Reflexiones de una librera Reflexiones de una librera

Reflexiones de una librera
actualizada y decidida a interactuar
con el prójimo a librazos,
ya sea entre anaqueles o travestida
en iRegina, su réplica digital

Archivo de mayo, 2018

Cinco novelas para leer y sucumbir a la narrativa feroz de Tom Wolfe

Feroz, lúcido e instantáneamente adictivo. Así es Tom Wolfe, padre del ‘nuevo periodismo’ y un autor que hay que leer. Ha fallecido, pero su obra late en los anaqueles de las librerías, y en reginaexlibrislandia, donde somos de un tomwolfenianismo desmesurado, hemos montado un rinconcito consagrado a su obra. Porque él lo vale.

Si su muerte levanta esa polvareda mediática que inocula el bibliointerés en algún que otro lector estaremos al quite para desplegar nuestro biblioarsenal tonwolferiano. 

Con su obra, Tom Wolfe, dotado de un talento fuera de serie para contar historias, articuló el Nuevo Periodismo, un novedoso género consistente en narrar hechos reales y articularlos en forma de libro que bien podía ser novela, así como las llamadas obras gonzas escritas por quienes entran tanto en la historia que narran que son, a la vez, observadores y protagonistas de lo que escriben.

Y para quienes no tengan claro por dónde empezar a leer a Tom Wolfe he preparado una selección de cinco títulos con los que hincarle el bibliodiente a este gigante de la fusión de los géneros literario y periodístico, capaz de reconstruir historias vívidas, hilarantes, vertiginosas y, eso sí, siempre cargadas de una crítica tan despiadada como venenosa y veraz.

¿Listos? Pues vamos a por esos cinco títulos para empezar a leer a Tom Wolfe:

1. La hoguera de las vanidades, Tom Wolfe. Anagrama.

Esta monumental y ambiciosa novela de Tom Wolfe, su primera incursión en la narrativa más allá del periodismo, es una crítica tan brillante como brutal de las ramificaciones del capitalismo rapaz del Wall Street de 1980 y la gran novela de NYC por excelencia. En ella conocemos a un tal Sherman McCoy, un joven yuppie, adinerado y arribista, que es la joven estrella de una prestigiosa firma de brokers. Pero su suerte cambia el día que, tras recoger en el aeropuerto a su amante, ésta atropella a un joven negro al atravesar el Bronx camino de su coqueto picadero en el centro. A partir de ahí todo y todos se vuelven en su contra para hundir a Sherman y para mostrar las entrañas de la ciudad que representa el epicentro del dinero y el poder, una sucia ratonera plagada de conflictos raciales y envidias de clase donde todos quieren hacerse ricos cuanto antes y como sea, y donde el dinero, el sexo y el poder son las monedas de cambio.

La hoguera de las vanidades

La hoguera de las vanidades

2. Bloody Miami. Tom Wolfe. Anagrama. 

Una fábula vulgar, grotesca e irreverente, cargada de adrenalina, cincelada con sarcasmo y cimentada con el incuestionable talento de Wolfe para el reportaje, que en su día lo encumbró como periodista. En ella Edward T. Topping IV, blanco, anglo y sajón, de una pequeña dinastía de Yale, va con Mack, su mujer –también Yale– a un restaurante. Y mientras se desocupa una plaza para aparcar su utilitario ecológico un Ferrari, conducido por una latina despampanante y cargada de oro, les birla el hueco y se burla de Mack. Y es justo a esa ciudad -donde, como afirma Wolfe, una población venida de otro país, de otra cultura, con otra lengua, se ha hecho dueña del territorio en sólo una generación-, han enviado a Ed Topping para reconvertir el Miami Herald en un periódico digital, sin edición en papel, y lanzar El Nuevo Herald solo para las masas latinas. Wolfe descuartiza a una ciudad chamuscada por el sol, dividida y volátil, donde todos odian a todos y con la digitalización de un tabloide como telón de fondo.

Bloody Miami

Bloody Miami

3. Todo un hombre. Tom Wolfe. Anagrama.

Sin perder un ápice de su humor corrosivo, su lucidez y su narrativa absorbente Wolfe te adentra en las entrañas de una de las grandes urbes del viejo sur norteamericano: Atlanta, esa gran dama sureña de modales impolutos, rancio abolengo y melaza que esconde en las enaguas un hervidero de conflictos raciales, corrupción, lujuria, ostentación y ambiciones desatadas. En ella ha prosperado Charlie Croker, que con sesenta años ha levantado su propio negocio inmobiliario y tiene una segunda esposa treinta años más joven que él. Pero la vida de este triunfador se empieza a resquebrajar cuando descubre que no puede devolver el cuantioso crédito que pidió al banco para expandir su coloso de ladrillo. Croker inicia un descenso a los infiernos en el que se cruzará con un joven idealista que soporta con estoicismo los embates de la vida y un abogado negro que ha ascendido socialmente. Un retrato trepidante, divertido y absorbente sobre los trapos sucios del viejo sur. 

Todo un hombre

Todo un hombre

4. Ponche de ácido lisérgico. Tom Wolfe. Anagrama.

Calificada por la crítica mundial como una de las mejores obras de no ficción del siglo XX, Wolfe levanta a palabras la espléndida crónica de un viaje de costa a costa por EEUU mezclando técnicas narrativas con técnicas periodísticas (investigación exhaustiva, entrevistas rigurosas, querencia a la exclusiva y especial atención al detalle revelador). Estamos en los años sesenta y Ken Kesey, autor de la colosal «Alguien voló sobre el nido del cuco«, lidera a los «bromistas», una desmadrada corte de jóvenes artistas que recorren los Estados Unidos en un autobús que conduce Neal Cassady (el mítico Moriarty de En el camino, de Kerouac), y celebran la vida, el éxtasis orgiástico, y las drogas que abren las puertas de la percepción con el F.B.I. pisándoles los talones. Viaja al corazón del movimiento hippie embarcándote en esta aventura fascinante contada con escrupulosa fidelidad y aderezada con la seducción de una atmósfera y unos personajes de órdago. Brillante.

