Dani Alves se quiere quedar en el Barcelona, o eso dice. El brasileño está negociando su renovación con el club azulgrana, aunque al parecer sus pretensiones económicas son demasiado elevadas, ya que pide ocho millones de euros netos por temporada, una cantidad que lo colocaría como el futbolista mejor pagado de la plantilla sólo por detrás de Messi.

El presidente azulgrana, Sandro Rosell, no está por la labor. El dirigente quiere empezar a imponer límites salariales para controlar el gasto y no puede permitir que Alves cobre más que símbolos del club como Xavi, Iniesta o Puyol.

Por el momento, el lateral diestro insiste en que hará «todo lo posible» para renovar su contrato con el Barcelona, que expira en junio de 2012, porque admite que «es muy difícil» encontrar un club tan grande como es la entidad azulgrana.

En unas declaraciones a Barça TV, el polivalente Alves, uno de los mejores asistentes del campeonato español, asegura en que su sueño es renovar por el Barcelona. El brasileño es uno de los jugadores más deseados por la ‘Premier’ y reclama un aumento salarial de acorde con sus prestaciones en el campo.

«Estoy viviendo cosas inéditas aquí y el club ya está en mi corazón», ha dicho Alves, quien ha explicado que el Barcelona ya conoce que su preferencia es continuar vistiendo la camiseta azulgrana: «Por eso lucharé con todas mis fuerzas para quedarme aquí, porque es mi sueño».