Más recursos para periodistas en guerra
No sólo el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) ofrece un número de teléfono de emergencia para periodistas en zonas de conflicto, también lo hace la organización Reporteros sin fronteras. El servicio se denomina “SOS Presse”, cuenta con el auspicio de American Express, funciona las 24 horas y acepta llamadas a cobro revertido. El número es (+33) 1 4777-7414.
Como vimos en la entrada anterior, el servicio del CICR se basa en la Cuarta Convención de Ginebra y en el Protocolo Adicional 1 de 1977 (ordenamiento jurídico conocido como Derecho Internacional Humanitario que establece que el periodista en la guerra debe ser respetado y protegido a condición de que se abstenga de todo acto que afecte su estatuto de persona civil).
En Reporteros Sin Fronteras están vinculados a la Resolución 1738 del Consejo de Seguridad de la ONU, cuya aprobación promovieron. Resolución aprobada el 23 de diciembre de 2006 que reafirma la necesidad de prevenir la violencia contra periodistas y juzgar a los autores de estos actos cuando no han podido ser impedidos.
Seguros para empotramientos
Con su habitual meticulosidad suiza, el CICR explica quiénes pueden llamar, cuándo y qué contraprestaciones recibirán. En RSF se limitan a mostrar el número, sin decir mucho más. Lo que sí tienen en su web son una serie de recursos muy similares a los que se enseñan en los cursos para periodistas en conflictos como el que realizamos en este blog en AKE.
El primero es un seguro, a través de la compañía Escapade Insurances, que cuesta 1,40 euros por día de trabajo en el terreno (sólo se puede contratar si se es free lance y socio de RSF). Cubre empotramientos y ofrece compensación por muerte accidental o pérdida de miembros. No resulta nada sencillo encontrar seguros que se adapten a las necesidades de los periodistas y que no cuesten millones, por lo que la oferta de RSF es muy interesante.
Universo Kevlar
Comprar un buen chaleco antibalas, categoría 3, implica una significativa inversión económica. RSF los presta a sus socios a cambio de un depósito de 900€. Lo mismo hace con los cascos, por los que pide 250€ de garantía, y con los dispositivos GPS que lanzan señales de emergencia.
Viajar con un chaleco antibalas de 14 kilogramos de peso es una tarea poco agradable (más ahora que compañías como Iberia han decidido cobrar por la segunda maleta). En algunos aeropuertos, como el de Dubai, es considerado un arma de guerra por sus placas de Kevlar, lo que genera bastantes problemas de papeleo y gestiones.
La opción más recomendable es alquilar, siempre que exista esta posibilidad, el chaleco en destino. La famosa Gandamack Lodge de Kabul tiene varios a disposición de los huéspedes, por unos 50 dólares al día. La oficina de prensa de Jerusalén también presenta anuncios de gente que alquila chalecos para ir a Gaza.
En la cabeza del reportero
Además de botiquines de primeros auxilio y cursos de entrenamiento, RSF pone a disposición el Manual del Periodista. Editado en 2007 junto a la UNESCO, realiza un exhaustivo repaso de la legislación, de medidas para preservar la salud, para la seguridad, de la relación que se debe mantener con el CICR, de los preceptos éticos de la labor en el terreno, en relación a las víctimas.
El último ítem de la lista es recursos de ayuda psicológica para reporteros que han pasado por conflictos armados. Entre estos recursos figura el Dart Center, cuya labor también hemos conocido de primera mano en este blog.