Reflexiones de una librera Reflexiones de una librera

Reflexiones de una librera
actualizada y decidida a interactuar
con el prójimo a librazos,
ya sea entre anaqueles o travestida
en iRegina, su réplica digital

Entradas etiquetadas como ‘roberto bolano’

¿Y qué si Bolaño se lo inventó TODO?

Unos meses de bolañomanía en norteamérica y ya hay quien busca motivos para pulverizar el mito y la obra del escritor chileno, fallecido en Barcelona en 2003.

A reginaexlibrislandia llegaron ecos de la fiebre por el autor de El gaucho insufrible o Los detectives salvajes y, especialmente, por la majestuosa 2666, a través de clientes que se acercaban a mis confines en busca de ejemplares ‘para enviar’ a familiares y amigos residentes al otro lado del charco.

Lo descubrí sobre el terreno cuando decidí indagar después de que cuatro o cinco personas me dejaran tiritando la balda Bolaño antes de Navidad:

– Regina: Estoo, disculpe, ¿es para usted ese ejemplar?- Cliente: No, la verdad es que es para mi nieto, que vive en Nueva York

– Cliente2: Pues es un encargo de un amigo que vive en Washington y me pidió que se lo llevara

– Cliente3: Es para mi nieto, que vive en América y lo quiere por reyes

– Cliente4: Mi hermana es profesora allí y por lo visto hay un boom Bolaño ahora

En cuanto tuve un segundo y un cafelito a mano me zambullí por estos mares de bits para husmear tanto en medios norteamericanos como en librerías electrónicas radicadas en los juntitos.

Poco tardé en toparme con una auténtica bolañomanía, cosa que, como bibliófila nata, me alegró infinito.

Y días después uno de mis libreros irrumpió en mi escritorio con la vena de la yugular del tamaño de un morcillón de Burgos:

– Librero: Regina, RE-GI-NAAA- Regina: ¿Qué? ¿QUEEEEE?

– L: ¿A que no sabes quien está nominado para el National Book Award 2008?

– R.: Mmmm, ¿Auster? ¿Murakami?

– L.: Noooo: BOLAÑO, Bolaño y su 2666

– R.: ¡Anda, ole con ole para la Providencia Librera!

Pero ahora otra noticia me ha congelado la sonrisita en una mueca macabra. Resulta que, en lugar de comentar su obra, ahora en los juntitos les da por escarbar en la vida de Bolaño: que si fue o no heroinómano, que si parte de su autobiografía es falsa…

La noticia de una corresponsal española en Nueva York sintetizaba una situación que me pone el pelucón mirando a Cuenca:

Y digo yo, reginaexlibrislandianos de pro, fieles y asiduos… ¿qué más da si iba o no de heroína hasta las trancas?

¿Y qué si ficcionó su propia vida? ¿Lo dejaréis de leer y de valorar como novelista por eso?

Yo no, claro. Que de bolañomaníacos de medio pelo ya están los EEUU llenos… Regina ExLibris dixit.

“¡Pero, señorita, este libro no es de tapa dura!”

En plena era digital lo más confuso parece ser el negro impreso sobre blanco y sus vestidos. O al menos eso es lo que veo cada día en reginaexlibrislandia.

Atrás quedaron los años en que el formato de un libro era, básicamente y para los menos bibliófilos, de ‘tapa dura’ o ‘de bolsillo’, con alguna que otra variante ‘de lujo’, ‘en piel’ o similares.

Pero ahora la línea que separa ambas ediciones está definitivamente desdibujada, y hay tantas variantes flotando en el limbo formal que hay quienes se pierden en la búsqueda de su ejemplar, especialmente si es un encargo o un regalo.

¿Ejemplos? Mi conversación con una clienta:

– Clienta: Oiga, buenas tardes.- Buenas tardes, ¿qué desea?

– C.: Mire, yo quiero un ejemplar de El gaucho insufrible, de Roberto Bolaño.

– R.: Ah, muy bien, déme un segundo y se lo traigo. ¿Lo prefiere en bolsillo?

– C.: No, no, no. ¡Que no sea de bolsillo! Es un regalo para mi nieto, que vive en EEUU y me lo ha pedido en la ‘edición grande’.

– R.: Es curioso, leí que hay una auténtica fiebre por Bolaño ahora en Norteamérica…

– C.: Pues debe ser, porque me ha insistido mucho.

 

En ese impás mi pelucón y yo correteamos a la balda donde descansan las criaturas literarias de Bolaño, para regresar a mi escritorio ejemplar en mano…

 

– R.: Aquí lo tiene, parece que hemos tenido suerte…- C.: ¡Pero, señorita, este libro que me da no es de tapa dura!

– R.: Mucho me temo que sí, aunque realmente no… Verá, en España a Bolaño lo edita Anagrama, que tiene dos formatos, uno más económico que es ‘de bolsillo’, y otro que es de ‘tapa dura’ aunque no literalmente, porque como verá es blanda… Uno vale 12,50 euros y el otro, el rojo, 7 euros

– C: Ya, ya, pero el más caro es de tapa blanda, se parece mucho al que usted dice que es de bolsillo, y mi nieto me ha dicho que no quiere de este tipo.

– R.: Como usted vea, pero estos son las dos únicas ediciones de El gaucho insufrible de Bolaño en España.

– C.: Mire, ¿sabe lo que le digo? Que mejor se lo pregunto cuando hable con él por teléfono… ¡Adiós!

Y se fue sin el libro de Bolaño y ligeramente contrariada…

Y a vosotros, reginaexlibrislandianos de pro, ¿os ha pasado algo similar? En algunos títulos… ¿realmente hay tanta diferencia formal entre unas ediciones y otras? ¿Creeeis que las editoriales deberían unificar ediciones, como en el mercado anglosajón, donde son más homogéneas que aquí?