Ponche de ácido lisérgico

Ponche de ácido lisérgico

5. La palabra pintada & ¿Quién teme al Bauhaus feroz? Tom Wolfe. Anagrama.

Este volumen reúne dos títulos de Wolfe que levantaron ampollas en los ámbitos pictórico y arquitectónico: La palabra pintada y ¿Quién teme al Bauhaus feroz? En la primera Wolfe describe el curso errático de la historia social del arte moderno y afirma que es una parodia de sí mismo: tan literario, académico y manierista como la pintura contra la que se había rebelado. En ¿Quién teme al Bauhaus feroz? Wolfe lleva su crítica al ámbito de la arquitectura desde el fin de la I Guerra Mundial, cuando la aspiración del Bauhaus, era «empezar de cero», es decir, era acabar con la arquitectura «burguesa», por lo que estos marxistas sueñan con edificar un mundo riguroso y abstracto. Expulsados de Alemania por el nazismo, se refugian en los Estados Unidos. Así, en la Babilonia del capitalismo, se produce la paradoja de una atemorizada obediencia a los cánones de una arquitectura desnuda, fría y abstracta, que prohíben el lujo y hasta el optimismo. Una y otra son obras maestras y constituyen, cada cuál en su campo, una venenosa crítica a esa gran verdad: cómo el dinero, los modales y otros intereses han perpetrado la gran manipulación del gusto público.

La Palabra Pintada & Bauhaus Feroz

La Palabra Pintada & Bauhaus Feroz

Trivial: ¿Cuánto sabes de la novela ‘El Gran Gatsby’, de F. Scott Fitzgerald?

(El gran Gatsby, 1974 / Paramount)

(El gran Gatsby, 1974 / Paramount)

En el verano de 1922 Nick Carraway se topa con un héroe de la IGM, de enigmático pasado y cuya fortuna es tan inmensa como dudosa. Su historia es la de una caída tras la que solo queda el desarraigo. Una novela sobre las ilusiones perdidas que retrata a una generación consagrada al exceso hasta que el crack del 29 dio el fin de la fiesta.

Si eres de los que sí leyó la novela atrévete con el bibliotrivial ‘El Gran Gatsby’ de Regina ExLibris. ¿Listo para demostrar lo gastbyano que eres? ¡Vamos!

 

Si te gustó The Knick y no eres de náusea fácil lee ‘De matasanos a cirujanos’, de L. Fitzharris

Espeluznante, delicioso y adictivo. Así es De matasanos a cirujanos, de L.Fitzharris en Debate, mi última gran descubrimiento libresco, un viaje entre líneas a esa truculenta época de la medicina victoriana donde una intervención era una auténtica carnicería.

The Knick y De matasanos a cirujanos

The Knick y De matasanos a cirujanos

Eso sí, para disfrutar leyéndolo además de una bibliofilia ecléctica y pelín turbia hay que tener un buen estómago. No es para cualquier paladar libresco, las cosas como son.

Pero tampoco tienes que ser médico ni dominar terminología científica. Y ese es, sin duda, uno de sus grandes aciertos: construir un relato sencillo y absorbente sobre ese momento crucial en la historia de la medicina en el que las mesas de operaciones empezaron a dejar de ser sórdidos mataderos para perfilarse como quirófanos.

Sí, tal cual.

Porque en los hospitales victorianos el mejor cirujano era quien, cuchillo y sierra en mano, cercenaba más y mejor en menor tiempo sin inmutarse ante los alaridos del paciente despierto. El material, como las incisiones, era rudimentario y ni uno ni otras se limpiaban, así que al término de la intervención una infección siempre se llevaba a alguien por delante, ya fuera el paciente, el médico, e incluso a ambos.

Además, las salas de operaciones eran teatros abiertos al público, previo pago de una entrada, con lo que las puertas siempre estaban abiertas para todo tipo de gérmenes.

En este entorno sórdido, brutal, desagradable y antihigiénico se practicaba a pelo la mejor cirugía en el siglo XIX.

Al menos hasta que irrumpe Joseph Lister, un matasanos dispuesto a dejar de serlo que resolvió el mortal enigma de la causa de las infecciones que cambiaría el curso de la historia de la medicina justo cuando, por fin, se empezaba a sedar a los pacientes.

Herramientas de cirugía victorianas

Herramientas de cirugía victorianas

Y esa es la historia que desgrana Lindsey Fitzharris en un pedazo de libro que me ha tenido en vela toda la santa noche y al que me mantengo aferrada tras el escritorio de la librería, aún con los globos oculares a punto de explotar. Y es ahí cuando uno de mis libreros entró en acción:

Librero: ¿Qué libro es ese, Regina?

Regina: ¡Uhhh! De matasanos a cirujanos, Joseph Lister y la revolución que transformó el truculento mundo de la medicina victoriana

Librero: ¿Cómo?

Regina: Pues eso, un ensayo que se lee como el thriller más trepidante y truculento que puedas imaginar, querido.

Librero: ¿Y no es muy técnico, muy para médicos y freaks?

