Leo Messi, el mejor jugador del mundo, no deja de oír el runrún de su propia afición, la argentina, sobre su escaso rendimiento con la albiceleste, con respecto a las cotas que alcanza en el Barça. Todo el mundo le señala a él y la presión es máxima, ya que la próxima madrugada (2.45 horas) Argentina se juega su ser o no ser contra Costa Rica en la Copa de América que se disputa en su país. Solo les vale la victoria.
Ya ha apuntado Maradona, exseleccionador, que uno de los problemas de Messi «es que juega con futbolistas defensivos al lado. No se puede pretender que se regatee siempre desde el centro del campo a siete jugadores. La afición está siendo injusta con Messi». Di Stéfano, otra voz autorizada, también ha dejado claro que ve a «Messi dejarlo todo en el campo».
Parece que el preparador nacional argentino, Batista, les ha escuchado y para el encuentro de hoy hará una profunda remodelación del equipo. Este es el once titular: Sergio Romero; Pablo Zabaleta, Nicolás Burdisso, Diego Milito, Javier Zanetti; Javier Mascherano, Fernando Gago; Lionel Messi; Sergio Agüero, Gonzalo Higuaín y Ángel Di María.
Y estas son sus palabras, quizá más clarividentes:
«Cambiará el esquema táctico, pero no la idea futbolística. Buscaremos tener más presencia en el área con los puntas Higuaín y Agüero y soltar más a Messi, jugando por detrás de ellos»
Está claro, ¿no? Liberar a Messi. Esta es una gran oportunidad para Leo de demostrar todo lo que ha demostrado en el Barça. Si fracasa, todas las críticas caerán sobre él.