El delantero del Barça David Villa tiene otro problema del que preocuparse, además de su supuesta enemistad con Leo Messi.
El asturiano no está gozando de toda la confianza de Pep Guardiola y Cesc Fábregas le está ganando la partida, con juego y goles. De primeras, el canterano es capaz de jugar en más posiciones que el guaje. Cesc puede actuar de centrocampista y también de falso delantero centro. En cambio, Villa solo puede jugar en ataque y no donde a el le gustaría y donde siempre ha brillado: como delantero centro. El 7 del Barça ha tenido que adaptarse y jugar, casi siempre, de extremo.
Sin embargo, las estadísticas no están tan en contra de Villa como las sensaciones:
Cesc. Siete goles: 5 en Liga, 1 en la Champions y 1 en la Supercopa de Europa.
Villa. Siete goles: 3 en Liga, 3 en Champions, 1 en la Supercopa de España.
En cualquier caso, la compentencia siempre es buena. La duda está en si el ambiente en el vestuario azulgrana no se enrarecerá. De eso se tendrá que encargar Pep.