(La clínica Groos, 1875 / Thomas Eakins)

(La clínica Groos, 1875 / Thomas Eakins)

Regina: ¡Para nada! Fitzharris retrata el siniestro período entre 1850 y 1875, con un elenco de personajes -algunos brillantes, otros directamente criminales- de las sucias escuelas de medicina y lúgubres hospitales donde aprendieron su oficio, las macabras morgues donde estudiaron anatomía, y los cementerios ocasionalmente saqueados en búsqueda de cadáveres que diseccionar. Y como todo eso cambió. Pero se le muy, muy bien! Tanto que no puedes dejarlo. Aunque, claro, no es para cualquier perfil lector

Librero: Ya imagino, ya… ¿Pistas para el retrato robot del potencial lector?

Regina: Mmmm, pues al margen de que seas o no cirujano te diría que si te gustó la serie The Knick, tu bibliofilia es ecléctica y pelín truculenta y no eres de náusea fácil lee De matasanos a cirujanos

Librero: ¡Ja, ja, ja! ¡Recibido! Definitivamente no es para mí…

Mi librero, que es de náusea fácil,  no le hincó el bibliocolmillo, pero al cabo de un rato un regianexlibrislandiano asiduo que también me vio con De matasanos a cirujanos se lo llevó. A ver qué me cuenta cuando lo termine…

Por mi parte os digo dos cosas: que es una lectura que siempre recomendaré en la librería… según a quién, claro. Y que, después de leer De matasanos a cirujanos, veo con otros ojos ese toque tan arrebatadoramente aséptico de un quirófano moderno. Palabra de Regina ExLibris.

Cinco novelas para leer, reír y espantar la astenia primaveral a librazos

En la librería siempre me sacudo la astenia primaveral a librazos. Pero este año la melancolía y la desgana amenazaban con desplomarse sobre mi regio pelucón como una masa densa y gelatinosa de la que no iba a lograr desprenderme tan fácilmente, así que me autoprescribí la lectura encadenada de cinco títulos para echarme unas risas de novela.

Y funcionó, queridos, vaya si funcionó. Tanto que llevo unos días que soy todo dientes, con una sonrisa que me da la vuelta a la cara. Palabra de Regina ExLibris.

De hecho ha sido tan efectiva mi bibliomedia y tan radical el cambio en mi ánimo que mi equipo de libreros decidió probar mi biblioterapia. Y como a ellos también parece que les funciona me he dicho:

“Nena, que fluyan las risas de novela. Monta una mesa con esas cinco novelas que tantas carcajadas de tan hecho soltar”

Y aquí estoy. Y estas son mis más recientes cinco novelas para leer y echarse unas risas y, de paso, sacudirse la astenia primaveral del demonio a librazos.

¿Listos? Vamos:

1. Lucky Jim. Kingsley Amis. ImpedimentaDesternillante novela ambientada en el ecosistema universitario británico que catapultó a la fama a Kingsley Amis. Su protagonista es Jim Dixon, un profesor universitario de Historia Medieval que procede de un estrato social humilde y que si quiere conservar su puesto debe escribir y publicar un artículo que haga hincar la rodilla a lo más granado de los eruditos del claustro. Si ya de entrada con semejante papelón no sabe por dónde demonios salir, también necesita ganarse la camaradería de su jefe de departamento, un pedante insufrible de difícil trato. Y para rematar, tiene que reconducir la atracción que siente por una compañera en un precario equilibrio emocional tras intentar suicidarse por un desengaño amoroso. Vertiginoso despliegue de humor cáustico e inteligente, que es marca de la casa en un género, el de la narrativa de campus, que es típicamente inglés.

Lucky Jim

Lucky Jim

2. Mi abuela rusa y su aspiradora americana. Meir Shalev. Ático de los libros. Todas las abuelas son especiales, pero algunas más que otras. En Nahalal, el pueblo natal de Shalev, conocemos a su asombrosa abuela Tonia, que llegó a Palestina en barco desde Rusia y pasó toda su vida luchando contra el peor enemigo de su familia en esas nuevas tierras: la suciedad. A Tonia no se la vio nunca sin un trapo al hombro. Recibía a los visitantes fuera de casa y sólo permitía a unos pocos elegidos entrar en su inmaculada morada. Hilarante y conmovedora, la historia de la abuela Tonia y sus reglas cobran vida en un relato que gira alrededor de la llegada de una enorme y reluciente aspiradora americana, regalo de un tío que había emigrado a EEUU. Todo el pueblo asistirá atónito a la llegada del curioso objeto, que despertará reacciones encontradas. La abuela Tonia estará encantada con su misterioso aparato hasta que un detalle la relegará a un aseo al que ya nadie entra. Mezclando magistralmente realidad y ficción, Shalev crea personajes inolvidables y traza un retrato emotivo de su familia y de toda una época, la de los primeros colonos judíos en el recién creado Estado de Israel, con humor, ternura y sin caer en adoctrinamientos.

Mi abuela rusa y su aspiradora americana

Mi abuela rusa y su aspiradora americana

 3. Genio. Patrick Dennis. Acantilado. En un Hollywood donde la mentira, el engaño y la ostentación son moneda corriente, el director de culto Leander Starr es capaz de engatusar al mismísimo diablo. Pero los años no perdonan ni a un genio como él, y aunque el público le adora, sus ex mujeres y el fisco terminan por cercarle. Por eso se fuga a México decidido a rodar una película, que le permita recuperar el prestigio y la fortuna. Se trata de El Valle de los Buitres, y solo necesita dinero y a un guionista. Por suerte conoce al candidato perfecto, Patrick Dennis, un escritor en plena crisis creativa. El encuentro del director y el escritor detona una lucha de egos y una hilarante sátira del disparatado mundo de las estrellas del cine clásico de Hollywood tan trepidante, divertida y asombrosa como pocas, sí, pero en la línea de su maravillosa Tía Mame.

