El nutricionista de la general El nutricionista de la general

"El hombre es el único animal que come sin tener hambre, que bebe sin tener sed, y que habla sin tener nada que decir". Mark Twain

Niños y ketchup: ¿una batalla perdida de antemano o una buena solución?

ketchupA raíz de la entrada del otro día en el que describía el bizarro asunto de aquella señora que promociona un sistema adelgazante consistente en rociar el entorno de las comidas más tentadoras con un espray pestilente (y de esa forma terminar por abortar todo intento de comérselas), algunos comentarios juguetearon con esta idea de los olores y aromas pero, esta vez, con una aplicación más positiva. Planteaban si sería posible idear y crear un spray que en vez de provocar el rechazo a un alimento facilitara su consumo.

Sobre el papel este tema puede tener su enjundia. Imagínate, que resulta que a alguien no le gusta y le cuesta comer… lo que sea, pero que al mismo tiempo se ve en la “obligación” de comerlo ya que es muy “sano” y conveniente comerlo. Pues ¡zasca! rociada con el spray aromatizado a lo que sea (rico y agradable) y asunto arreglado. Paradigma de esta situación es la de nuestros hijos y el ejemplo típico de las verduras, el pescado… ¿que resulta que no les gusta y no quieren comer brócoli? pues nada, buena chorretada de spray de chocolate por encima y a correr… ¿Qué no hay forma de que se coman esa maravillosa merluza a la romana que has preparado? no hay problema, chufletada de espray con aroma de algodón de azúcar y todos contentos… ¿no?

Pues no. Al menos un servidor no piensa así. No digo que este tipo de espray no terminara por triunfar desde un punto de vista comercial, creo muy posible que tuvieran un notable éxito. Lamentablemente, no lo puedo negar. Pero mi rechazo para darle el visto bueno al espray como tal se debería a que no me parecería una adecuada herramienta para educar a nuestros hijos. Al igual que tampoco me lo parece ese otro tipo de conducta parental consistente en servir o permitir acompañar la comida de los más pequeños con cantidades industriales de la salsa de turno más persistente, lo más típico, ketchup. Aunque hay muchas otras posibilidades, mayonesas, salsa rosa y hasta, pásmate, Nocilla (sí, eso lo he visto yo con estos ojitos míos: Nocilla con alcachofas, y en ese orden más que en el contrario)

Volviendo al tema del aerosol perfumante, como digo, creo que podría llegar a triunfar pero seguiría siendo tan mala estrategia como la del ketchup. Conste que no tengo nada en contra de este alimento, siempre que ocupe su sitio y no se descontextualice su uso. Es más, el ketchup me gusta y no poco… pero solo cuando es “del bueno”.

La varita mágica para que el nene se coma lo que “se tiene” que comer

Además, como habrán podido comprobar muchos papás y mamás, hay veces que ni con el ketchup “el nene” se termina por comer lo que los padres quieren que se coma. Así, resulta, que la presunta “varita mágica” no lo es tanto y falla más que una escopeta de feria. En realidad no hay “varitas mágicas” en este asunto de que los niños coman. Bueno sí que las hay, pero no se pueden poner encima de un plato o guardar en el frigo o en la despensa. Esas varitas mágicas a la que me refiero se llaman amor y buen hacer. Buen hacer para dedicar tiempo a la cocina, para comer lo mismo que los niños comen, para comer con ellos, para involucrarles a la menor oportunidad en los procesos de planificar el menú, comprar los ingredientes, cocinar… Y amor, mucho amor para, dentro de una adecuada oferta saludable de alimentos dejarles decidir qué comer y qué no (creo que a estas alturas sería conveniente que le eches un vistazo a la entrada: “¿Que tu hijo come de todo? No te preocupes, ya cambiará”). Con respecto a los alimentos menos recomendables, eso sí, estaría muy bien que siguieras la fantástica máxima de Julio Basultono ofrecer, no negar” localizada en el libro “Se me hace bola”. Es decir, no dárselos habitualmente, pero tampoco ser tan fundamentalista como para quitárselos de las manos si ya han caído en ellas.

Por cierto, ya que estamos, y antes de despedirme déjame que te anuncie el título de la próxima entrada, para que veas que nada más alejado de mi intención el criminalizar el uso del ketchup. El próximo post tendrá por título: “Ketchup Heinz: para algo que me gustaba de McDonalds, va y lo quita”.

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Imagen: Grant Cochrane vía freedigitalphotos.net

8 comentarios

  1. Un niño no tiene criterio para una alimentación saludable y suficiente, pretender dar de comer a un niño solo lo que le gusta es un error. El problema es que muchos padres carecen de un criterio de alimentación saludable y suficiente como para inculcárselo a sus hijos, así que se pliegan a sus caprichos. También entiendo que hay padres que no tienen ni tiempo ni ganas de planificar un menú semanal y ceñirse a este, y mucho menos elaborarlo.
    Para paliar estas carencias de los padres están surgiendo empresas que te diseñan el menú semanal y te proveen de los ingredientes, e incluso de los alimentos elaborados…pero claro, hay que podérselo permitir!. Así que si buscas productos o servicios para la Hostelería y la Alimentación pásate por nuestro Directorio Especializado, donde encontrarás miles de proveedores y tiendas online en España que además de servir a los profesionales también lo hacen a los particulares.

    04 noviembre 2013 | 10:34

  2. Dice ser Casandra

    29 MARZO 2010

    La ‘comida basura’ genera la misma adicción que algunas drogas

    Un estudio revela que el cerebro reacciona de la misma forma ante la comida rápida que ante algunas drogas

    El ritmo de vida hoy en día lleva a muchas personas a descuidar sus hábitos alimenticios, y en muchas ocasiones, a consumir comida rápida. Pero según revela un estudio elaborado por el Instituto de Investigación Scripps (EE.UU.), este hábito es más peligroso de lo que comúnmente se cree.

