les va bien con su método, detienen el cambio todo lo posible, arañando los últimos céntimos con recursos, denuncias, «cánones», etc.Gracias a dios ( es una forma de hablar.. 🙂 ) hay grupos que difunden gratuitamente su música por internet, para que ésta llegue a todo el mundo, y todos capten su mensaje. Está bien que se compre música original, pero como bien dices, hay cosas que no se podrían conseguir sin esos medios. Aparte yo soy partidario de, «piratea», comprueba si eso que tenias en mente comprarte es realmente bueno o no, y una vez comprobado, cómpratelo. ¿quien me protege a mi cuando veo una película con unas expectativas que me venden y luego es una basura?, ¿quien me protege cuando me compro ese juego, y luego no es lo que decían?, ¿quien me protege cuando me compro un dvd de música porque me gusta una canción y el resto del dvd es una verdadera mier..?. Si protegemos, censuramos, y «robamos», por favor, que sea en ambos sentidos.Gracias por leer otro de mis rollos,jeje, 😀

    30 enero 2008 | 20:12

  3. Dice ser Alfalfo Desgracias

    Y como último añadido, el pirateo ha existido siempre. yo me compro una cinta, la grabo, o se la dejo a mis amigos para que las escuchen, igual que cualquier película, la diferencia es que ahora esos «amigos» son millones 🙂

    30 enero 2008 | 20:14

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