Genio

Genio

4. Cómo se hizo la guerra de los zombis. Libros del Asteroide.  Josh Levin es un aprendiz de guionista treintañero que se gana la vida dando clases de inglés para extranjeros mientras sueña con vender sus historias a una productora de Hollywood. Su portátil está lleno de ideas para guiones, pero su mayor apuesta es «La guerra de los zombis». Cuando un día llega a su apartamento y se encuentra al casero -un veterano de guerra tarado- hurgando en su colada, decide mudarse con Kimiko, su adorable novia. Todo parece ir bien hasta que Josh va a una fiesta en casa de Ana, una estudiante bosnia con un marido violento y celoso… Ambientada en unos Estados Unidos todavía traumatizados por los atentados del 11-s, esta es una hilarante novela sobre un tipo que está convencido de que «uno se puede organizar bien la vida sobre la base de la ausencia absoluta de esperanza y ambición». Risas y lucidez a cada salto de línea.

Cómo se hizo La guerra de los zombies

Cómo se hizo La guerra de los zombies

5. Lunario del Paraíso. Gianni Celati. Periférica. A finales de los años 70 el gran Gianni Celati, uno de los autores italianos más relevantes del cambio de siglo, publicó esta novela mítica y desopilante. En ella Giovanni se enamora en una playa de su país de una jovencita alemana y la sigue hasta el Hamburgo de The Beatles presa de cien mil furores, tanto de la carne como del espíritu. He aquí un filósofo andarín, un amante caballeroso y galante hasta el delirio, pero con un agujero en el zapato, un pobre infeliz que filosofa con profundidad y con palabras sencillas. Esta divertidísima novela, escrita en estado de gracia, cargada de diálogos y de escenas memorables, ofrece humor a raudales y aventuras trepidantes y disparatadas con ecos de la mejor literatura picaresca. Un antihéroe entre bobalicón y admirable que, sin duda, termina por conquistarte como lector.

Lunario del paraiso

Lunario del paraiso

El Pollo Pepe, un superventas que lleva 20 años arrasando en librerías

Abran paso al Pollo Pepe, el bibliorey de los más pequeños. Si hay un título que habla de tú a tú a cualquier novela y autor de éxito es El pollo Pepe, un superventas que lleva vendidos más de un millón de ejemplares. Tal cual.

El Pollo Pepe

El Pollo Pepe

En la primavera de 1998 El pollo Pepe llegó a las librerías: un libro de 10 páginas, 53 palabras, 3 pop-ups y un desplegable para peques de entre 0 y 5 años. Uno más de tantos (y tan buenos) títulos de este tipo de biblioartefactos que, sin embargo, dos décadas después es el rey indiscutible de su bibliosector.

El secreto de su éxito entre niños y adultos es simple: la historia es muy sencilla, permite interactuar con el personaje y, además, es tremendamente divertido.

Por mi parte jamás olvidaré la primera vez que me topé con El Pollo Pepe entre anaqueles, porque me cautivó desde el instante en que lo hojeé. Una amiga librera de la vieja escuela me lo descubrió. Y hace un rato he sido yo quien le ha revelado el bibliosecreto a un librero recién llegado a reginaexlibrislandia.

Hablábamos de best sellers, del escaso margen de rotación editorial, de novelas ‘por encargo’, de cifras de ventas y de los entresijos del mercado del libro cuando, de pronto, con una mirada entre desafiante y pícara pero con la solemnidad de quien está a punto de revelar una información crucial, le solté a bocajarro:

Regina: Oye, ¿Quieres conocer al superventas más discreto y fiable de las librerías? LIbrero: ¿Qué? ¿Cómo?

Regina: Mira, te presento a El Pollo pepe, de SM. Un best seller que sin zarandajas mediáticas se vende como churros. Es adorable, a mí me encanta y, lo que es mejor, a los niños de hasta 5 e incluso 6 añitos les vuelve locos. ¿Y a los padres también!

Librero: ¿Ja, ja, ja? ¡Mira qué portada tiene!

Regina: Verás, es la historia del pollo Pepe: come y come y come y va creciendo. Pero, cógelo, es algo que tienes que ver.

Librero: ¡Ja, ja, ja! ¡Me encanta! Mírale ahí, espatarrado. ¡Ja, ja, ja!

El Pollo pepe (Pop Up)

El Pollo pepe (Pop Up)

Regina: Sí, es genial. Salió por primera vez a finales de los noventa con otro de un perrito que pasó desapercibido. Hoy comparte colección con La Cerda Clea y otros animales, pero no parece tener el mismo magnetismo con los peques…

Librero: Es que por lo que veo El pollo Pepe es mucho pollo Pepe, ¿no?

Regina: Sí, y no sólo es que el libro es una delicia, es que te puedo asegurar que, en su campo, le da cien vueltas a Stephen King y Ken Follet juntos. ¡Procura tenerlo siempre en reginaexlibrislandia!

Y ahí nos quedamos las dos, diseccionando un libro que, desde entonces, es uno de mis favoritos y que, como en su día me advirtió mi amiga librera, no solo se vende mucho y muy bien, sino que es un título de esos de prescripción fácil y con éxito garantizado, por lo que siempre encontraréis ejemplares de El pollo Pepe en mis confines.

Y aún os digo más, aunque este regio pelucón que os escribe no deja de recomendarlo, no debo ser la única pollopepeadicta, porque ya van dieciséis ediciones y, la nueva ya está en el horno. Ahí es nada.

