Hipnosis erótica, ¿terapia alternativa y orgasmos sin contacto?

Desinhibición, experiencia erótica mental y orgasmos sin contacto físico alguno. Eso es lo que se promete desde lo que se viene a llamar “hipnosis erótica”. Yo no había oído hablar de ello, la verdad, pero mi amiga Mariana, argentina de Buenos Aires que estos días anda de okupa en mi casa, me cuenta que allí se ve cada vez más, ofertándose a veces como una especie de servicio sexual y, otras, como terapia alternativa para tratar ciertos tipos de disfunciones.

En el primero de los casos, se trata de hipnotizar a los clientes/pacientes para acceder a su inconsciente y, a través de un relato erótico guionizado y absolutamente personalizado, proporcionarles placer y llevarlos a vivir determinadas fantasías. El hipnotizado, siguiendo las instrucciones y sugerencias de su guía, sentirá físicamente lo que este o esta le «ordene» sentir. Es una experiencia mental de disfrute sexual a través de la palabra. El cuerpo, entretanto, descansa relajado y en ningún caso hay contacto físico.

hipnosis

GTRES

Al estar liberados de las represiones e inhibiciones propias del estado de vigilia, en esas sesiones hipnóticas uno puede ser todo aquello que desee, desde una dominatrix vengadora a un alto ejecutivo que en la intimidad disfruta con unos cuantos azotes, todo vale. En varios países de América Latina y en Estados Unidos, algunas terapeutas incluso venden sus sesiones hipnóticas a modo de podcast.

Personalmente, este uso de la hipnosis me recuerda a aquella peli futurista con Arnold Schwarzeneger, Desafío Total, en la que la gente acudía a una compañía especializada en implantar falsos recuerdos para vivir todo tipo de experiencias. O a aquella otra con Sandra Bullock, Demolition Man, en la que la gente follaba sin tocarse. Ocurre que las relaciones sexuales con intercambio de fluidos eran ilegales y para experimentar el sexo, la gente se metía en una cabina simuladora en la que los participantes se colocaban un casco que actuaba como estimulador en los centros del placer del cerebro. Pues eso, que me parece estupendo que exista y que la gente lo practique, pero yo me quedo con la piel y el intercambio de fluidos.

La otra vertiente es, como decía, la terapéutica. Consiste en llevar al paciente a un estado de relajación en el que, libre de represiones y estimulado eróticamente, pueda centrarse en aspectos particulares que le provoquen angustia o bloqueos, revelando situaciones reprimidas y desmontando sus consiguientes síntomas. Así, a través de evocaciones sexuales se intenta facilitar la exteriorización de conflictos inconscientes, con lo que se puede atacar mejor problemas como la anorgasmia o la disfunción eréctil. No obstante, son muchos los expertos que expresan sus dudas acerca de su efectividad. A saber.

10 comentarios

  1. Dice ser Noa

    ¡Y yo Lilih! No hay nada como la piel&piel.
    Me parece que las nuevas tecnologías nos hacen la vida mucho más fácil y a veces me cuesta recordar cómo era mi vida sin todas ellas, pero en esto ¡me planto¡ Quiero tocar que me toquen que los fluidos fluyan 😉 y no quiero una sesión de hipnosis que me haga sentir cosas, quiero sentirlas con un hombre que me vuelva loca jejejeje

    13 febrero 2014 | 11:10

  2. Dice ser Robertti Gamarra

    Todo lo que sea innovar me parece bien, excepto en el sexo. Quiero decir, tener sexo sin contacto es como perder el norte, y eso que entiendo que mucho los utlicen para curarse cosas, pero para mí el sexo es contacto y punto.
    http://interesproductivo.blogspot.com.es/2014/02/beneficios-del-mal-ajeno.html

    13 febrero 2014 | 11:22

  3. Dice ser Manolo

    A mi me dejais de cuentos y lo único que me hipnotiza eróticamente es esto: http://xurl.es/16b6y Paso de este tipo de historias. Yo quiero contacto físico a tope. Viva el sexo con y sin amor.

    13 febrero 2014 | 11:24

  4. Dice ser meequivoqué

    Ya que la amiga esta de okupa y sabe algo de eso de la hipnosis, haber si también se puede aplicar con la comida, que nos hipnoticen y que nos hagan sentir que estamos comiendo manjares, saboreando al maximo los gustos de estos. Como me iba poner de comer y beber bien sin tener que engordar.
    Primero nos comemos un bocata mortadela y luego que nos dejen con la sensación de habernos hinchado de manjares, problema del hambre resuelto, para la dieta cojonudo, y luego , como es merecido al haber comido bien, si por en el precio de la sesión entra, que nos haga lo de las sensaciones sexuales,y después, a ver la tele o leer un libro y a dormir.

    13 febrero 2014 | 12:51

  5. Dice ser siempre el mismo cuento de sociedades reprimidas

    Pero si eso es de lo más normal y fácil. Yo he llegado a conducir al orgasmo superior a varias chicas sin necesidad de contacto. Y orgasmos de los buenos, que decían que tocaban como el cielo y brincaban de espasmos muchas veces… Si el problema está en el muro que hay en el cerebro, que hay mucha cerrazón, mucha represión, mucha topreza contra el placer y el deseo… Vaya rollo…
    Primero andan demonizando el placer y luego quieren ser maestros en ello… Valla rollete…

    13 febrero 2014 | 13:00

  6. Dice ser qué desastre antinatura

    ¿Todavía siguen hablando de sexo, o queriendo hacer creer que lo aceptan, pero sin el sexo, convirtiéndolo en un objeto de oscuridad horriiiible terroríiiiifica?
    Pues vale. Aparece una noticia de una modelo en topless, o un modelo en peloticas, o incluso un cuadro… y la censuran… Qué desastre de civilización….

    13 febrero 2014 | 13:07

  7. Dice ser Carol

    Hay otra película de Woody Allen, el Dormilón, donde también se vaticina este tipo de orgasmos, producidos por una máquina llama «el Orgasmatrón»!!! película muy recomendable, con la particular visión del futuro según Woody Allen, jeje

    13 febrero 2014 | 14:34

  8. Dice ser Izara

    Estoy de acuerdo con lo que dice arriba, Robertti Gamarra. El sexo para mí (con o sin amor, eso ya a gusto de cada particular) es algo tan extraordinario, una forma de contacto, de fusión, tan completa e insustituible, que por mucho que evolucione la ingeniería nanotecnológica y el mundo se llene de magos Copperfield dispuestos a hipnotizarnos con sus poderes placenteros, yo… me quedo y seguro que no seré la única renegada de la tecnología, con los besos que te hacen flotar, las caricias de todos los colores, el sentir la piel de quien te hipnotiza pegada a la tuya y con los orgasmos que te hacen despegar de la tierra sin necesidad del casco estimulador de los centros nerviosos jajajajaja.
    Conmigo que no cuenten para un podcast….

    13 febrero 2014 | 15:32

  9. Dice ser PEZ

    No me importaría probarlo…creo que funcionaría, la imaginación es poder…

    13 febrero 2014 | 22:25

  10. Dice ser Doña Francisca

    Si la experiencia es positiva,relajante, q mas quieres Baldomero, no cambio el cuerpo a cuerpo por nada en el mundo,pero podría probarlo sin problemas.
    Feliz fin de semana.

    14 febrero 2014 | 07:38

Los comentarios están cerrados.