    Una ingesta habitual de «comida basura» puede llegar a producir efectos similares a los de la drogadicción: el cerebro activa las mismas zonas y reacciona de la misma manera a una hamburguesa con patatas que una persona adicta a la cocaína o a la heroína.

    El análisis se realizó en ratones, a los que se comenzó a suministrar una dieta basada en bacon, salchichas y tarta de queso. Al poco tiempo, los animales comenzaron a engordar y a experimentar síntomas similares a la adicción al tabaco, la cocaína o la heroína.

    Para que los animales asociaran la ingesta de este tipo de alimentos como nocivos, se les comenzó a administrar una descarga eléctrica, y una vez que se habían acostumbrado a la nueva comida, se les devolvió a su dieta habitual, basada en lechuga. No obstante, los ratones prefirieron pasar dos semanas sin comer antes de regresar a su comida baja en grasas y azúcares. Además, cada vez necesitaban más comida para experimentar placer.

    Según explica el profesor Paul Kenny , esto muestra “la evidencia de que la drogadicción y la obesidad están basadas en los mismos mecanismos neurobiológicos.» Y añade: «En el estudio, los animales perdieron completamente el control de su comportamiento alimenticio.»

    Este estudio da de lleno en uno de los temas más sensibles de EE.UU., el de la creciente obesidad en la población, y también, en el extenso y lucrativo negocio que tienen las compañías de comida rápida.

    04 noviembre 2013 | 10:52

  3. Dice ser gato a los mandos

    Cuando un niño come a base de ketchup, es una satisfacción (lease fracaso) para los padres, pero un logro para el niño que no come.

    ¿Y qué hay de educar? ¿De enseñar?

    04 noviembre 2013 | 11:04

  4. Dice ser juán

    ¿Educar o adiestrar?

    Si el niño come es bueno, cuanto más ketchup le eche mejor, así acabará por aborrecerlo los paladares cambian con la edad, además si tu niño se vuelve gordo ya luego por complejo/trahuma dejará de usar el jodido ketchup como pasa ahora con todo el mundo que se ha vuelto tan «sano».

    Todos moriremos algún día, ¿porque pasarse la vida anelando comer aquello que deseamos? El cuerpo humano está diseñado para comer hasta aburrirse de algo y luego al mes siguiente cambiar de alimento.

    Dejen que sus niños decidan lo que comer, ¿no veis que hoy en día los «hombres» y «mujeres» de 40 años se comportan como niños? ganas de amargar la infancia de los infantes retirandoles las gratas chucherías que les ofrece la vida.

    04 noviembre 2013 | 12:23

  5. Dice ser Gema

    Partiendo de que cuando los niños, ahora mis sobrinos, porque mi peque es muy pequeña y todavía no lo conoce, me piden ketchup intento darles primero tomate frito casero, que a veces cuela, pero si no cuela, les doy ketchup, igual es por la publicidad, pero yo me creo eso de que lleva una buena cantidad de tomate, y sé que lleva azucares y demás cosas que no es que sean la panacea de la alimentación. Pero también sé, que hay alimentos, que por su sabor, su textura o su apariencia no son apetecibles a los niños, y también sé, que con la edad se van perdiendo esos reparos, y se prueban cosas nuevas, y descubrimos que cosas que «no nos gustaban» ahora nos encantan, cosas que llevamos comiendo toda la vida ahora ya no nos dicen nada, y cosas que antes no nos gustaban y ahora tampoco, y no pasa nada.
    Pero si sabemos que es bueno para nuestros niños comer verduras, legumbres, pescados…. y demás cosas, y vemos que no hay manera de que las coman, y de repente, echándoles un poco de tomate por encima se las comen, pues por mi parte, bienvenido sea el ketchup, la mahonesa, la mostaza o incluso como dices la nocilla, aunque sea para echarla por encima de unos garbanzos, ¿¿no le dan el premio a la mejor tapa a las anchoas con chocolate??

    04 noviembre 2013 | 12:43

  6. Dice ser Daniel L.

    el kétchup no es malo. hazlo tú en tu casa.
    los alimentos procesados, con aditivos que no sabes qué son, plastificados y empaquetados, sí son malos.
    si no les hubieses acostumbrado al kétchup maluno ahora no te quejarías.

    04 noviembre 2013 | 13:15

  7. Dice ser Cristina H

    Para aromas, los de Vaportrim que te permiten adelgazar respirando tu comida favorita (o eso dicen…) http://www.gastronomiaycia.com/2012/03/21/vaportrim-alimentos-golosos-inhalados/

    Pero es verdad que el olfato empieza a ser objeto de atención hasta por los especialistas del marketing: http://www.aromarketing.es/index.php/es/

    Y sobre la nocilla de pescado… hasta en la TV he visto a cocineros aconsejando que rebozaran el pescado en chocolate para ayudar a que el peque se lo comiera. Otros trucos «similares» e igual de «eficaces» son acompañar el pescado de patatas fritas o equivalentes, en otras palabras, acompañar los snacks con algunos bocados de pescado.

    Comenta en tu próximo post por qué lanzaron un ketchup verde. ¿O no fue Heinz? Escuché que era para decorar los platos y hacerlos más divertidos. Qué manía con que todo sea divertido hoy para los peques: comer, estudiar…

    04 noviembre 2013 | 16:28

  8. Dice ser Julio Basulto

    Tú sí que eres fantástico! Besos!

    07 noviembre 2013 | 13:20

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