Así que, ojito bestsellers del entramado editorial: quedaros con su cara si no le habíais visto antes porque El Pollo Pepe anda suelto por nuestras librerías y se está hartando de vender ejemplares… ¡literalmente!

El Pollo Pepe

El Pollo Pepe

 

Trivial: ¿Cuánto sabes de ‘El guardián entre el centeno’, de J.D. Salinger?

Un adolescente cercado por su fracaso escolar, la rigidez de su familia, la muerte de su hermano, el sexo y las dudas, decide pasar una semana solo en Manhattan antes de volver a casa tras su expulsión del internado. El guardián entre el centeno es su confesión a quemarropa y sin tapujos, y la radiografía de Salinger de un adolescente devorado por contradicciones.

Si eres de los que sí leyó la novela atrévete con el bibliotrivial ‘El guardián entre el centeno’ de Regina ExLibris. ¿Listo para demostrar lo holdencouldfieldiano que eres? ¡Vamos!

 

Diez madres de Novela de armas tomar

Madre no hay más que una, pero madres literarias unas cuantas. Por suerte, claro. Y andan sueltas entre líneas silueteadas bajo múltiples perfiles y patrones: abnegadas, crueles, tiernas, celosas, ambiciosas, divertidas, contradictorias, desequilibradas, vitalistas, adúlteras, obsesivas, glamurosas, espectrales, depresivas, brillantes, posesivas, desnaturalizadas, fuertes, inspiradoras, transgresoras… Pero, por encima de todo, madres de novela.

Y como en reginaexlibrislandia tenemos una particular querencia a las bibliomadres, he montado una mesa cargada con esas diez madres de novela que, cada una con sus matices y aristas, creo que merece la pena leer.

¿Listos? Pues vamos con esas Diez madres de novela según Regina ExLibris:

  1. Una Madre. Alejandro Palomas. Siruela. Alejandro Palomas te pone un cubierto más para celebrar la Nochevieja más explosiva, catártica y divertida que puedas imaginar. Será en la casa de Amalia y, aunque creía que se moriría sin lograrlo, acudirá toda su familia: sus tres hijos (Silvia, Fer y Enma), su hermanísimo (el tío Eduardo), el perro de Fer y su propia perra. Hubo un marido, pero se esfumó y no está, ni quieren que esté, aunque sí el “compañero” nórdico de Silvia y la novia de Enma. Y los dramas y secretos que cada uno reserva para los postres. El nubarrón en forma de hongo que está suspendido sobre la mesa se va ensanchando y amenaza con descargar la tormenta emocional desde el primer vino. Una novela coral con epicentro en la silueta entre delicada e inocente de una madre que, con salidas de órdago y una inocencia letal, logra que todos bailen a su son.
Una Madre

Una Madre

  1. Tenemos que hablar de Kevin. Lionel Shriver. Anagrama. Abrupto, lúcido y desgarrador relato de una maternidad espinosa en el que Eva, una mujer urbanita y de éxito, cede a los deseos de su marido de ser padres. Así, fruto de la indecisión y de múltiples miedos más que del amor y del deseo, es como llega Kevin al mundo y así, en un entorno cargado de dudas, tensiones y frustración, es como crece un niño que es difícil de llevar ya desde su nacimiento. Y si ya es complicada la relación madre-hijo con rechazo mutuo incluido, tampoco se lo pondrá fácil la criatura a sus niñeras y enfilada la adolescencia Kevin se perfilará como una criatura dañina. Relato trepidante, magnético y sobrecogedor con final sangriento incluido que te golpea con la intensidad de un mazazo en el cráneo.
Tenemos que hablar de Kevin

Tenemos que hablar de Kevin

  1. La decisión de Sophie. William Styron. Ciudad de Libros. Sophie es una joven polaca que vive en una casa de huéspedes en el Brooklyn de los años 40 junto a Nathan, judío obsesionado por el pasado, y Stingo, un joven escritor del Sur. Este singular trío convive en un entorno en apariencia feliz, pero intoxicado por los secretos y las pérdidas de cada cual. Sobre todo las de Sophie, que encarna la tragedia del holocausto y en torno a quien se hilvana entre líneas una historia demoledora de maternidad que es el pilar de toda la trama. Un relato estremecedor y hermoso por igual, que profundiza en la naturaleza del mal tanto del criminal como de la víctima, y que da fe de cómo el pasado, si se filtra en el presente, termina por minar las ganas de vivir y de olvidar.
La decisión de Sophie

La decisión de Sophie

  1. Tú no eres como otras madres. Periférica & Errata naturae. Angelika Schrobsdorff reconstruye con una prosa electrizante la vida de su madre, una mujer nacida en una familia de la burguesía judía de Berlín, irreverente e inconformista, liberada de los prejuicios y deseosa de casarse con un artista. Else vivirá de lleno la eclosión de la Alemania de entreguerras junto a la culta bohemia berlinesa de los «locos años veinte», un periodo en el que tendrá tres hijos de tres padres diferentes, fiel a las dos promesas que se hizo de jo­ven: vivir la vida con la máxima intensidad y tener un hijo con cada hombre al que amara. Alucinante y absorbente historia de una madre-puzzle, donde cada pieza que siluetea Schrobsdorf es el reflejo de un carácter y de una época absolutamente extraordinarias, tan convulsas como fascinantes. Un novelón de principio a fin.
Tú no eres como otras madres

