Si cualquiera de los clubes de la Liga española tienen en mente realizar un fichaje importante en la apertura del mercado invernal, es mejor que lo hagan antes del próximo 1 de enero. Les saldrá mucho más barato.

El motivo es la derogación de la llamada Ley Beckham y de la entrada en vigor de los nuevos presupuestos que aprobó el Congreso de los Disputados el pasado lunes.

Con ello, a partir del 1 de enero, todos aquellos futbolistas extranjeros que lleguen a un club español con una ficha superior a 600.000 euros anuales tributarán a Hacienda un 43 por ciento y no un 24, como ahora ocurre.

Así, aquellos equipos que decidan hacer una fuerte inversión se ahorrarán hasta un 19% de impuestos. La medida no tiene carácter retroactivo, por lo que se respetarán los impuestos de los futbolistas que estén en los equipos antes del año nuevo.

Sin lugar a dudas, el futbolista más apetecible es el delantero del Real Madrid Ruud Van Nistelrooy. El holandés, que podría fichar por otro equipo de la Liga al no haber jugado cinco partidos oficiales, quiere estar en el Mundial de 2010 de Sudáfrica y para eso necesita jugar. El problema es su alta ficha: unos cinco millones de euros netos.