La misa de Pascua de esta Semana Santa ha servido para ver, por fin, a las hijas de la reina Letizia. Las niñas crecen sin parar y se ve que la mayor ya va marcando sus pautas estilísticas.
A la princesa de Asturias ya se la nota que toma la voz cantante en eso del vestir. Me espanta la falda, que le queda corta, y todo el conjunto en general. Cada prenda es de su padre y de su madre. Letizia debería estar más pendiente de la ropa de la mayor de sus hijas.
En este caso la pequeña de las Borbón Ortiz le ha dado un repaso a su hermana. La infanta Sofía ha llevado en Palma de Mallorca un precioso vestido con unas puntillas espectaculares. Pero aunque la pequeña ha ido mejor vestida, me horrorizan los zapatos de las dos. Mirad con atención.
Respecto a Letizia, ha ido correcta con pantalones negros y blusa estampada, un look sin artificios y bastante normalito. La feliz estampa familiar la han completado el rey Felipe y la reina Sofía, ni rastro del rey Juan Carlos, como ya os vaticiné.