Tú no eres como otras madres

  1. El vino de la soledad. Irène Némirovsky. Salamandra. Exquisita y agridulce novela recrea el destino de una adinerada familia rusa refugiada en París, y describe la venganza de una joven contra su madre. Con una mirada inteligente y ácida, el relato sigue a la pequeña Elena hasta la mayoría de edad, desde Ucrania hasta San Petersburgo, Finlandia y París, donde se instalan tras el estallido de la revolución rusa. Su madre, una mujer bella y frívola de origen noble, desprecia a su marido, un potentado judío, y a su hija. Tras la muerte de la gobernanta, la vida de la niña se vuelve aún más difícil, pues su madre instala en la casa a su amante, más joven que ella. Pero pronto Elena se transforma en una joven hermosa, y cuando descubre que atrae al amante de su madre, sabe que ha llegado la hora de su venganza. Lúcida disección de la rivalidad entre una madre y su hija.
El vino de la soledad

El vino de la soledad

  1. En cinco minutos levántate, María. Pablo Ramos. Malpaso. Monólogo torrencial y vívido de una madre a las puertas de la vejez, de una madre sufridora que aglutina toda la crudeza y la devoción de quien soporta los azotes de unos hijos descarriados y un marido indolente y atrabiliario. Es el relato de una vida de estrecheces y oscuridad, solo iluminada por la ternura y la belleza de la voz maternal que repasa, entre la vigilia y el sueño, los claroscuros, las heridas, los silencios, las pequeñas alegrías y los buenos momentos del viaje interior por sus recuerdos. Es también la historia de la construcción (y destrucción) de una familia. Pablo Ramos da voz a María, la madre conciliadora y pilar de un orden familiar humilde, duro y desestructurado.
En cinco minutos levántate María

En cinco minutos levántate María

  1. Leche caliente. Deborah Levy. Anagrama. Dos mujeres inglesas, madre e hija, llegan a la costa de Almería en busca de una cura para la madre. La hija, Sofia, tiene veinticinco años, trabaja en una cafetería, pero sobre todo se dedica a cuidar a su madre, que padece una enfermedad de diagnóstico difuso que le produce insistentes dolores. En los pocos ratos libres que le deja su posesiva madre, Sofia conoce a una alemana y a un apuesto socorrista de la playa, y así detona una hipnótica historia de autodescubrimiento, iniciación sexual cargada de ambigüedad, y búsqueda de espacios de libertad frente a una madre enferma y controladora. Novela envolvente, sensual y perturbadora.
Leche caliente

Leche caliente

  1. La señora Fletcher. Tom Perrotta. Libros del Asteroide. Eve es una mujer divorciada de cuarenta y tantos que vive en Nueva Jersey. Como su hijo se acaba de ir a la universidad se apunta a un curso universitario, donde conocerá a gente de lo más variopinta, descubrirá la pornografía en internet y las aplicaciones de citas, y hará cosas que meses atrás le hubieran parecido inconcebibles. Mientras, su hijo, descubrirá que la vida en el campus no es lo que había imaginado. Así que madre e hijo se enfrentan a una de crisis de identidad: Eve se suelta la melena mientras Brendan capea el desencanto de su recién estrenada madurez. Desternillante, tierna y lúcida sátira en la que, a Brendan y al lector, tendrán que aceptar que Eve es, antes que una madre, una mujer. Ah, y que para una mujer hay vida (y mucha y muy agitada) más allá de los 40.
La señora Fletcher

La señora Fletcher

  1. La madre. Maksím Gorki. Akal. Pelagia Nílovna Vlásova, protagonista de Una Madre, es uno de los personajes de más peso en la literatura rusa, que está inspirada en la madre de un obrero metalúrgico arrestado por la policía zarista el 1 de mayo de 1902 en la primera manifestación obrera de Sórmovo, en el centro de la Rusia europea. La madre es el relato pormenorizado de cómo una víctima, Pelagia, una ‘vieja de cuarenta años‘, una mujer apaleada por su marido y embrutecida por el trabajo doméstico, un ser simple, ignorante y resignado a su sino es capaz de romper los dos lastres psicológicos que la atan a su condición de paria social -el miedo y la resignación- y convertirse en una luchadora por la libertad, en un sujeto activo de la Historia y en todo un referente literario.
La madre

La madre

  1. Memorias de una suegra. George R. Sims. Siruela. Partiendo de la premisa de muy pocos se alinean con las suegras (madres después de todo) una de ellas, señora Jane Tressider, está decidida a poner las cosas en su sitio y a defender en su diario al grupo más difamado que existe sobre la faz de la tierra. Así que esta madre de nueve hijos, que nunca ha tenido miedo de decir lo que piensa, asume esa tarea y la compagina con otras labores no menos espinosas: mantener a raya a su irresponsable marido mientras se encarga de llevar su casa y, como no, las de sus siete hijos e hijas ya casados. Una joya satírica que, además de muy divertida, es una vuelta de tuerca a un rol tan ingrato como necesario
Memorias de una suegra

Memorias de una suegra

Doce novelas para leer y redescubrir Madrid

Pongamos que leo Madrid (y que Sabina me perdone la licencia). Pongamos que me pego un bibliogarbeo por los madriles, que recorro entre líneas las entrañas, las luces y las sombras de una ciudad muy, muy literaria, tremendamente magnética y bendecida con ese punto canalla que desarma y cautiva.

Qué, queridos, ¿os venís?

Os lo planteo porque en los anaqueles de reginaexlibrislandia hay muchos títulos con un punto en común: todos y cada uno de ellos hacen de Madrid un microcosmos poblado por personajes, escenarios e historias que constituyen la materia con la que grandes escritores hicieron literatura desde el Siglo de Oro hasta hoy.

Así que, presa de un ataque de madriditis aguda, me he metamorfoseado en un híbrido de librera y chulapa con el pelucón aprisionado en la pañoleta y coronado con un clavel para, con la falda almidoná y los libros apoyáos en la cadera, ir y venir de mis baldas al escritorio contoneándome como buenamente puedo al compás de un chotis para mostraros doce novelas con las que podréis leer y redescubrir Madrid entre líneas.

¿Listos? Van:

  1. Un día de cólera. Arturo Pérez Reverte. Alfaguara. (Madrid napoleónico).

Que te guste o no la pluma de Pérez-Reverte es una cosa, pero poner en duda su talento para novelar la historia de España y, en concreto, del levantamiento de los madrileños en 1808 sería una estupidez. Por eso Un día de Cólera merece una lectura. Por sus páginas se pasean los rostros anónimos que Goya inmortalizó en sus grabados y cuadros, y que nos cuentan por qué se desató la furia del pueblo, cómo as mujeres plantaron cara a cuanto gabacho se cruzaba en su camino y cómo reaccionaron los militares españoles, paralizados ante la encrucijada de aguardar órdenes o unirse a sus vecinos. Un viaje violento y estremecedor a un 2 de mayo de 1808 que cambió el curso de la historia.

Un día de cólera

Un día de cólera

  1. Fortunata y Jacinta. Benito Pérez Galdós. Asutral. (Madrid decimonónico).

Galdós construye un vasto universo de ficción que se mueve entre esos dos polos que son las mujeres que dan título al relato y los mundos que representan en el Madrid del último tercio del SXIX. Una inmersión total en el tejido urbano, comercial, social y arquitectónico del centro histórico de la ciudad (la calle de la Paz, Pontejos, plaza Mayor, calles de la Sal, Postas, Arenal, Cava de San Miguel, Cuchilleros, Toledo, etc.). La unión de Galdós (“Benito, el garbancero”) y Madrid es tan esencial, tan íntima y honda que, una vez alcanzas el final, no aciertas a distinguir el Madrid real del Madrid galdosiano. Una novela inmensa, emocionante, monumental e imprescindible.

Fortunata y Jacinta

Fortunata y Jacinta

  1. La Colmena. Camilo José Cela. Alianza. (Postguerra, años 40).

Cela se llevó el Nobel de literatura por obras como ésta. Leer La Colmena es vivir una época fascinante y agridulce con un realismo tan perfecto que te clava en unos días al azar en el Madrid de 1943, cuatro años después del fin de la Guerra Civil. Te zambulles en aquel Madrid deprimido y desesperanzado pero muy culto que arrastraba sus penas por los cafés y sus calles melancólicas, cargado de historias que se entrecruzan y forman un mosaico vívido. Son vidas y retazos de experiencias castizas que nos hacen retroceder en el tiempo. El estilo narrativo tan preciso es clave en ello. Nada como La Colmena para entender la esencia del Madrid de ayer y siempre.

La colmena

La colmena

  1. El gran momento de Mary Tribune. Debolsillo. J. García Hortelano. (Años 60)

Un grupo de amigos burgueses en el Madrid de los años sesenta se revoluciona cuando entra en sus vidas Mary Tribune, una millonaria estadounidense extravagante y obsesiva con la que el narrador liga una noche de farra. Esa irrupción conmociona y precipita las aventuras emocionales de estos varones cargados de prejuicios, movidos por la costumbre y de escasa educación sentimental, que son narradas con sarcasmo desde una ciudad donde el alcohol y las fiestas y ese no-se-qué entre rancio y perturbador son moneda corriente. Una de las novelas más memorables e hilarantes de García Hortelano, peso pesado de la literatura española del siglo XX.

El gran momento de Mary Tribune

El gran momento de Mary Tribune

  1. El cielo de Madrid. Julio Llamazares. Alfaguara. (Los 80: movida madrileña)

En la España de los años 80 acabó la dictadura, llegó la democracia y, con ella, el despertar al mundo y a la libertad, y nacieron y se abandonaron sueños. En medio de esas turbulencias, Carlos y sus amigos, un grupo de artistas y escritores llegan a Madrid buscando el triunfo y la felicidad, y pasan de la inocencia a la madurez, de la juventud al éxito o al fracaso, para descubrir que ni el éxito ni el fracaso son como imaginaron. A través de recuerdos y momentos vividos en la ciudad, se eleva hasta el cielo el mito de una generación, la de la movida madrileña, cargada de irreverencia y diversión, pero presa de infiernos como la heroína. Una manera única de entender el cielo de Madrid.

El cielo de Madrid

El cielo de Madrid

  1. 6. Historias del Kronen. José Ángel Mañas. Destino. (Primeros  90s)

Finalista del Premio Nadal 1994, se convirtió en el icono de toda una generación a la que dio nombre, e irrumpió en el mundo literario como una nueva forma de narrar y de ver la realidad. Carlos es un veinteañero de familia acomodada que vive de noche. El sexo, el alcohol, las drogas y la ausencia de escrúpulos son sus compañeros de correrías; el desprecio por los débiles, por el trabajo y por las mujeres, su bandera. Pero llega el día en que las aventuras empiezan a sucederse una tras otra como en una noche continua, viviendo cada momento como si fuese el último, hasta precipitarse en una vertiginosa espiral hacia la destrucción.

Historias del Kronen

Historias del Kronen

  1. Beatriz y los cuerpos celestes. Lucía Etxebarría. Destino. (Últimos 90s)

Lucía Etxebarría es un personaje polémico, sí, pero también es una gran escritora, de ahí que su Beatriz y los cuerpos celestes se llevara el Nadal en 1998. Así que si tienes prejuicios hazte un bibliofavor y apárcalos, porque es una gran novela que te clava en un Madrid desenfadado a finales de los 90’s, donde que los problemas de los protagonistas están relacionados con la identidad sexual y los prejuicios sociales. Los convencionalismos saltan por los aires en la historia de Beatriz, enamorada de Mónica, de la noche madrileña y de sus encantos. Coqueteos, sexo y drogas alejan a Beatriz de Mónica y de Madrid rumbo a Edimburgo. El amor como terapia y como revulsivo, con Madrid de telón de fondo, para fagocitarte como lector en una historia sin fisuras.

Beatriz y los cuerpos celestes

Beatriz y los cuerpos celestes

  1. Mercado de Barceló. Almudena Grandes. Tusquets. (1999 – 2000)

Cuando en 1999 Almudena Grandes inició una nueva serie de artículos en El País Semanal y quiso dotarlos de un hilo conductor, pensó que algo tan cercano y fascinante como un mercado de abastos podría servirle como marco ideal para poblarlo con «los humildes afanes y trabajos de la cotidianidad más estricta». Escogió el céntrico Mercado de Barceló, situado en el Madrid castizo, y lo convirtió en un microcosmos de pequeñas historias, pero también en un infalible sismógrafo sociológico, que recogía indirectamente preocupaciones y tendencias encarnadas en personajes y conversaciones y, en definitiva, retrataba la ciudad en sí. Cerrada la serie a finales de 2002, este libro reúne una cuidada selección de aquellas crónicas y relatos.

Mercado de BarcelóMercado de Barceló

Mercado de Barceló

  1. Saliendo de la estación de Atocha. Mondadori. Ben Lerner. (2013)

Un yanqui en Madrid podría ser el subtítulo de la novela de Ben Lerner, uno de los mejores novelistas jóvenes de EEUU. Lerner introduce al poeta Adam Gordon para narrar el choque cultural que supone para un estadounidense vivir un tiempo en Madrid. Adam disfruta de una prestigiosa beca en Madrid para realizar su «proyecto poético», mientras trata de desentrañar su identidad y su relación con el arte. Animado por cantidades ingentes de café que rebaja con tranquilizantes que él mismo se prescribe, la búsqueda de Adam le llevará a conocer una ciudad que está a punto de vivir un capítulo clave de su historia. A caballo entre la tragedia y la comedia, el desdén y la burla, nunca está de más redescubrir Madrid desde la perspectiva de un guiri.

Saliendo de la estación de Atocha

Saliendo de la estación de Atocha

  1. Manolito Gafotas. Elvira Lindo. Alfaguara. (90s, pero es atemporal) 

Elvira Lindo se sacó de la manga un personaje, primero radiofónico y luego de tinta, que conecta con cualquier perfil lector. Manolito es el prototipo de niño gafotas y patoso, dispuesto a dar siempre su visión de las cosas, que todos hemos tenido de compañero en el colegio. Del muy madrileño barrio de Carabanchel (Alto), donde su familia y vecinos se dejan el lomo para llegar a fin de mes, sus monólogos interiores denotan una inteligencia sibilina y certera. Obra cargada de infinitos guiños cómicos a una sociedad desencantada, la de los 90’s españoles, vista desde los ojos inocentes de un niño. Manolito Gafotas debería ser “de tenencia y lectura obligada en cada casa por prescripción librera”.  Otro Madrid, agridulce, tierno y, sobre todo, auténtico. A modo de curiosidad hiriente: ¿Sabíais que Manolito Gafotas es ‘too heavy’ para EEUU?

Manolito Gafotas

Manolito Gafotas

  1. Escrito en el Cielo. VVAA. Alfaguara. (1977-2017)

La ciudad de Madrid vista a través de los ojos de los mejores escritores españoles e hispanoamericanos a través de más de ciento cincuenta fragmentos, extraídos de novelas y relatos publicados entre 1977 y 2017. Desde el Madrid de Alfonso XIII hasta el de hoy mismo, todo cabe en estas páginas: la guerra, la represión, el arte, el cine, el teatro, el fútbol y los toros, los atentados terroristas, la vida cotidiana y los actos singulares, lo que ocurre tras los visillos y lo que pasa en la calle, lo que se sueña y lo que se pierde, la famosa Movida por la noche y el Rastro por la mañana, las copas al atardecer y las desventuras amorosas a cualquier hora, las intrigas y los asesinatos. Todo ha quedado escrito en el cielo, en ese lienzo de la imaginación, azul y de mil colores, en el que el mundo es tan cierto como el «real».

Escrito en el Cielo

Escrito en el Cielo

  1. Madrid Negro. VVAA: Siruela Policíaca.

Esta estupenda antología reúne a algunos de los autores más destacados de la novela negra en castellano, en un recorrido criminal por los barrios emblemáticos y cualquier otro rincón con un turbio secreto y algún que otro cadáver de la ciudad de Madrid. Marta Sanz, Alfonso Mateo Sagasta, Juan Aparicio Belmonte, Lorenzo Silva, Vanessa Monfort, Patricia Esteban Erlés, Berna González Harbour, Jesús Ferrero, Fernando Marías, Andrés Barba y Domingo Villar. Otra forma de darse un bibliogarbeo por un Madrid, esta vez aún más canalla, chulesco, tentador, desencantado y sórdido si cabe.

Madrid Negro

Madrid Negro

Obviamente entre estas doce citadas no están ni mucho menos todas las novelas que son Madrid entre líneas.

Es una selección reginaexlibrislandiana pensada para satisfacer distintos tipos de paladares librescos. Seguro que podéis aportar vuestro bibliogranito a este peculiar cocido madrileño-libresco; ¡verdad, queridos?

Y para terminar y ponerle banda sonora a nuestro bibliogarbeo por los madriles os dejo con Sabina y su colosal Pongamos que hablo de Madrid: